Remembering [Auryn]

Capítulo 10: Estoy bien

CAPÍTULO  10

 Estoy bien

Llevo dos días ya en casa Mirela. Apenas salgo de la habitación, no como casi y mis ojos están rojos de tanto llorar. Por las noches no puedo dormir, solo pienso en él. Parecía que todo iba a ir bien, que tendríamos nuestra propia casa con nuestro hijo y que íbamos a ser felices. Pensar en que ahora mismo podría estar comprando nuestra casa si yo no hubiera ido al quiosco hace que me ponga a llorar más. Sueños completamente rotos diría yo. Y es que nunca se sabe si en tan solo cinco minutos tu vida puede cambiar tanto, de completa felicidad a tristeza, de ser fan a amiga y después a novia de tu ídolo, de pasar desapercibida a que medio mundo sepa quién eres…Y es que mi vida ha cambiado tanto en tan poco tiempo, que a veces no puedo ni reconocerme.

-¡Andrea! ¡Hoy nos vamos a visitar Los Ángeles!

-Aprecio tus ganas de querer sacarme de está habitación pero Mirela, no quiero salir de aquí.

-Venga ya, llevas dos días sin salir de aquí. Tu cara está horrible y tienes las marcas de las sabanas, ni siquiera has llamado a tus padres diciéndole que estás fuera del país, espera ¡ni siquiera has cogido el móvil en lo que llevas de días! ¡Estas totalmente antisocial! Coge la canon y vamos a visitar Los Ángeles.

-Mirela…

-¡Espera! Primero dúchate ¿sí? ¡Ah! Y maquíllate y ponte guapa, ¡no puedes salir así! Te espero abajo.

Cuando se pone así sé que ya no puedo hacer nada. Tendré que hacer lo que diga ella.

Me levanto despacio, cojo la ropa interior y voy al baño. Me miro al espejo y ¡dios! ¡Estoy horrible! Me meto a la ducha y me paso media hora entera bajo el agua. Tengo que aplicar un montón de mascarilla ya que mi pelo está muy enredado y cuando creo que ya es suficiente salgo y me enrollo en la toalla. Me seco y me visto con la ropa interior, me tapo y salgo hacía mi habitación. Una vez allí busco mi maquillaje, cuando lo tengo me pongo delante del espejo. Saco todo lo del neceser y empiezo con un anti-ojeras. Después de ponerme la base y haber tapado todas las imperfecciones, me pongo rímel y el delineador.

¡Madre mía! No parezco la misma.

 Me río por primera vez en dos días y empiezo a buscar un vestido apropiado para visitar el mismísimo Hollywood. Al final opto por un vestido que me llega por las rodillas, de media manga y verde azulado. Me pongo unas manoletinas negras con un bolso grande negro. Busco mi canon y la meto en el bolso. Añado un toque de gloss a mis labios y cojo el móvil. Bajo las escaleras y ahí está Mirela esperándome.

-Uooo no pareces la misma.

-Gracias.

Nos metemos en el coche y decido encender el móvil. Mis notificaciones empiezan a pitar como locas así que lo pongo en silencio.

-Vas mejorando.- me dice Mirela con una sonrisa.- Me tenías muy preocupada, Andrea.

-Estoy bien.

-Ahora sí, pero me preocupé mucho durante estos días. Nunca has estado así.

Asiento y vuelvo con mi móvil. No sé qué decirle, tiene tanta razón, nunca he estado así. Empiezo con el whatsapp. Tengo dos o tres mensajes de cada chico de Auryn. Opto por hacer un grupo y ahorrarme escribir tanto.

“Estoy bien, ahora voy a visitar la ciudad. Lo siento por no contestar antes, tenía el móvil apagado. Mi embarazo está bien jajja. A veces se me olvida que llevo un bebé ahí dentro.”