Todo Mío

IV

¿Por qué él?

Había pasado una semana desde aquél pequeño e incómodo encuentro. Kevin había prácticamente corrido a su hogar luego de agradecerle al azabache.

No recordaba con exactitud lo que había pasado esa noche, ¿le habría dicho algo?

"Vamos viejo, ni que fuera tan aburrido lo que te cuento." Se quejaba el de pelo turquesa.

"Lo siento Nat, estoy un poco distraído." Pues a decir verdad estaba bastante distraído.

Nathan lo observó mientras rodaba los ojos, "¿cuánto piensas esperar?"

Kevin se sobresalto al escuchar esa pregunta, pues aunque sus dos mejores amigos sabían, era un tema que ninguno verdaderamente tocaba, y no por nada malo, simplemente entendían que así lo prefería él.

"No lo sé viejo, hay veces que deseo correr y besarlo, ¡mandar todo al carajo!" Rascaba su nuca de forma incómoda mientras hablaba. "Pero no sé si pueda..."

"¡Que te importe poco lo que diga la gente, cariño!" Eran sus mejores palabras de aliento, no quería presionar a su amigo, pero deseaba ayudar de alguna manera.

"Ni siquiera es eso," sonrió con tristeza. "No quiero ser rechazado, Nat."

Su amigo se mantuvo en silencio, entendía lo difícil que podía ser su situación, la dulzura siempre había sido extraño, delicado, cuidadoso, quizás un poco afeminado, pero eso no indicaba que fuese homosexual.

"Creo que ya debo irme," lo había sacado de sus pensamientos. Su amigo se puso de pie y le sonrió.

"Seguro encontrarás una manera," le comentó Nathan a manera de despedida, al ver como su amigo bajaba las escaleras en dirección a la salida. "¡Si él no te acepta aquí estaré yo para ti bebé!" Gritó mientras su amigo cerraba la puerta al irse.

"Creo que debemos ayudar a la pequeña calabaza ;)"
-Nathan
4/07/18 7:46pm

"¿Con lo que creo que es? e.e"
-Nazz
04/07/18 7:49pm

"Eso es así, chiquita (;"
-Nathan
04/07/18 7:50pm

A Nathan le gustaba esto de jugar a cupido, sabía que no sería fácil lidiar con Kevin, ¡Kevin es la definición de terquedad! Nadie en su sano juicio va encontra de la calabaza. Nadie, excepto sus mejores amigos.

Lunes por la mañana, que asco.

"Debería faltar," murmuró de mala manera aplastando su almohada en su cara.

"Nada de eso," respondió su madre con un tono dominante entrando a su recámara.

Como pudo, y luego de una intensa guerra con su madre, el joven de mecha corta ya se encontraba caminando por los pasillos de su escuela.

Tropezó con muchas personas mientras caminaba hacía su casillero, cosa que empeoraba su mal humor. Y como si no fuera suficiente, habían varias personas alrededor de un boletín de anuncios, impidiendo que Kevin llegara a su destino.

"¿Y ustedes que tanto ven?" Le preguntó el chico a varias niñas que por allí habían.

"Habrá una caja de confesiones," comentó una rubia.

"Las más impactantes o las más relevantes serán puestas al público." Continúo una castaña de anchas caderas.

"¡Todos los viernes por un mes!" Chilló de emoción la rubia que había comenzado a hablar.

"¿A quien se le ocurrió esa mierda?" Preguntó el capitán del equipo de fútbol americano.

"No dice," volvió a comentar la castaña mientras se encogía de hombros y se marchaba con su amiga.

Era una basura de idea, y probablemente tendría basuras de confesiones, chismes entre mujeres y vulgaridades departe de la mayor parte de la comunidad de varones.

Kevin se sentía irritado, y era evidente que todo le molestaba, así que siguió su camino hasta su casillero, sin saber que un par de ojos lo miraba de manera emocionada.

"Podría ayudar," se susurró ese par de ojos al terminar de leer el papel plasmado en el boletín.

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Anywayyyy
Ando de vacaciones, cero trabajo, cero universidad, cero estréssss. Ando felíz🎉

Espero que ustedes mis hermosas perlas de agua salada sean felices y se encuentren bien💛

Aquí les dejé un pequeño capítulo, diminuto y quizás no muy relevante. Pero ahora es que empieza lo buenoooo e.e

Nos leemos pronto...

agua de coco para el calor,
sabrina.
💞