Academia Dissander - TaeKook

Capítulo 2

La Academia Dissander poseía uno de los programas de estudios más ambiciosos del país. No era fácil mantener el nivel académica. Había mucha competencia entre compañeros y el profesorado era en verdad muy exigente. Cualquiera se aseguraría de no olvidarse de eso.

Cualquiera menos el desmemoriado Jeon JungKook y su compañero de habitación, un chico tan distraído que era un milagro que hubiese logrado entrar a aquel sitio.

Aunque ese mismo día le contó a JungKook, sobre su situación como el menor de una poderosa familia de banqueros. No esperaban gran cosa de él y se limitaban a darle lo suficiente para que no molestara. En otras palabras le habían enviado a la Académica Dissander para sacarlo del camino, cosa que no parecía molestar al chico.

–No aspiró a la herencia.

Le había dicho mientras terminaba de arreglarse. JungKook escuchándole con curiosidad. Pese a lo que había pensado en un principio sobre su compañero de dormitorio, NamJoon era un espécimen interesante. Y el mismo se declaraba así.

–Amo la ciencia. Mi deseo más grande es descubrir la cura para alguna enfermedad

Dijo entonces NamJoon a la vez que ambos abandonaban la habitación, con la mochila sobre los hombros y el mapa en la mano derecha de JungKook. NamJoon había perdido el suyo anoche.

–¿Como el cáncer?

–Si. ¿Conoces a alguien con cáncer?

–No

Y si así fuera no había modo alguno en que JungKook lo recordara. Su amnesia, por supuesto. Aunque no le había dicho nada de esta a NamJoon. Aún así lo consideraba un tipo raro, pero legal en cierta forma no iba a darle mas conocimientos sobre su persona.

Eso era algo que JungKook odia mucho por aquellos días.Que hubiese gente que supiera más de él, que el mismo.

-Nos toca...

Empezó NamJoon, pero se interrumpió, siguiendo a JungKook y mirando el increíble mural junto a las escaleras. Jeon no lo había visto el día anterior, tal vez porque estaba más ocupado mirando la suciedad del lugar.

Suciedad que por cierto ya no estaba. Realmente se habían encargado de ello.

–¡Wow! –.Se sorprendió NamJoon –. Es increíble.

–Si.

–¿Son lobos?.

Pero JungKook ya no le prestaba atención. Sus grandes ojos se hallaban fijos en el mural.

En las imágenes que veía. En los lobos acechando entre las tinieblas. Y aceptó que eso no había estado el día anterior. No habría dejado de mirar eso ni por error.

–Ah. Llegaremos tarde si no nos damos prisa–le recordó NamJoon –y creó que ya nos hemos perdido el desayuno.

A JungKook no le importaba ninguna de esas cosas. Sólo le inquietaba ese mural... ¿Había visto algo así con anterioridad? Creía que no, pero una vez mas su falta de recuerdos llegaba a joderle la vida.

–Vamos.

Murmuró entonces. Supuso que de todas formas no tenía importancia. Sólo era un mural, ¿no? Alguien que un amante de la naturaleza o de las cosas macabras había pintado, porque sí, aquel mural de los lobos era macabro.

Bajaron las escaleras, y siguiendo el mapa, comenzaron a buscar su aula. Los dos eran alumnos de primer año y compartían la mitad de las clases. JungKook se preguntaba como podía uno saltarse dos años como si nada, pero la respuesta, como siempre, era el dinero. Y seguramente el habría estado mejor en tercer año como JiMin.