【IᗰᗩGIᑎᗩ ᑕOᑎ ᑎᕮᗯT, TᕼOᗰᗩS Y ᗩᖇIS】

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〘Actualizado 28/Jul/2021 | 12:56 P.M.〙

Camila

Hablemos de quién soy yo, no empezaré como las típicas chicas diciendo que son muy bellas y todas esas galorpadas, me presento, Camila y para nada interesada en las cursilerías, si shanks, el amor es una pérdida de tiempo. Hace unos días fuimos rescatados mi grupo y yo del laberinto, pareciera increíble que nunca estuvimos solos, esos mierteros de CRUEL nos tenían atrapados para hacernos pruebas y hallar una "cura" a una extraña enfermedad que había azotado el mundo hace unos años, no me pregunten cómo lo sé, Minho fue el que obtuvo todo de una computadora. 

Pertenezco al grupo A, según lo que ha dicho mi apodo: A12 El señuelo. No entendía a que se refería pero lo dejé pasar, nadie tenía peor apodo que Thomas, "Para que lo mate el grupo B", eso si que era horrible, incluso varios de los larchos se le acercaron con la intención de darle una especie de apoyo ante tal apodo, Thomas ya la había pasado muy mal con la muerte de Chuck así que eso incentivó que les pidiera a los demás que lo dejaran en paz. 

—¿Quieres dormir? Le puedo decir a estos shanks que se callen. —Thomas miró el pequeño muñeco que Chuck le había dado con su último aliento y veía como sus lágrimas cubrían sus mejillas, no sabía que hacer en esta clase de situaciones así que voltee a ver a Newt para pedirle ayuda a lo que este acudió de inmediato—

Newt se sentó al lado de Thomas para platicar un buen rato, los veía conversar con una pequeña sonrisa porque Newt siempre había sido tan bueno con las palabras que era algo que resultaba tener mucha conexión con su apodo, Newt siempre había sido el chico que nos hacía entrar en razón, incluso cuando sucedió lo de Gally y me le fui encima, me hizo entrar en razón para dejar a aquel galorpo moribundo y salir del lugar. 
Muchos de los larchos que logramos escapar del laberinto, quedamos sumamente afectados con las cosas que vivimos, algunos de los larchos quedaron sumamente lastimados por los ataques de los penitentes, algunos otro perdimos a nuestros amigos pero nada se comparaba al caso de Thomas, había descubierto tantas cosas que ni siquiera había palabras de consuelo para tranquilizarlo, la sonrisa había desaparecido de sus labios y había dejado de ser motivación para todos. Hacía tiempo que no sabíamos nada de Teresa, la habían cambiado de habitación con la excusa de que no podía dormir con tantos chicos pero de mí no se preocuparon en lo más mínimo, era como si me hicieran a un lado por mi actitud. 

—Tengo que saber que ha pasado con Teresa, tenemos que irnos de este lugar lo más pronto posible. —Escuché la voz desesperada de Thomas. Siempre había estado tan apegado a Teresa que sería imposible sacarle eso de la cabeza—

Los larchos se arremolinaron a su alrededor para escuchar la propuesta del trío de shanks, en cambio yo, me quedé sentada esperando a que terminaran de parlotear y me dejaran descansar pero eso estaba muy lejano debido a unos ruidos espantosos que me hicieron revivir mis días en el laberinto, aquella vez que intenté ayudar a Minho con Alby y nos quedamos encerrados con Thomas en el laberinto a la expectativa de ser masacrados por los penitentes, recuerdo haber llorado durante un buen rato por no haber tenido la oportunidad de arreglar mis problemas con mis amigos, creí que no los volvería a ver pero Thomas nos salvó y logramos llegar al Área sin rasguños, por eso comencé a seguir a Thomas en todo lo que hacía. 
Aquel sonido violento me sacó del trance en el que había caído, miré a los demás corriendo alterados por la habitación mientras repetían cosas sin sentido pero no entendía a lo que se referían, incluso uno de ellos me sacudió de los hombros con fuerza, eso me desestabilizó más de la cuenta. 

—¡Tranquilízate miertero! —Le di una cachetada que dejó todo el lugar en silencio, me llené de miradas en cuestión de segundos y el ambiente se puso tenso—

THE MAZE RUNNER  *imaginas*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora