Capitulo 43

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POV'S Samantha

-Nada, solo dijo que estaba muy feliz y que esperaba que pronto hubiera niños corriendo por aquí ya que, se siente sola.

¿Hijos?, ni si quiera lo había procesado cuando lo dijo, no era del tipo de mujeres que se imaginaba criando a un niño, no estaba en mis planes y lo cierto es que mi situación con Pierre no era para nada normal, mire a Pierre y este me dedico una sonrisa

-Bueno tenemos trabajo entonces

Se acerco a depositar un beso sobre mis labios y me quede helada, no sabía que decirle, ni si quiera éramos pareja, ha decir verdad, podía ser que yo fuera todo para el pero, yo ni si quiera lo conocía, apenas si sabia unas cuantas cosas sobre el

-¿Tengo que embarazarme?, Pierre yo, no creo que sea correcto, ni si quiera somos pareja o..

-Lo somos

De pronto no parecía tan feliz, se veía incluso mas enojado que cuando su madre estaba frente a mi

-Esto no está en discusión caperucita, quiero hijos y me los vas a dar.

-Pero ni si quiera me conoces o yo a ti, todo lo que ha pasado ha sido extraño y tú, hum

Me retaba con la mirada a terminar la frase, pero no queria hacerlo enojar más, tal vez las cosas estaban cambiando, pero no por que fuera mas amable se me olvidaría la paliza que alguna vez me dio

-¿Yo que?

-Tu, no lo sé, no creí que tu quisieras tener hijos

-Mas bien crees que no soy capaz de criar a uno

Era obvio, no necesitaba decirlo porque de hecho si lo creía, era demasiado agresivo y demandante, es poco afectuoso y uno pensaría que podría vivir más cómodo sin niños corriendo y rompiendo cosas a su alrededor

-Yo, solo no creo que sea lo mejor

-No te preocupes por eso, tenemos toda la vida para conocernos y ahora que estas aquí serán más sencillas, ahora deja eso a un lado, tu ropa ya está en el closet, date un baño, estaré con mi padre, puedes salir a conocer el pueblo, pero regresa aquí antes de las 5 para la cena

Se marcho enseguida dejándome de nuevo a sola, me debatía en si decirle que no seria posible procrear, ya me habían colocado el DIU y no podía embarazarme dentro de 3 años, pero era algo tonto, yo aun no sabia si iba a quedarme a su lado, queria compadecerme de su dolor pero retenerme así era una forma muy cruel, poco humana, incluso si soy su mate, no ha hecho las cosas bien, así que decidid no decir nada, después de todo no pasaría nada si no se enteraba.

El pueblo era bastante lindo, las casas eran pequeñas pero todas ellas estaban bien arregladas, las personas me veían sonrientes y todas ellas parecían bastante amables, había pocas tiendas pero una en especial llamo mi atención, una panadería al otro lado, Expedia un olor tan agradable y el pan recién hecho era acomodado por una viejita, rebusque en mis bolsillos encontrando un billete de 10 dólares, supongo podría comprar algunos, entre a la tienda y la mujer volteo a verme enseguida, con una sonrisa en su rostro me vio de arriba abajo

-Luna, oh pensé que eran solo chismes, pero aquí estas, eres preciosa

-¿Luna?

-Oh vamos, no seas tímida cariño, hueles al jefe, supongo que aun no te acostumbras, pero después de que te marcan es imposible esconder el olor

Por instinto toque mi cuello y ella me veía con entusiasmo tomo una dona y me la acerco, me ínsito a tomarla y en cuanto lo hizo me vio entusiasmada, como esperando a que la probaba, así que sin pensarlo mucho le di un mordisco y esta se deshizo en mi boca

-Mhh, esta riquísima

-¿En verdad?, muchas gracias, tratamos de hacer todo con mucho amor, mi esposo y yo nos levantamos muy temprano a diario

Deje lo demás a un lado y saque el dinero de mi bolsillo, se lo tendí y negó tantas veces que no pude ni contarlas

-No – comenzó a reírse y me veía con ternura como si fuera un ser ingenuo – Veo que no te han explicado las reglas, eres nuestra luna, no tienes que pagar por nada –

Aun no lograba entender por que me llamaba luna, supongo que es un termino con el cual se le conoce a la mate del alfa, nunca pensé que en verdad Pierre y su padre fueran aquí la máxima autoridad, pero al parecer ellos tenían el control de todo el pueblo

-Oh bueno, gracias, pero ¿Segura que está bien?

-Si, no te preocupes, regresa cuando quieras

Asentí con mi cabeza y tome mi dona ya mordida, me aproxime a la salida y antes de que pudiera abrirla ella lo hizo y se despidió con un gentil apretón de manos, caminaba lento, confundida por lo mucho que aun desconocía, me senté en lo que parecía ser la plaza principal, había un par que bancas así que me acomode en una vacía y mientras devorada mi dona, pensaba en cual sería mi destino

-Valla, así que tu eres nuestra nueva luna

Miré hacia arriba encontrándome una mujer de tes morena con una sonrisa enorme, aun en la boca me cubrí la mano mientras tragaba el gran trozo que había tomado, cuando lo pude ingerir ella ya estaba sentada a mi lado esto de ser una celebridad no se me daba para nada bien

-Lo siento, estaba comiendo, yo no quise ser grosera

-Esta bien, no te preocupes, fui demasiado inoportuna

-De acuerdo, humm, yo.. disculpa si no se que decir es solo que todo esto es, nuevo para mi

-Deja de pedir perdón, no has hecho nada malo, no te han explicado las reglas, no tienes de que preocuparte no es tu culpa

-Samantha, un gusto

Extendí mi mano a ella y esta tras verla unos segundos, se decidió a tomarla y sacudió nuestras manos con bastante fuerza

-El placer es mio, me llamo Danielle, pero puedes decirme Adará, espero que seamos grandes amigas. 

I will make you sin *Segunda parte* (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora