El cazador de vampiros

I

La tarde se apago con Bong Soon, los chicos rodeaban la tumba de su abuela ahora tres metros bajo tierra, los mayores no estaban listos para cuidar a sus hermanos sin su abuela. Eran infantiles a pesar de ser mayores, Seok Jin no portaba la mejor estabilidad emocional, y Yoongi tenía un profundo problema de confianza.a

-Ahora ¿que haremos?.

Yoongi con sus 24 era aun más serio y llegaba a intimidar, pero en el fondo tenía miedo.

-Huir, escapar de todo esto. -Jin hablaba preocupado- iremos a la cabaña, es discreta y alejada.

-Debemos irnos ya si queremos llegar antes de la noche, los cazadores trabajan como murciélagos.

-Jimin tiene razón -Hoseok fue el último en hablar- vamos por lo necesario.

Cada uno empaco sus pertenencias con agilidad, salieron de la que alguna vez fue su hogar y partieron al bosque en búsqueda de aquella cabaña hecha con la intención de tener un poco de paz y aislarse de la vida humana.

Pasaron tres horas para que pudieran llegar a su destino.

--Eso es vivir con cautela  -dijo Jimin antes de salir corriendo

-Iré con Jimin.

Hoseok caminó tras su hermano menor dejando a los mayores admirando el paisaje.

-Bueno, una vida de aventura está aquí hyung, vamos adentro, tenemos que conocer nuestro nuevo hogar.

Jin sonrió a su hermano mientras entraba a la casa seguido del palido

-Es acogedora y... -su fase se vio interrumpida por Jimin que entraba corriendo. - Jimin...

¿Pero cuando salió? se suponía que estaba dentro de la casa.

-Tenemos un problema, hay personas a unos kilometros de aquí -respiraba agitadamente mientras Hoseok entraba con tranquilidad.

-Es verdad, parecenjovenes, a mucho tendrán nuestra edad, así que está bien.

-Que no se metan con nuestro terreno por que entonces habrá un problema. - Jin se puso serio de repente- Yoongi ¿podrías barrer la zona?.

-Claro -señalo a sus dos menores- quedense aquí -sin más salio de la casa camino a los extremos de su territorio.

Yoongi caminaba tranquilamente con las manos en los bolsillos del pantalon hasta que un ruido lo saco de sus pensamientos, una rama se rompio bajo los pies de alguien, sus sentidos se agudizaron enseguida y se oculto tras un árbol de tronco ancho.

Y una voz asustada se escucho.

-¿Quién está ahí? -la voz desconocida casi hizo reir al chico "como si te fuera a contestar" -Sal de dónde quiera que estés.

-Estas en mi territorio... -Yoongi por fin apareció. - no deberías estar aquí -se recargó en el tronco de un árbol- vete.

-No lo hare, el bosque no es tuyo y aquí me concentro bien -el chico de cabellos castaños hizo gruñir al pelinegro.

-Mira -dijo señalando un limite poco visible- eso marca mi territorio y tu lo invades, ahora largo. Esta es nuestra pinta, no tienes nada que hacer aquí.

-Oh -el ahora sonrojado chico hizo una pequeña reverencia dándose cuenta de su error- disculpe.

-Vete -Yoongi camino hasta una roca frente al lago y se sento ahí.

-Soy Taehyung -el chico se sentó a su lado con una sonrisa.

-No me importa, he dicho que te vayas. - observó al chico hiperactivo con cara de cansancio.

-Te dire Sugar.

-Sugar....¿azucar? -Yoongi alzó una ceja- soy todo menos eso.

-Bueno, eres blanco como el azúcar -sonrió y estiro su mano acariciando los cabellos del chico.

-Dije que no.

-Entonces te diré Miau, tuve un gato que se llamaba asi.

-No soy un maldito gato. - gruñó.

-Pues pareces uno. Aun que te quedaría mejor si te llamara limón, por que eres un amargado.

-Yo... -antes de continuar los interfumpieron unas voces a su al rededor- Jin.

-Yoongi, alejate de ese humano apestoso. -Jin se acerco a su hermano jalandolo. - Y tú niño, vete de aquí, Shu, Shu.

-No tiene por que hacerlo -una voz más ronca los interrumpio, un chico alto y delgado vestido de pantalones negros y camisa blanca. - llegamos primero.

-Disculpa pero, este es nuestro territorio asi que tú y tus niños váyanse de aquí.

-No le hable así a mi hyung, anciano feo. -el aparentemente menor de los humanos dirigió sus ojos al peligris de estatura menor quedando impactado, algo en sus ojos de ambos se iluminó. - hola

-Hola . - el peligris sonrio achinando sus ojos. - disculpen a mis hyungs, ellos son amables normalmente pero... -Hoseok interrumpió.

-Invaden nuestro espacio, ¿de donde vienen y quienes son?.

-De nuestra cabaña -el moreno señalo una pequeña casa tras ellos, apenas y se distinguia a lo lejos. Pero parecía una casa de palos.

-Es pequeño- Hoseok chasqueo la lengua- vengan con nosotros.

-¡¡No!! -Los mayores gritaron al mismo tiempo- no pueden venir Hoseok, recuerda que nosotros no podemos estar con... ¡¡¡y no los conoces!!!

-¿Son vampiros? - el que se habia quedado mudo desde el principio hablo- por eso estamos aquí

-Ya nos exhibiste. -reclamo el menor. - Se supone que nadie debe decir nada.

-Entonces son cazadores. - hablo YoonGi

-Tiene razón, así que ¿podríamos llevar la fiesta en paz?. -el moreno volvio a hablar ignorando a sus amigos. - no queremos molestar. No estamos de acuerdo con lo que se nos a obligado a hacer.

-No se diga más -Jimin dio un saltito- vamonos -giro de vuelta a los contrarios- Soy Jimin, él es Jin, Hoseok y Yoongi, mis hermanos mayores -el menor los señaló por nombre con una sonrisa.

-Soy Nam Joon, él es Jung Kook, Taehyung y BamBam -Sonrio dejando ver unos hoyuelos que extrañamente hicieron latir el corazón al mayor de todos.

Yoongi permanecía en la parte exterior de la casa sentado en una de las barandillas de madera, estaba sumergido en sus pensamientos, todos con respecto al chico extraño que le apodo Suga, no sabía de donde salió el chico, normalmente esa parte del bosque era muy solitaria, al menos cuando él era un niño y su abuela solia llevarlo a esa cabaña junto a sus hermanos, era así desde que el accidente inconmensurable acabo con la vida de sus padres, los recordaba como padres morosos y protectores, nunca les enseñaron a herir a los humanos, pero, sin embargo lo primero que les enseñaron a sus inquietos hijos era a poder vencer su sed, esconderse de los cazadores, en especial de Died, el cazador mas despiadado.

-No me gusta que estén cerca. - hablo sin rodeos. - si alguno de ustedes se atreve a intentar algo entonces los matare.

-No creo que seas capaz. - le reto Bam.

-Solo inténtalo y te aseguro que tu serás el primero en mi lista.

Ni media hora en el lugar y ya se habían metido en problemas, lo peor era que se trataba de cazadores, ¡cazadores!, esto era un error y seguramente terminaría todo mal. No confiaba en ellos, en especial en ese que se habia atrevido a ponerle un apodo tan estúpido, primero se sacaría el corazón antes de aceptarlos.