Mi pícaro mate.

37•Andando•✔️

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Capítulo 37

Jared:

—Hay movimiento en las celdas —Dice Steven, el cual se encuentra arriba de un árbol y con binoculares, si bien tenemos una muy buena visión, está acompañada de binoculares es simplemente increíble.

Asiento, no se si son ellas las que están siendo movidas de las celdas, o son otros presos, pero no puedo perder esta oportunidad.

—Hay que atacar —Susurro—. ¡Ahora!

Mi grito toma por sorpresa a algunos soldados, lo que me hace negar que ellos no van a sobrevivir el día de hoy.

Los lobos se transforman y corren en dirección al cuartel del Clan Este, es de noche y solo nos acompañan las estrellas y la luna menguante.

Me mantengo en mi lugar, nuestro plan de ataque es que primeros sean los soldados quienes luchen, mientras que los alfas junto con los betas más fuertes se queden al resguardo por si las cosas comienzan a salir mal, confió en los soldados de Moon, después de todo son estratégicos y se que van a dar pelea, pero me temo que los de las manadas vecinas de Moon que llegaron a darnos su apoyo, para mi manada fue fácil robarles terreno y disminuir a la mitad a sus guerreros en poco tiempo de empezado la batalla.

Veo como Marge se sube al mismo árbol que Steven y desde este comienza a recitar conjuros, los cuales debo admitir que amos juntos allá arriba son aterradores, Steven mirando desde los binoculares y su esposa a su lado con las manos extendidas y recitando palabras que son inentendible ante mis oídos.

Tessa por otro lado espera impaciente al lado de su esposo, Drago. Ambos están impacientes de poder luchar contra los vampiros, pero debemos esperar la señal de Steven desde el árbol, el nos dirá cuando sea el momento en que los soldados comienzan a tener desventaja y debamos ingresar a la lucha junto a ellos. No voy a mentir, también me encuentro nervioso, tengo muchas ganas de ver a Jade.

Los minutos pasan, podría decir que incluso horas, y Steven aun no nos avisa que los soldados estén en desventaja, y es que así son las luchas entre lobos y vampiros, ambos tenemos fuerza sobrenatural y destreza, nuestras luchas podrían durar meses.

—¡Veo algo! —Grita Steven—. Vienen hacia acá, vienen hacia acá.

Varios betas que no son de la de Steven se transforman, mientras que los betas y alfas de Moon esperan impaciente mi orden o la de Drago.

—¡Joder! —Grita Steven pero podría jurar que su grito fue de emoción, además suelta una gran carcajada—. ¡Son Teudis y Tania! ¡Han escapado! ¡Vienen hacia acá!

Ian rápidamente se posiciona frente a mí e intenta subirse a un árbol, pero lo detengo y lo empujo, este cae al suelo.

—¿Quieres que tu chica llegue y le digas que estás allá arriba? ¿O quieres esperarla acá a mi lado? —Le pregunto, este bufa y le extiendo la mano ayudándolo a ponerse de pie.

—Vienen vampiros detrás de ellos —Habla ahora Marge, y me sorprende que no tenga la necesidad de gritar, es como si su voz a pesar de la altura fuera lo suficientemente alta para que la escuchemos, cosa que no lo es, por lo cual creo que esta usando magia para que no tenga que gritar.

Ian, Tessa y Drago son los primeros en transformarse y correr hacia donde los soldados salieron hace un par de horas, los demás lobos me miran, Jade debe venir más atrás.

—Andando.

A diferencia de los lobos de la manada Moon de la manada de alfa Jairus, Cedrick y Jeremy esperaron mi palabra, pero ahora miran a sus alfas para confirmar la orden.

—A divertirse muchachos —Dice el alfa Jairus mandando a sus betas a la guerra.

Steven baja del árbol y le tiende el binocular a Cedrick.

—Voy a esperar a mi hija acá abajo, puedes subir a ver como va la guerra.

Es la primera vez que actuamos como lo hacen los vampiros, el que mandan primero a sus guerreros ante que a los líderes es el clásico modus operandi de los Vampiros, mientras que los lobos solemos ir todos juntos a la guerra.

A lo lejos logro ver a una chica correr, esta viene acompañada de un hombre de gran tamaño, incluso más grande que yo. Logro divisar que esta chica es Tania, mientras que desconozco aun a su acompañante.

Efectivamente vienen vampiros detrás de ellos, pero antes de que logre transformarse para poder ayudarlos, Tessa y Drago los matan, en un segundo estos vampiros estuvieron en el suelo. Es increíble el poder que tienen Tessa y Drago juntos, ambos son un gran equipo.

Camino hacia Tania, la cual ahora está abrazando a Ian con fuerza, parece cansada, debió correr bastante y además el hecho de que está sudada me lo confirma.

Trato de buscar a Jade con la mirada pero la encuentro, eso me desespera.

Derek tampoco viene.

—¿Cómo te encuentras? —Es lo primero que le pregunto a Tania y está me mira y asiente—. ¿Dónde está Jade? ¿Dónde está Derek? vienen detrás ¿Verdad?

Ahora Tania niega, la desesperación ya es real.

—Ahí dentro —susurra Tania—. Ahí dentro un tal conde Damián hace cosas horrible...

—Lo sabemos —Tessa llega al lado de Tania y acaricia su espalda—. Conde Damián y Sir Jay.

Miro de reojo y algunos betas de la manada Moon que quedaron con nosotros para que se preparen, debo encontrar a Jade.

—Jade, Tita y Derek se quedaron a desenmascararlos —al escuchar esas palabras el mundo se me viene abajo.

¿En qué estaba pensando, Jade? ella no se puede transformar, es una humana más ahí dentro, rodeada de vampiros y en medio de una batalla.

—Debo ir por ella, está loca... ¿Cómo permitieron que se quedara ahí dentro? —Miro a los guerreros—. Andando.

Con rabia me quito mi camiseta listo para transformarme, pero ahora la voz del chico que acompañaba a Tania me detiene.

—No puedes entrar así como así ahí dentro, primero debes saber algo...

—Teudis... yo le diré —Tania se acerca a mí, ahora sé que el chico es su hermano, el tal Teudis—Sir Jay... es Jackson, tu abuelo.

Suelto una risa burlona.

—No estoy para juegos Tania, debo ir por Jade.

—Es verdad —dice Teudis—. Sir Jay es un tal Jackson, Derek y Jade se quedaron para desenmascarar en cuanto escuchamos que lo iban a proteger.

Mierda...

Mi abuelo, el hombre que me crio como su hijo, a quien lo llame miles de veces papá, ¿Él está detrás de toda esta mierda? Sé que él es capaz de esto y mucho más, pero jamás pensé que me podría causar tanto daño.

El recuerdo de todos sus viajes a un lugar secreto llegan a mi mente, todas esas veces que me dejo al mando de la manada por que el tenia que viajar y yo debía de encargarse de conquistar manadas, de provocar miedo en nuestra raza. Cuando volvió de uno de sus últimos viajes por primera vez habló algo sobre sus investigaciones, ¿Una vacuna? ¿Una inyección? joder ya no lo recuerdo, mi mente esta muy confusa.

—Jared... Hay que ir por mi hija —dice Steven llegando a mi lado y despojándose de su ropa.

—Yo también iré, traje a Tania a salvo, debo ayudar a mi prima ahora.

Teudis al igual que Steven se despojan de su ropa.

—Jared...—habla Tania— donde esté Jade estará Jackson, ahí entenderás que todo es verdad, él ha estado detrás de todo esto de los híbridos.

Sin importarme la ropa que llevo puesto me transformo en un lobo.

Teudis, Drago, Steven y yo marchamos rumbo a buscar a Jade, pero jamás imaginé que la guerra se viese tan sangrienta desde cerca, sin duda los soldados aún no necesitan nuestra ayuda, aunque creo que en un poco de tiempo más sí, pero jamás, en ninguna guerra había visto tanta sangre.

Voy por ti, Jade.