Capitulo 25

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POV'S Samantha

Despegue mis ojos poco a poco temiendo que la luz fuera a cegarme, pero pronto descubrí que no había nada de Luz a mi alrededor, todo era oscuridad a excepción por la luz que sobresalía de una habitación, abrí mis ojos y me incorpore poco a poco, mire detrás de mí, una gran ventana mostraba el bosque a oscuras, con un par de luciérnagas adornando el paisaje, eso me hizo sonreír unos segundos, pero pronto recordé que no estaba en casa y sentí el frio recorrer mi espina dorsal, lo cual me llevo a descubrir que estaba completamente desnuda, con una cobija que solo cubría de mi cintura para abajo, puse mi vista al frente y me cubrí los pechos como si alguien pudiese verlos en la oscuridad

-No sirve de nada que te cubras, los conozco perfectamente.

Moví mi rostro por todo el lugar, tratando de encontrarlo en la oscuridad, pero falle en ello

-¿Dónde estás?

-Aquí

Su voz gruesa choco en cada rincón del lugar e hizo eco en mi oído, sentí su respiración en mi cuello y me estremecí por completo, aprovecho que mis manos se había separado levemente para colocar sus manos en mis pechos

-Suéltame

Gruño en mi oído y apretó mis pechos con sus manos

-¿Quieres hacer esto de nuevo? La ultima ves terminaste sobre la mesa gimiendo

Su forma de ser tan prepotente me sacaba de quicio, pero no había nada que pudiera hacer, estaba en su casa, en su sillón y había tenido varios orgasmos sobre su mesa, en pocas palabras, su territorio, deje escapar un suspiro y deje que mi cabeza descansara contra su hombro, ya no había más que perder, se había llevado todo, mi virginidad, mi vida social, mi dignidad y mis horas de sueño, estaba perdida, acabada.

-Así me gusta

Pellizco mis pezones y dejo un beso casto en mi cuello, tome la cobija que se encontraba en mi cintura y la jale hacia arriba, cubriendo así mis pechos, Pierre se alejó de mi e intente seguir sus pasos pero parecía moverse de un lado a otro, así que me di por vencida y me recosté de nuevo en el sillón

-¿Vas a llevarme a casa?

-No

-¿Por qué no?

-Te quedaras aquí

-No puedo quedarme aquí

-Claro que si

-Mi madre se va a volver loca si no me encuentra por la mañana

-Me importa una mierda Samantha

De pronto la luz se hizo presente y me cegó por unos minutos, parpadee un par de veces acostumbrándome a ello y en cuanto pude ver bien, comencé a buscarlo con la mirada, lo encontré recargado sobre la barra de la cocina con un vaso en su mano

-Por favor, ya le he dado bastantes problemas no quiero preocuparla

Una carcajada salió de lo más profundo de su garganta crispándome la piel, volteo a verme y pude percibir un leve cambio de color en sus ojos, es fácil percibirlo porque sus ojos con totalmente negros e inexpresivos, pero ahora se veían de un color miel, era bastante leve, pero era como si relampaguean, en segundos se veían más intensos, como si estuvieran en una guerra interna, de pronto el negro volvió a reinar y me miro inexpresivo

-No estoy negociando Samantha, vas a quedarte aquí y punto

Al escucharlo decir aquello una risa sarcástica salió de mi garganta, más que hacerlo quise pensarlo, pero salió de la nada

I will make you sin *Segunda parte* (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora