¿Gatito?

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Uraraka, Kirishima, Midoriya y el mismo Bakugo eran los únicos que sabían del aparato que s encontraba en la nuca del rubio, y aunque Bakugo no les dijo que guardaran el secreto entre ellos lo acordaron, para calma del rubio y para no invadir más aún la poca privacidad que le quedaba.

Para Kirishima, ser el primero en enterarse y de paso, que Bakugo le pasara la aplicación a su celular para que lo estuviera vigilando con un "para que no intentes saltar entre valcones de nuevo" significó llorar a moco tendido de nuevo. La siguiente que supo fue Uraraka, cómo ya lo supieron lo logró saber por intrusa. Todoroki fue el que lo descubrió por sí mismo para luego ir a preguntarle a Bakugo,  aunque fue mandado a la mierda para que le fuera a preguntar a Kirishima, se sintió avergonzado.

Midoriya fue difícil... era el único que no había visto a Bakugo con una "crisis" hasta el momento, y fue horrible verlo cuándo sin querer lo hizo enojar, sin querer ese día se enteró de tres secretos. Los sentimientos de Bakugo por su mejor amiga, el odio que tenía Bakugo por él que le hacía querer matarlo, el deseo que tuvo Bakugo de salvarlo activando el control de su pulsera para detenerse.

Midoriya tuvo miedo de ver a su amigo convertirse en esa bestia de nuevo.

¿y dónde había quedado la bestia?, ahora sólo veía a un muy cómodo Bakugo usando las piernas de Uraraka cómo almohada mientras dormía en lo que parecía ser una tarde de películas,  Uraraka le acariciaba el cabello con mucha calma.

ー¿Uraraka-san? ー

Preguntó bajito, en un tono bajito mientras se sentaba en un sillón cercano, observando cómo la chica despegaba la mirada de la televisión para verlo y sonreírle cómo sólo ella podía hacer.

ー¿Todo bien? ー

Preguntó en referente a Bakugo, mirando nervioso la escena, de todas las crisis que tuvo siempre Uraraka estaba en medio, por eso le asombraba verlo tan relajado en ese momento.

ーUhm, sí,  todo bien Deku-kun ー

La chica rió avergonzada, no necesitó ser un genio para entender.

ー¿Hiciste que lo cedaran? ー

La miró un poquito acusatoriamente, a lo que la chica rió un poquito en vergüenza, cómo sí realmente lo hiciera.

ーDeku-kun, ven un poquito ー

Le llamó para que se acercara, y cuándo estuvo cerca de su oído volvió a hablar.

ーTuvo una pesadilla, así que hice que se relajara cantando, parece que funcionó ー

Midoriya no caía en cuenta, vale, Bakugo podía tener pesadillas, es usual, pero, ¿Qué clase de pesadillas tuvo para incluso usar las piernas de su amiga hasta volver a dormir tan plácidamente? .

ーSe ve tierno, ¿No? ー

La chica hablaba en tono calmado, suave y tranquilo, allí Deku lo entendió,  Bakugo tuvo una pesadilla dónde seguramente estaba solo, y Uraraka llenó la necesidad de alguien,  porque Deku no era ciego, claramente podía ver los sentimientos de él.

ーNi siquiera se ve cómo Kacchan ーDeku secundó en una sonrisa tenue, agachandose para verle el rostro, aún tenía el ceño fruncido pero se veía mucho más relajado ーbuenas noches, Kacchan ー

Susurró con cariño al mismo tiempo que le daba una suave caricia en la mejilla antes de alejarse bruscamente, ya que Bakugo frunció los labios, dándose vuelta para esconder el rostro en el estómago de Uraraka,  haciéndola sonreír.

Bakugo era cómo un gatito, a veces buscaba contacto humano, a veces lo rechazaba, a veces arañaba y otras ronroneaba. Ahora su gatito estaba asustado, y ella hacía de todo para mantenerlo tranquilo.

El poder de dar fin. 『Kacchako』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora