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— ¡Waaah Jimin-shi!, ¡Estuviste fantástico!

El rubio aún con su sonrisa amplia observa al castañito frente a él totalmente emocionado. Ya había cambiado su vestuario en los camerines colocándose aquella preciosa camisa que le ha había regalado el platinado hace días y rizó su cabello para poder completar su conjunto.

— Bueno, creo que lo hice bien...

— ¡Qué dices!, toda la gente habla de tu presentación dicen do lo magnífico que estuviste.

El rubio sintió como sus mejillas enrojecer. Sentía una sensación de alivio y felicidad mezclados dentro de si. El hecho de haber bailado y haber mostrado aquél talento oculto le hizo sentirse más relajado pero ansioso por volver a hacerlo. Definitivamente tendrá e que repetirlo.

— Hyung, ya me tengo que ir. Necesitan personal en los comedores.

— Kookie -el castañito dirigió su completa atención al rubio-. ¿Quieres que éste sea nuestro primer día de cita?.

El menor se sintió completamente sorprendido, parpadeó varias veces para adaptarse a lo que su amigo había dicho. ¿A caso el mismo rubio le había propuesto una cita?.

— ¿En...en estos momentos hyung? -El menor observa la cantidad de personas que se encontraba fuera-. Hay demasiadas personas.

— ¿Te avergüenza de que te vean conmigo? -vió como el menor negó rotundamente-. Bueno, entonces no Hay nada que nos lo impida.

Ambos salieron de los camerinos y caminaron hacia la salida. El mayor dirigió la mirada hacia una persona especial que se encontraba conversando con el grupo de chicos. Se disculpó con el castañito y caminó hacia el grupo de personas. Todos al unísono observaron al rubio quien, con su sonrisa más amplia, se fue acercando a todos.

— ¡Jimin-ha! -el platinado se abalanzó hacia el mayor-. ¡Lo hiciste fantástico!.

— Gracias Taehyung -ambos se envolvieron en un cálido abrazo-.

— ¡No nos dijiste que harías un sólo Park Jimin!.

El rubio ahora dirigió su mirada hacia el presidente de la escuela quién mantenía una sonrisa en sus labios.

— Quería que fuera una sorpresa -el menor se soltó del agarre de su amigo y observó al pelirojo-. Aunque puedo decir que una persona si sabía.

— ¡Qué! -reclamó la castaña-. ¿Quién fué el que lo supo todo este tiempo?.

— Simplemente dejémoslo en el anonimato -habló el rubio-.

— Felicidades Jimin-ha, Estuviste estupendo.

— Gracias, muchas gracias a todos, en serio -buscó con la mirada en el grupo, una persona faltaba-. ¿Y Yoongi hyung?.

— Se retiró para entrenar antes de su partido.

El rubio asintió. Ahora dirigió su completa atención hacia la persona que lo había llevado al grupo de amigos. Una sonrisa de ambos se hizo presente y todos comprendieron que deberían estar a solas. El menor caminó tranquilamente hasta quedar en frente del chico.

— Jin hyung, gracias por haber venido.

— No me lo perdería por nada del mundo Park Jimin -el azabache revolvió los rizados cabellos del menor-.

— Jin hyung -el menor colocó una expresión de seriedad sin quitar lo feliz de su mirada-. Tenía mucho miedo de realizar mi salto. Creí por un segundo que no lo lograría.

— ¿Los nervios te traicionaron?.

— Si, Taehyung me dijo que si sentía miedo lo observara, así se me quitaría de inmediato -el menor negó con una sonrisa en su rostro-. Pero no pude encontrarlo hyung. Intenté localizarlo pero no pude.

Bonhomía [Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora