CAPÍTULO 9

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-Buenos días.- Hayley cantó mientras bajaba las escaleras frotándose los ojos.

-¿Por qué tan temprano en la mañana?- gimió Hayley mientras se sentaba en un taburete.

-Yo ya tenía mi taza con café.- Josh se encogió de hombros mientras se levantaba y le servía café a Hayley.

-¿Qué hora es?-

-Las 10.- contestó Josh colocando una taza con café frente a Hayley.

-Gracias.- murmuró mientras apretaba la taza caliente con los labios.

-No te olvides de ir de compras con mi madre hoy, Joanna ya no podrá acompañarlas.- dijo Josh mientras salía de la habitación y regresaba con un sombrero en la cabeza.

-¿A dónde vas?- sonrió Hayley inspeccionando el equipo de Josh. Llevaba una camisa de polo lavanda con un par de pantalones color claro y botas.

-Golf con la empresa.-

-Suena divertido.- Hayley se echó a reír mientras miraba la expresión facial de Josh.

-Prefiero.- dijo manteniéndose serio.

-¿Es malo?-

-Imagínate que vas a jugar golf con tu padre y todos sus amigos, mientras que hablas de dinero y nuevas ideas para la empresa, o peor aún, nuestro matrimonio.- jadeó Josh poniendo la mano sobre su corazón.

-Actúas como niña.- dijo poniendo los ojos en blanco mientras el chico reía entre dientes.

-Pero yo estoy hablando en serio, primero, todo el mundo es tan viejo papado- se estremeció.

-Papado...-

-Me quedé sin adjetivos.-

-Ya veo.- Hayley se rio.

-Pero de todos modos, no es totalmente divertido.- se rio entre dientes mientras tomaba su bolso y sus llaves.

-Así que... ¿a qué hora iré de compras con tu madre?- Hayley se rio, mientras mordía el panecillo que estaba sobre el mostrador.

-Eh...- murmuró el chico revisando su bandeja de mensajes –a las 11.am.-

-¿Cuánto tiempo ibas a dejarme dormir?-la chica le gritó mientras se dirigía a la ducha.

-Que se diviertan.- le contestó en tono divertido, salió directo a la cochera para abrir su coche, pulsó el botón de desbloqueo y frunció el ceño cuando el coche no se abría.

-Esto es extraño.- murmuró Josh mientras volvía a pulsar el botón, sólo para que nada sucediese.

-¿En serio?- se quejó al viento mientras colocaba la llave en la cerradura y trataba de abrir la puerta.

-¡Lo juro por Dios!- siseó al momento que la llave se atoraba en la cerradura.

-Por supuesto que no se me permite conducir mi propio coche, podría huir y no regresar jamás. ¡Hay maneras de irse papá!- gritó tirando las llaves de su coche contra el muro gris.

-¡Estúpido!- insultó a nadie en especial, tomó aire para calmarse mientras marcaba el número de su padre por el celular, y lo apretaba contra su oído al escuchar el tono de marcado.

-¿Hola?-

-Mátame.- gimió entre dientes apoyando la frente contra la puerta de la cochera.

-¿No tienes tu…?-

-Sabes que no funciona, así que recógeme ya.-

-Estoy frente a la casa.-

-Por supuesto que sí.- Josh escupió mientras terminaba la llamada y lo arrojaba en su bolsa del pantalón. Suspiró al ver a su padre y se subió en su auto.

-¿Cómo estas hoy Joshua?- sonrió el Sr. Farro mientras se volvía a la carretera.

-Sería mejor si pudiese llevar mi auto- Josh se burló de él volviendo la cabeza para mirar por la ventana.

-Se nota, eh.-

-Pensé que iba a conducir esta cosa estúpida de golf, pero luego no podía ni siquiera entrar en mi coche.-

-Bueno, pensé que sería mejor si no tuvieses la opción de salir corriendo.-

-¿Quieres decir que no lo podré hacer papá? no creo que mamá este de acuerdo con ésto.-

-Joshua, es por tu propio bien.-

-¡No! ésto es por el bien del contrato papá, eso es todo.-

-Algún día lo entenderás.-

-No creo que lo haga.- siseó Josh poniendo fin a la conversación y se volvió a mirar por la ventana, una vez más.

Un incomodo silencio llenó el coche cuando entraron en el campo de golf.

-Jugaremos en el equipo de Josué.-

-Yo estoy en tu equipo… ¿no?- Josh suspiró mientras se desabrochaba el cinturón de seguridad.

-Bueno, eres el mejor jugador de golf.-

-Y yo que pensaba que querías ser de mi equipo porque era tu hijo.- se rio con dureza al abrir la puerta y golpearla en la cara de su padre, interrumpiéndolo.

-Joshua, por supuesto que yo quería ser tu pareja.- el Sr. Farro dijo entre dientes mientras salía del coche.

-Deja de mentirme.- suspiró resignado. -¿en contra de quién?-

-el Sr. Gaskarth y su hijo.-

-Ya terminé.- gritó enojado tirando las maletas y se dirigió hacia el coche.

-No te atrevas.- se burló el Sr. Farro.

-Tú sabes que lo odio... es sorprendente que aún más que a ti.-                        

-Jugarás Joshua.- sentenció  -ésto es un negocio, y te guste o no, tú te harás cargo.-

-Contra mi voluntad.- murmuró mientras cruzaba sus brazos.

-¿Podemos simplemente jugar?-

-Bien.-

-Gracias.-

-Pero yo estoy haciéndolo por mi familia, no por ti.- Josh escupió las palabras mientras caminaba junto a él levantando su bolsa de golf.

-Joshua...-

-¿Vienes o qué?-            

When you let your heart winDonde viven las historias. Descúbrelo ahora