Sweet Memories [JimSu]

11

El reloj de su celular marcaba las 11:12pm. Ya era bastante tarde, quizás estaba dormido, pero él se conocía bastante bien y si no enviaba el mensaje ahora mismo se arrepentiría después.

Escribió el mensaje, borro miles de veces y volvió a escribir... No quería hacerlo. No, no quería, pero era lo mejor.

ENVIAR/CANCELAR

El mensaje ya había sido enviado, ya no podía hacer nada. En su cabeza aún rondaban lo último que su amiga le dijo.

-Después de terminar todo ¿Qué haré?- Preguntó a su amiga.

-Harás tu mejor esfuerzo para conquistarle.

[...]

Afuera de la pastelería, exactamente al frente de ella estaba él. Veía cómo Jimin hablaba con una chica animadamente.

Lo lograste, ¿Ahora estas feliz? ¿Valió la pena?

No, el dolor de su pecho le ahogaba. Pero esto era lo que quería, era lo que él deseaba y ahora... ¡Maldición!

Se aparto de aquel lugar lo mas rápido que sus pies le permitieron. Sus ojos amenazaban con desbordar las lagrimas que con fuerza retenía, intento calmarse, pero no pudo... Solo las dejo salir.

Recordó las palabras de Hoseok. Admitía que tenía razón. Le dolía tanto, pero era por el bien de Jimin.

Porque una mujer es capaz de darle muchas cosas que él no.

Fue a un bar cerca de su casa y se quedo bastante rato, pidiendo copa tras copa sin llevar la cuenta. Cuando sintió que el alcohol ya comenzaba a recorrer su cuerpo, se levanto y pago.

Camino por un parque desolado, estuvo ahí un rato y volvió a casa.

Quizás son amigos que... Quizás... ¿Puede ser solo una amiga, por favor?

Trato de convencerse que era culpa de las copas de vino que se había tomado antes de ir a la pastelería. Quería creer que fue su imaginación.

Entro a casa, todo estaba oscuro y frió.

Tan solitario, Min Yoongi.

Saco su celular del bolsillo del abrigo, trato de encenderlo pero estaba descargado. Lo coloco a cargar. Se baño, se coloco un short y una camiseta negra. Cerro todo bien y apagó las luces.

Jimin aún no abandonaba sus pensamientos, seguía siendo el protagonista de cada uno de ellos.

Se metió debajo de las cobijas. La pantalla de su celular se encendió sola, avisándole que ya tenia un poco de carga y había prendido. Se apagó sola luego de un rato, luego sonó una notificación. Lo desconecto del cargador y encendió la pantalla.

Su celular marcaba las 12:16am. Las notificaciones le decían que Jimin le había mandado un mensaje.

Con miedo lo abrió.

Cada palabra dolió. El mensaje no decía nada cruel, pero... Él realmente hubiera querido que Jimin nunca lo hubiera soltado.

¿Por qué su cabeza y corazón estaban en descuerdo?

Las lagrimas ahora eran imposibles de parar. El celular termino con la pantalla seguramente rota, junto a la pared. La había cagado en grande, le dijo a Hoseok que él podía soportarlo todo por Jimin... Pero nunca pensó que soportar sería tan difícil y doloroso.