Desayuno

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(JUNGKOOK)

Se despertó, y por unos segundos no entendió dónde estaba, hasta que recordó todo. Miró a su izquierda y ahí estaba el hombre que lo estuvo volviendo loco esas últimas semanas. 

Se giró hacia un lado y contempló  a un dormidísimo Seokjin.

Tenía los labios entreabiertos, el flequillo despeinado le caía suavemente sobre los ojos, y la sábana lo tapaba hasta un poco más arriba de la cadera. 

La luz entraba por la ventana entreabierta dejándolo ver ese espectáculo de persona que tenía acostada a su lado.

Jungkook sonrió. Se sentía feliz. La persona que él quería le había dado lugar a sus sentimientos, no entendía cómo, pero pasó. Tenía que cuidarlo. Él lo cuidaría. Seokjin era un chico muy especial, y tenía que merecerse sus besos.

Se acercó un poco más, y procurando no despertarlo comenzó a darle pequeños besos en la mejilla. 

Viendo que aquel no se despertaba, siguió por la línea del cuello, agregando pequeñas lamidas de vez en cuando. Sintió cómo su cuerpo reaccionaba a hacerle eso al otro, pero no quiso parar. Se acercó más a Seokjin, y corrió un poco la sábana.

"Dios, este hombre es perfecto" - pensaba Jungkook, mientras se comía con los ojos a Jin. Aquel seguía durmiendo como si nada.

Jungkook terminó de correr la sábana, dejandolo a Jin completamente desnudo, y se recostó suavemente a su lado. Con una mano comenzó a acariciar su pecho, mientras seguía con los pequeños besos y lamidas por su cuello. De a poco fue bajando, y se detuvo cuando escuchó suspirar a Seokjin. Lo miró y lo vió removerse un poco, pero no se despertó.

Siguió con los besos y las caricias, muy suaves, pero viendo cómo el cuerpo del más grande comenzaba a reaccionar a sus toques.

Jungkook sonrió y se puso un poco más arriba de Jin, tratando de descargar su peso sobre el colchón. Jin tenía las piernas un poco separadas, así que pudo acomodarse en el medio, sin molestarlo. Siguió besando su pecho, mientras acariciaba sus muslos. Lamió uno de sus pezones y escuchó un murmullo de Jin, quien ahora sí comenzaba a despertarse. Aumentó la fuerza de sus besos, y bajó un poco más. Ahora sus manos acariciaban el miembro de Jin, que ya estaba bastante húmedo, igual que el suyo. 

Comenzó a masturbarse a él y a Jin al mismo tiempo, dejando salir suaves gemidos. Bajó su cabeza, y metió el miembro completamente en su boca. Sintió cómo rápidamente comenzaba a endurecerse gracias a su lengua, y aumentó el ritmo, sin dejar de masturbarse.

De pronto sintió unas manos que tomaban su cabeza y las caderas de Jin comenzaron a moverse, haciendo que aquello que se movía en su boca llegara casi al final de su garganta, ahogándolo un poco. Levantó la cabeza, y miró un momento hacia arriba, viendo a Jin mirándolo con los ojos entrecerrados, y mordiéndose los labios.

- C.. Cookie.. -susurró Jin, entre suaves gemidos.

Dejó de masturbarse, y usó ambas manos para tocar al mayor, quien se retorció de placer. 

Jugkook siguió masturbándolo con una mano, mientras se acercaba a Jin para besarlo. Adentró la lengua a su boca, y lo besó deseperadamente, mientras sentía cómo el otro lo empujaba hacia abajo. Quedó sentado sobre él, abrazándose a Jin, mientras lo besaba con fuerza. Sintió como Jin lo apretaba contra él, y él comenzó a frotarse sobre él buscando placer. Su pene había quedado entre ambos cuerpos, y lo sentía durísimo mientras se movía sobre la erección del otro. Sintió las manos de Jin sobre sus caderas, y cómo hundía sus dedos.

Ambas erecciones se encontraron de golpe, y los dos gimieron y aumentaron los movimientos. Jungkook tomó ambos miembros en sus manos, y comenzó a frotarlos juntos. A su vez, Jin seguía apretándolo contra él, y empujando hacia arriba sus caderas, una, y otra vez, cada vez más rápidamente, hasta que Seokjin acabó sobre el pene de Jungkook, cosa que hizo que éste no se demorara ni unos segundos más en también acabar.

Ambos con el pecho completamente mojado, y agitados, cayeron sobre el colchón, tratando de recuperar el aire perdido.

- Buen día, hyung -sonrió Jungkook.

- Buen día, Cookie..-susurró Jin.

Después de unos minutos de descanso, Seokjin se levantó diciendo que se iba a dar una ducha. Cuando salió, tenía puesta una bata rosa, y tenía las mejillas coloradas del agua caliente. Jungkook sintió que verlo así hacía cosas en su corazón, y pensó "Me gustaría poder tomarle una foto en este momento", y sonrió. 

- Qué? -preguntó Jin, cuando vió al otro mirándolo mientras sonreía.

- Nada, que sos demasiado lindo -dijo Jungkook- Y que me gusta como te queda esa bata. Sos muy, muy lindo..

Seokjin sonrió tímidamente, y sacudió una mano como para sacarle importancia a lo que había dicho. Pero lo rojo de sus mejillas se extendió hasta sus orejas, y la sonrisa no se le fue hasta dentro de un rato.

- ¿Te querés dar una ducha mientras preparo el desayuno? -preguntó Jin- Osea.. si querés desayunar.. No tenés por qué quedarte si no querés. Pero la verdad es que cocino bastante bien. No que quiera que te quedes. Osea sí quiero... No.. Bueno.. Los panqueques son fáci..

Jungkook comenzó a reirse, interrumpiéndolo, y se acercó rápidamente a Seokjin, tomando su rostro entre las manos, y dándole un montón de besitos en toda la cara.

- Obvio que me quiero quedar a desayunar - le dijo, dándole un beso en los labios, y luego otro beso más, para dejarlo y meterse rápidamente al baño. Tenía mucha hambre. Y también quería panqueques.

Profesor Kim Seok Jin - Escritura CreativaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora