CAPÍTULO 8

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'Una vida olvidada'

12 de Julio de 1997

Ya han pasado cinco meses desde que un rayo de luz aparecío en la vida de Evan Wilde, un destello entre tanta desgracia.

No estaba seguro de sus decisiones en aquél momento, sin embargo, sabía que ya tenía todo listo para irse de aquél lugar al que llamaba "hogar" pero con una gran piedra en su camino que aunque doliera, tendría que dejarla ir pero con el fin de que algún día la volvería a ver.

Cojío aquél dije de una luna, poniendolo alrededor de la pequeña pulsera de tela que traía la bebé en su muñeca derecha. Sabía que esa niña jamás lo reconocería, y aunque hubiesen evidencias en fotos familiares estaba consciente que pronto esas imágenes desaparecerían.

—Pequeña... Tú serás la ideal para mamá, ahora que los abuelos están aquí, no sufrirás tanto... Te lo prometo, estarás bien.

Él joven observó por última vez aquella imagen dondé la bebé simplemente movía sus pequeñas manos, queriendo poder cargarla nuevamente pero era hora de irse, pronto todos llegarían.

Cogío la mochila del suelo, cerrando aquella puerta detrás de él, para finalmente alejarse de la casa en que crecío. Llegaría a un mundo donde ni siquiera él se imagino llegar, las cosas tomaron rumbos diferentes y la única quién podría traer de vuelta al mismo chico de esa noche, era nada más que ella... O tal vez no.

~·~

Lo peor que puedes hacer en este negocio es enamorarte, tenlo por seguro. Son las palabras que Bill una vez escuchó, pues en aquél momento aquella frase nunca tuvo sentido para él, y quiere creer que aún sigue asi de vigente, sin embargo, el pequeño brote de sentimientos lo hacía entrar en lo que ahora es su dilema, mientras tanto quiere disfrutar de esto, suponía que alguien como él también necesitaba un toque de aquella droga tan única, aunque sea solo segundos, tan solo esperando que dure tanto como se es posible. 

Pero sus actos pasados tomaran una gran consecuencia y sabía que aquello no se iría tan fácilmente. 

La chica rubia daba grandes pasos hasta llegar a aquella habitación, sacando de su bolsillo trasero una llave quien le dio entrada al lugar, viendo al chico colocando su camisa en su cuerpo pero este no se inmuto ante su presencia. 

—¿Quien te ha invitado a entrar? —le pregunto el castaño mientras se colocaba su chaqueta de cuero. 

—Tengo un duplicado de tu llave que por si no recuerdas, tu me lo diste —respondió la rubia de brazos cruzados.

—Claro... Pensé que con decirte que no vuelvas jamás sería suficiente para que tirases esa llave —dijo él mientras se peinaba el cabello con sus manos, demostrando frustración. 

—Te conozco Bill, estás feliz con que yo esté de vuelta—susurro ella, cerrando la puerta. 

—Si me conocieras, sabrías que no acepto a nadie aquí después de las dos, solo vete de aquí Bianca. —dijo él con la mandíbula tensa. 

—Ay dios mio... —dijo ella evocando una risa que estaba acabando con la paciencia de Bill —¿Bill Skarsgard echando a una chica de su habitación? ¿Enserio? De verdad que traes contigo muchas sorpresas, hace un mes apostaría a que ahora mismo estaría debajo de ti en esa cama... ¿Quien es? ¿Elena? 

—Eso no te incumbe a ti, ella no tiene nada que ver —dijo él dando unos pasos hacia Bianca.

—Elena no regresó anoche y tu tampoco, y por lo visto tus amigos están hechos polvos por lo que se te ocurrió hacer —bufo. 

—¿Cómo es que lo sabes? —preguntó mientras se acercaba a ella de manera amenazante

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—¿Cómo es que lo sabes? —preguntó mientras se acercaba a ella de manera amenazante.   

—Se muchas cosas Bill, se supone que tu estarías conmigo para cuando volviera, no con ella.   

—¿Porque estaría con una chica tan sucia como tu?   

—¿Como estas tan seguro que Elena no es tan sucia como yo? No olvides que ella me considera como su amiga, ten cuidado con lo que haces, porque fácilmente puedo hacer que se vaya... no sabia que te gustaban las ingenuas.   

Y con esto último aquella rubia se fue, dejando a Bill bastante frustrado, venía sospechando que algo así pasaría pero aquello no era de importancia hasta que Elena llegó a su vida.

~•~

La clase terminó y con ello vuelve a mi mente ese chico de ojos verdes que me tiene pensando en él casi todo el día, sin embargo, no lo he visto desde anoche, no sabía exactamente como sentirme o que esperar luego de aquello, solo sabía que debía continuar con esta pesada rutina.

Se suponía que Bill estaría en esta última clase conmigo pero no fue así, no quería pensar que tuvo que ver en algo con lo que esta metido ya que de tan solo pensarlo me provocaba un miedo irrevocable.

Estuve esperando a ver si se aparecía por algún lado pero me di por vencida, así que estaba dispuesta a ir a la biblioteca pero mi nuevo plan se vio interrumpido cuando un chico se interpuso en mi camino, por consiguiente había caído al suelo.

—Dios... Disculpa, disculpa... En verdad lo siento mucho —dijo estando algo avergonzado, mientras me ayudaba a levantarme.

—No te preocupes —dije un poco mareada por el repentino impacto.

—Aquí tienes... —susurró dándome algunas hojas que se me habían caído.

—Gracias —dije con una media sonrisa, mientras estaba dispuesta a irme.

—Espera, ¿Tú eres Elena Wilde, verdad? —-me preguntó causandome intriga.

—¿Cómo sabes mi nombre? —dije con el ceño fruncido.

—Todos hablan de ti, salir con un chico que su nombre está por cada pasillo, no se puede pasar por desapercibido —contestó con una sonrisa pero yo tan solo me quede callada, viendo mi reacción solo se inmutó a decirme unas cuantas palabras —Bueno, eso no importa, ¿Te gustaría venir a una fiesta?

Aquella pregunta me dejo pensando.

—¿Qué clase de fiesta? —pregunté.

Él emitió una sonrisa.

—Cada año hacemos una fiesta de bienvenida, la mayoría vendrá, será en la parte trasera de la universidad, puedes venir si deseas, así y conocerás más personas —respondió mientras metía sus manos a los bolsillos de sus pantalones.

—Gracias por tu invitación, lo pensaré —respondí.

—Será este sábado, no lo pienses mucho Elena... Será un placer tenerte ahí, casi lo olvido... Soy Marcus, espero verte ahí.

Y con una sonrisa, se fue.

Una fiesta de bienvenida, no suena mal.


Nota: Hola chicas, solo quería agradecerles por el apoyo que le están dando a esta historia que apenas comienza, en verdad espero que les esté gustando mucho, muchas gracias por sus votos y comentarios. ❤️

Sour Romance » Bill SkarsgardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora