Remembering [Auryn]

Capítulo 6: ¿Bebé?

CAPÍTULO 6

¿Bebé?

Me despierto por culpa de un fuerte dolor de barriga, tengo ganas de vomitar y cuando me levanto de la cama me mareo. Me dirijo al baño, me lavo la cara y me invade una sensación de vómito en mi garganta. Así que me voy corriendo al inodoro, me arrodillo y empiezo a vomitar. No recordaba cómo era vomitar y ahora que lo estoy haciendo solo puedo pensar en lo asqueroso que es esto y solo espero que Álvaro no me vea en esta situación.

-¿Andrea?

Mierda, ¿en serio? Estoy intentando que no me vea así y entonces aparece...

-Oh, ¿qué pasa?

Y cuando intentó responderle me vuelve a invadir la sensación de vómito en mi garganta y en apenas un segundo ya estoy volviendo a vomitar. Álvaro corre hacia mí y me sujeta el pelo y mi cabeza. Cuando he terminado de vomitar Álvaro coge una toalla, la moja y me la da. Me limpio la cara y me levanto del suelo.

Oh, esto ha sido asqueroso... Al levantarme me mareo y veo puntos negros, me agarro a lo primero que siento, creo que es el brazo de él. Empiezo a tambalearme y pierdo fuerza en las piernas, noto algo en mi frente, parece una mano.

-Mierda Andrea, estas ardiendo, ven a la cama.

Me gustaría hacerle caso y poder ir a la cama, pero no puedo. Mi vista se ha tornado completamente negra y la voz de Álvaro se ha vuelto lejana.

-Andrea, Andrea por favor...

Es lo último que oigo, porque caigo encima de algo, algo que parecen unos brazos, unos brazos fuertes...

Me despierto cansada, con dolor de barriga y de cabeza. Álvaro se acerca a mí con una bandeja que lleva zumo de naranja y pan tostado.

-Hola mi amor, ¿estas mejor?

Se acerca a mí y me da un beso corto en los labios. Pero aun así ese beso provoca algo especial que nunca podré describir.

-¿En serio? ¿Me acabas de besar?

-Creo que sí.

-Oh Álvaro, mi boca sabe horrible, estoy con gripe...

-Pero a mí solo me importa sentir tus labios sobre los míos...

-¡Álvaro!

-¡Qué!

-No seas así...me siento mal

-¿Así, cómo?

-Pues tan así...

-¿Así?

Y me vuelve a besar, pero está vez es más largo. Pero me separo rápidamente cuando noto un pinchazo en mi cabeza. Suelto un gruñido a causa del dolor y muestro un mueca rara. Álvaro se ríe y yo solo hago malas caras.

-Eso es horrible, no te rías.

-¿Vamos al médico?

-No me gusta ir.

Pongo cara triste y tengo la esperanza de que quizás no me obligue a ir.

-Pues vamos a ir, ahora mismo.

-No, por favor…- pongo cara de cachorrito, pero no funciona.

-Metete a la ducha si quieres y vamos.

-Vale.- digo rendida.

Me levanto arrastrando los pies y me dirijo a la ducha. Preparo las toallas y me meto dentro de la bañera. Después de treinta minutos estoy completamente lista, así que bajo las escaleras y llamo a Álvaro.