Sehun le pasó el brazo sobre los hombros mientras salían al frío de la calle. Ellos habían hecho su camino hacia abajo,donde toda la actividad se desarrollaba,y se habían despedido de Hyojun antes de marcharse. El muchacho se había mostrado un tanto desilucionado antes de obsequiarles una sonrisa,y alejarse a charlar con sus invitados.
Danbi suspiró complacida mientras Sehun encendía la calefacción del coche y restregaba sus manos para darle un poco de calor. Un corto beso mediado con una risa fue intercambiado,antes de que pusiera el auto en marcha. Se dedicó a mirar por la ventana,con su mano envuelta por la de Sehun,mordiendo su labio mientras pensaba en lo que iba a pasar en las paredes que veía todos los días,en la cama en la cuál dormía hacía tres años,en su pequeño lugar seguro. Siempre había sido sólo ella,con apariciones de sus amigas,y de vez en cuando su madre,pero esto era distinto. Su cama nunca había sentido el peso de un muchacho sobre ella,ya que en sus pocos encuentros íntimos,Danbi siempre prefería la casa del muchacho,y las paredes de su habitación no habían presenciado su cuerpo entrelazado con alguien más. Todo lo que conocían era a ella,en soledad,o con sus amigas,nunca con Sehun.
Un revoloteo de mariposas había estallado en su estómago y las luces del mundo,las propias estrellas acompañando a la luna, parecían más brillantes.
Danbi se sorprendió en lo nuevo que le parecía todo debido al sentimiento burbujeando en su pecho. Ella podía sentir cómo las puntas de sus dedos se enfriaban debido a los nervios,y por su cabeza habían pasado todos los posibles escenarios que podrían suceder en unos momentos.
Pero somos nosotros,pensó. Somos nosotros y va a estar bien.
Se detuvieron frente al edificio,con un aire espeso entre ambos mientras Sehun estacionaba el auto y una vez completado,se inclinaba para tomarla por la barbilla y dejar un beso más largo,transmitiéndole la seguridad que ella necesitaba.
Con las manos entrelazadas,cruzaron el lobby y subieron por el ascensor,conscientes del pequeño punto rojo que titilaba en uno de los extremos del espacio.
No era la primera vez que Sehun llegaba a su casa. Él se había quedado unos minutos para tomar algo o ver una película o simplemente hacer nada más que un intercambio de besos sobre el sofá...
—No hay necesidad de estar nerviosa,preciosa.—él le susurró en el oído mientras las puertas del ascensor se abrían en el tercer piso y su puerta,la última del lado derecho,aparecía a la vista. Sus tacones sonaban delicadamente contra el suelo,y era el único sonido en el desierto pasillo. Sus manos temblaron ligeramente mientras sacaba la llave de su pequeña cartera,y la puerta se abrió con un suave clic.
La mano de Sehun estaba en su espalda baja mientras la empujaba gentilmente hacia adentro y cerraba la puerta detrás de su amplia espalda. Danbi se encontró con la pared detrás suyo antes de poder hacer algo más,y los suaves labios de Sehun devorando los propios.
Él le recorría la boca con un fervor delicioso,y sus fuertes manos mantenían su cabeza en el lugar,inclinándola cuando era necesario,y así poder saborear más de ella. Danbi tenía las manos en su cabello,sujetándose de las hebras oscuras,intentando deshacerse de un poco de la pasión que le quemaba el cuerpo.
Sehun siempre se sentía tan bien contra ella,como si hubiesen sido hechos para encajar juntos. Su sabor la dejaba sin habla y sus fuertes besos le quitaban hasta el último gramo de respiración. Él la consumía y no había nada más.
Con un gemido,él empezó a caminar hacia atrás,llevando a Danbi consigo,avanzando a ciegas por el pasillo que llevaba hacia la sala,y llevándose por delante una silla y la pequeña mesita que contenía una foto de Danbi con su madre.
Sehun se detuvo,alejando sus labios de los de ella con un sonido de insatisfacción,y sus manos apretaron sus caderas suavemente.
—Preciosa…—su voz estaba increíblemente ronca mientras sus ojos negros la miraban profundamente. Una sonrisa había empezado a alzarse en sus labios hinchados,y Danbi estaba lista para otro beso,pero él la detuvo. Danbi lo miró confundida.—Creo que tienes visitas.
Con un sobresalto,ella siguió la línea de visión de esos ojos oscuros y tres cabezas inclinadas,con rostros igualmente pícaros los observaban desde sus lugares en el sillón.
¿Pero qué…?
—Uh…
—Bueno,hola ahí,tórtolos.—Jisook los saludó,pasando una mano por su cabello castaño mientras sus ojos brillan pícaros.
—Que lindo gesto el que al fin repararan en nosotras.—Yoojin me siguió,mientras detrás de ella,Rina detenía con la palma de su mano las risitas que se le escapaban como una colegiala.
—Hola,chicas.—Sehun las saludó,rodando los ojos juguetonamente mientras movía a Danbi desde su escondite detrás de su espalda a encarar a las inesperadas invitadas.
Sus amigas empezaron a carcajearse mientras los colores subían a su rostro y pasaba a o ocultarlo en el pecho de Sehun,quién tambien soltaba risitas mientras acariciaba su cabello.
¿Podría ponerse peor?.
Y en efecto,podía.
Minutos después,ella se encontraba sentada al lado de Sehun mientras las chicas lanzaban un duro interrogatorio.
—Te conviene que cuides a nuestra chica. No la queremos embarazada antes de los veinticinco y menos con alguna enfermedad.
—Bueno. Tengo bastante conocimiento de los métodos anticonceptivos…
Danbi estaba sorprendida de la tranquilidad que mostraba Sehun,mientras contestaba todo con paciencia y una sonrisa plasmada en los labios.
Ella podía decir que sus amigas también lo estaban. El chico ni se había estremecido.
—Sólo por las dudas,¿no estás casado,no?.
—Rina.—Jisook rodó los ojos,mirando a su amiga por debajo de las pestañas.—¿No crees que es demasiado joven para haberse casado?.
—Yo no sé. Los adolescentes son alocados estos días.
—Hablas como si tú no fueras una adolescente.
—Bueno,segura que no me siento así.
Danbi se rió,enterrándose en el calor del pecho de Sehun mientras sus amigas continuaban con las preguntas más extrañas y amenazas escalofriantes que a veces tenía que interrumpir,preocupada de que ahuyentaran al chico.
—¿Cuándo podré conocer a tus amigos?.—le preguntó mientras lo acompañaba hasta la puerta,minutos después de la partida de las chicas. El cabello de Sehun se encontraba en todas direcciones y sus mejillas tenían un adorable rosado. Sus labios aún formaban una sonrisa casi fantasma.
—¿Crees que estás lista?.
Danbi lo pensó unos segundos,apoyándose en la pared detrás de ella.
—¿Son todos como Baekhyun?.
Sehun se rió mientras le daba un beso y escondía su rostro en el hueco de su cuello.
—¡Es una pregunta seria!.
—Eso vas a tener que averiguarlo por ti misma.
El estómago de Danbi se retorció debido a la ambigüedad de la respuesta y se dejó caer contra el pecho de Sehun,gimiendo.
