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Cosme Ocaña fue revisado en el hospital por su golpe en la cabeza y aunque los médicos insistieron en que se quedase en observación, él pidió el alta voluntaria y regresar a casa con su familia.

Belén estaba perfectamente, tan solo un poco alterada por el momento vivido pero su hija Aitana tenía un bazo roto, por lo que necesitó que se lo inmovilizaran.

Poco después y tras comprobar que todo estaba bien, los tres salieron del hospital para volver junto con Rick, el cual fue a buscar el coche al aparcamiento, mientras ellos esperaban en la puerta.

Poco después y tras comprobar que todo estaba bien, los tres salieron del hospital para volver junto con Rick, el cual fue a buscar el coche al aparcamiento, mientras ellos esperaban en la puerta

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...—¿Y qué haremos ahora Cosme?, nuestra hija no tiene protección y yo tengo miedo de que tomen represalias contra nosotros. ¿Quién te dice a ti, que esos delincuentes no van a volver?—Habló temerosa su esposa.

—Tranquila cielo, lo de la cuestodia de Aitana lo veremos con detenimiento. No pienso contratar a otro tipo que nos venda al mejor postor como hizo Joao. Debe ser un hombre incorruptible y dispuesto a velar por ella y por sus intereses.

De repente el teléfono de Belén sonó, sobresaltandolos un poco.

—Numero desconocido —dijo la mujer extrañad a, mirando la pantalla

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—Numero desconocido —dijo la mujer extrañad a, mirando la pantalla.

—No contestes mamá—dijo Aitana asustada.

Belén miró a Cosme y éste asintió.

—Si... diga—habló finalmente.

—Hola esposita, dile a tu maridito que se ponga.—habló la voz al teléfono.

La mujer se lo pasó a su marido sin entender nada.

—Dice que es para ti.

El magnate lo cogió frunciendo el ceño.

—Si diga... ¿quién es?.

—Hola Cosmito, ¿te acuerdas de mí?.

Al instante el empresario se tensó.

—¿Qué qui-quiere?, déjenos en paz...ya t-tienen el dinero—dijo asustado y mirando a todos lados, ante las miradas confusas de su esposa  y de su hija.

—Tranquilo hombre... tan solo quiero advertirte—rió la voz al teléfono— Como le cuentes algo a la poli o a alguien más de todo esto, el delicado bracito de tu hijita no será lo único que le rompamos...¿Está claro?.

—Sí... sí en-entendido—dijo éste tembloroso antes de colgar.

—¿Qui-Quién era cielo?, ¿eran ellos?, vendrán a por nosotros ¿verdad?—preguntó la mujer asustaba y abrazando a su hija, la cual lloraba aterrada.

—¿Qué está pasando papi?, ¿por qué no nos dejan tranquilos?.

—No pasa nada cielo, no temas ya está todo bien—dijo su padre acariciándole el pelo—...todo está bien.

Tras llegar Ricky con el coche y subir todos a bordo, el teléfono del empresario volvió a sonar pero esta vez era el comisario Guix, el cual quería que se pasase por la comisaría para prestar declaración.

Tras dejar a sus mujeres al cuidado de Roi, el empresario y su guardaespaldas fueron al departamento de policia para hablar de lo sucedido.

...—Bien señor Ocaña, tenemos el cadáver de su empleado y le están practicando la autopsia. ¿Hay algo más que nos pueda decir a cerca de él?. Por lo que sabemos, al parecer Joao aprovechando que sus compañeros dormían les disparó el dardo traquilizante, luego sigiloso esperó al guardia nocturno que hacía una nueva ronda por la casa y los jardines y lo paralizó, por último salió y se lo hizo también al guardia de la habitación de los monitores, que le abrió confiado.

El magnate entonces recordó la llamada y las palabras del jefe de los delincuentes que habían irrumpido en su casa.

—Si comisario... fue el, Joao Henrique, el guardaespaldas que se encargaba de custodiar a mi querida hija, el trabajaba con esos mal nacidos. L-Lo contratamos a través de la agencia como a los demás pero la verdad se veía muy necesitado, decía que tenía a su madre enferma y muchas deudas, aunque quizás era mentira. Menos mal que la vida ya se la ha cobrado y se ha llevado merecido—dijo el margnate muy molesto.

—Bien señor Ocaña, hablaremos con la agencia de guardaespaldas y que nos manden su expediente, lo investigaremos. En cuanto tengamos noticias le informaremos, mientras tanto debería buscarse personal cualificado y que no le venda a otros posibles delincuentes.

—Si agente... gra-gracias de nuevo y descuide así lo haré.

De repente el agente en cubierto, Luis Cepeda entró con un maleante esposado y todos lo aplaudieron y victorearon.

—Wow... eres el mejor. Por fin alguien atrapó al cabrón ese.—dijo otro agente.

—Si...bravo Cepeda, eres el mejor...

Entonces a Cosme se le ocurrió una idea.

—Comisario...emm...usted podría prestarme a uno de sus agentes para que sea el guardaespaldas de mi hija, pagaré lo que sea.

—Bueno… la verdad es que no es el procedimiento habitual, nuestros agentes pueden hacer rondas y vigilar los alrrededores de su casa pero n...

—Por favor, donaré una gran cantidad a su departamento, para armamento, uniformes...—dijo desesperado el magnate— ...lo que sea comisario. Ponga la cantidad usted pero quiero a su mejor hombre, para el cuidado de mi querida hija.

—Tendrá noticias— le dijo Guix.

Finalmente Cosme salió de la comisaría y regresó a la mansión junto con su guardaespaldas, el cual ya estaba totalmente recuperado del dardo paralizante que le habían disparado, junto con Roi que estaba en la mansión y los guardias nocturnos, Raoul y Alfred, que ya habían regresado a sus casas.

1. Mi nuevo guardaespaldas (Aiteda)-TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora