Dando esa caminata nocturna que tanto había ansiado. Seguí caminando con la cabeza baja y las manos en las bolsas de mi sudadera que era tan oscura como lo era el cielo nocturno. Tenía puesta mi pijama y estoy segura de que si alguien mi veía me tacharían como loca, pero no me importaba. Últimamente no había prestado atención a las pequeñas cosas de las que siempre me daba cuenta como, el humo que desprende la comida de mi restaurante favorito cuando está muy caliente, o como lo es el simple hecho de volver a pasar por ahí. Estaba perdiendo mi esencia y eso estaba mal, Lucy seguía sin aparecer, y no es que ella haya sido una persona que marcara mi vida por siempre, pero algo en mi interior me decía que debía llegar al fondo de esto y no solo dejarlo pasar. Pero no sabía como.
Mientras estaba en mi pensamientos, un sonido se escuchó de fondo. Era alguien llorando... Rápidamente me alarmé teniendo en cuenta que podía ser Lucy, ya que el llanto era definitivamente de una mujer. Dirigí mi vista a todas las direcciones y traté de agudizar mi oído para poder escuchar por donde provenía tal llanto, localicé el lugar por estar cerca de mi. Era un callejón. Oscuro. Y al parecer llorón.
-¿Lucy...?- Pregunté primero antes de siquiera pensar en entrar a ese lugar de apariencia sospechosa.
-¿¡Alice?! ¿Eres tú?- Debo decir que si me sorprendí al escuchar una respuesta y más con su verdadera voz, aunque sentía algo sospechoso.
-SI, ¿Tu eres Lucy?- Se que suena estúpido, pero quería probar algo.
-¡SI, soy yo! ¡Ayúdame! ¡El ya viene!¡¿Qué no me quieres ayudar!? ¡Ven, acércate!- Esa definitivamente no era ella... Y por más que la quisiera de vuelta, no arriesgaría algo en lo que estoy segura, yo saldría perdiendo.
-Se que no eres ella, déjala en paz- le dije a lo que sea esté usando la voz de mi compañera.
-Vaya...- Dijo esa misma voz que había estado escuchando los últimos días cerca de mi oído haciendo que yo volteara con el mismo resultado. Nada.
-¿Por qué no te muestras? ¿Acaso eres cobarde?- La verdad no tenía miedo de hablarle así a el porque ya había dicho que no podía hacerme daño ¿Qué no?
-No, solo que estoy guardando lo mejor para el final, no te desesperes querida-
-No me digas así-
-¿Por qué? ¿Te incomoda querida?-
-No, solo me desagrada la idea de que alguien como tu este diciendo tal palabra hacia mi. Además, estoy segura de que tu tuviste algo que ver con la repentina desaparición de Lucy, digo, tu estabas ahí-
-Hasta detective saliste, si que se le pasó la mano a ese- Dijo susurrando esto último -Y si. Yo fui el que "secuestró" a tu amiguita.
-¿Quieres decir que sigue viva?-
-No exactamente... Quiero decir que de algún modo tengo su cuerpo- Dijo con su hasta ahora típica voz. Y yo no lloraría, me venía esperando esto desde hace tiempo.
-No lo puedo creer... Y todavía eres tan cínico de decírmelo así no más-
-No creo que haya sido del todo malo, la había estado observando y su vida era un asco, ella tenía una mirada- lo interrumpí.
-¡Cállate! No sigas diciendo cosas que seguramente tu inventaste de ella-
-Te diría que le preguntaras pero no creo que se pueda justo ahora. ¡Espera! si se puede, solo tienes que decirme tu mayor temor-
-Ya te dije que no tengo ningún miedo...-
-Claro que lo tienes, todos lo tienen. Solo que no te das cuenta por ahora-
-Bueno, considerando el hecho de que aunque tuviera uno no te lo dijera, ¿porqué te importa tanto?-
-Porque eres una amenaza-
-Yo no mato ni a una mosca-
-Pero yo no se eso, por eso estoy aqui, ya que no puedo entrar en tu mente voy a persuadirte-
-Pues de una vez te aviso que no gastes tu tiempo, no pienso decirte algo como eso, menos ya que dijiste que me harías daño. No soy tan estúpida para que sepas...
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PODER EN LO PROFUNDO
Fanfiction-¿Quién eres tú?- Después de que Alice fuera transferida en su trabajo como enfermera a la pequeña ciudad de Derry, conoce a un singular payaso que cambia por completo su percepción de las personas. -¿Yo? Soy tu peor pesadilla- (UNIVERSO FACULTATIS)...