El cazador de vampiros

III

-¡¿Que pasa aqui?!

30 minutos fuera y Jin encontraba a un Hoseok en el quinto sueño, un Bam acostado junto al mencionado acariciando su cabello y dos niños ebrios contando chistes a una araña que iba pasando.

-Están...adolescentes.

-Adolescentes mi trasero.

-Jin hyung -Jimin intervino- no puede hablar así.

-¿Por qué diablos no? . - refunfuñó.

-Usted ni trasero tiene - es ahí donde hasta Hoseok despertó, riendo.

Jungkook abrazó a Jimin como si se tratara de un peluche sacado de una máquina expendedora, dando paso a qué el peli gris lo abrazara de vuelta con otras intenciones.

-Cazador. -Jimin también estaba claramente borracho. - claveme la estaca que se lo voy a chupar todo. -después de eso se levanto torpemente y se sento en las piernas del mencionado.

-Habló la delicada princesa.

- ¡Jimin! .- Jin tenía una cara de sorpresa y molestia muy visible.

Bam se mantenía en posición seria pero quería reírse.

-Ojos de mantequilla...boquita de requesón, envuelto en una tortilla, te llevo en mi corazón -Kook apretó la cintura de Jimin pegándole más a su cuerpo.

-Le llaman romeo - Bam estaba riendo tanto que el aire se le iba.

-¡Eso si que no! -Tae apareció con Yoongi- nadie me va a ganar a mi con los piropos -jaló a Yoongi y a los mayores hasta los borrachos chicos -dame eso. -tomo un trago de la botella que aún tenia mucho en ella, giró a ver a Yoongi. - quisiera ser hamburguesa...y que me llenes de mayonesa.

-¿Qué? -NamJoon alzo una ceja- eso es un piropo para principiantes -tomo un trago grande de la botella- Jin... quisiera ser minero para explorar en lo más profundo de tu mina.

-Estúpido -Jin se quejo.

- Podrías patearme y te daría las gracias.

-Mi turno -Yoongi se levanto de su lugar viendo a Tae- quisiera ser caramelo, que ilusion tan loca, para pasearme en tu piel y derretirme en tu boca.

Denle una nariz al payaso que juraba odio por los humanos, Yoongi odiaba a los humanos, pero en las pocas horas con TaeHyung pudo sentir ese dulce aroma que le caracterizaba. Yoongi sentía una extraña sensación por dentro, algo en él le exigía estar con ese chico humano, entonces recordó las palabras de su difunta abuela y la historia de las almas destinadas, pero, ¿sería posible ser el destinado de tu enemigo jurado?.

Hoseok por su parte no podía creer como es que habían llegado a ese punto.

-Alto. -Tae estaba viendo atentamente a Yoongi. - ¿Traes chicles?

-No

- ¿Y ese paquetote? -gritó de forma lasciva.

-Aquí gana Taiun -Grito Jimin.

-Soy TaeHyung

-Bueno...si no puedes uneteles -Si algo había aprendido Jin de sus hermanos...era eso.

-Ellos saben como se pronuncia. - replicó Yoongi.

-Vamos Tae, no seas amargado -Hoseok también se burlaba aún medio dormido.

- ¡No!

Una hora más tarde y media botella después.