Capítulo 29

79.5K 5.8K 453
                                    

Me encontraba abrazando a Chris él me había prestado su chaqueta por el frío, ya había amanecido completamente por lo que el sol cálido nos calentaba un poco.

Íbamos en su moto, parecíamos la típica pareja que vuelve después de una loca noche.

Él aparco la moto fuera de mi casa, y con aquella luz sus ojos resaltaban más, junto con su cabello que parecía más dorado. Estaba guapo a pesar de todo, mientras yo debo tener un desastre en el cabello y todo el maquillaje corrido, si sigue estando en mi piel.

—¿Quieres pasar por un chocolate caliente?— le ofrecí un buen desayunó. Después del frío que pasamos.

—Nunca me negaría a un chocolate caliente de tu parte Meg... menos después de casi matarte de hipotermia— ambos entramos a mi casa riendo.

Aquella risa no duró mucho al ver a Connor, Conner, Cord y Matt sentados en la mesa mirándonos con cara de pocos amigos.

—Los que empiezan un día feliz son ustedes— bromeo Chris, pero nadie se rio.

—¿Dónde estaban? Te dijo Calvin que la traigas directo a su casa— dijo quien creo que es Connor.

—Fuimos a dar una vuelta, no es para tanto— Chris se encogió de hombros.

—Estuvimos buscándolos horas pensando lo peor— dijo Matt.

—Sabes que no puedes tocar a Megara, ni darle tu puta chaqueta Chris.

—Le di mi chaqueta después de que nos metimos al mar a nadar, un acto caballeroso para que ella no pase frío imbéciles.

Sus hermanos no parecían creerle.

—Yo no soy la propiedad de ninguno de ustedes, no pertenezco a su mundo para acatar esas normas... si quiero irme con un chico cualquiera a divertirme, lo haré — me enojaba que tratarán mal a Chris. Todos me miraron con asombro no esperaban que les dijera nada— y les agradecería que me dejen sola.

—Solamente queríamos ver que estés bien— dijo Cord— Después debo hablar contigo Meg...

—Ven luego si quieres.

—Vamos— les dijo Connor a sus hermanos quienes lo siguieron menos Chris a quien ya había invitado a pasar el día — Vamos Chris.

—Oh no, lo invité a pasar el día conmigo— Connor elevo ambas cejas incrédulo, no sabía si lo que veía eran celos, pero no le daría atención. El término por asentir saliendo todos.

—Nunca vi a alguien capaz de hablarle así a Connor— Chris sonrió — fue gratificante.

—Si quieres puedo ayudarte a repasar mientras desayunamos, tu examen está próximo y nada me haría más feliz que apruebes...

Él me sonrió y asintió.

—No hace falta que seas tan buena conmigo Meg.

—No es ningún peso ayudarte me agrada y lo paso bien siempre que estoy contigo Chris...

Él me miró a los ojos como si quisiera decir algo, pero no lo hizo. En cambio, me dedico una sonrisa.

—Yo igual la paso increíble contigo Meg...

Después de aquello me dediqué a preparar el desayuno, el que consistía en mi chocolate caliente de siempre y unas galletas con chispas para acompañar.

Mientras servía todo veía como Chris jugaba con la cuchara tratando de pararla en su dedo.

Cuando noto que lo observaba dejo todo, parecía avergonzado algo que sé noto con un leve rubor en sus mejillas.

Le pasé su chocolate y él al probarlo sonrió inmediatamente.

—Ahora entiendo por qué Cole amaba este chocolate.

—Dicen que el chocolate caliente ayuda a los corazones rotos— le comente sonriendo.

—Creí que ayudaba a enamorar, eso siempre escuche...

—También, pero cuando te enamoras siempre hay un corazón roto al final del día.

—¿Te rompieron el corazón Meg?—pregunto él con curiosidad.

—Miles de veces... ¿Sabes todos los libros que leí?— bromeó, era más fácil que decirle tu hermano lo hizo tantas veces que perdí la cuenta— ¿Y a ti?

—Nunca han tenido el honor— era un engreído.

—¿Nunca nadie te rompió el corazón?— estaba asombrada, pero él pareció recordar algo.

—No en un modo romántico, supongo que solo mamá fue la única mujer capaz de dañarme—aparto su mirada de mis ojos buscando con que distraerse.

—¿Siempre tuvo problemas?— no quería decir alcohólicos por respeto y porque no sabía nada de Caroline Colt, nada más que rumores.

—Desde que tengo memoria si, aunque vi fotos de ella joven, antes de nosotros, y era otra persona. Amaría ver la sonrisa que mamá tiene en aquellas fotos. Ahora es solo un fantasma de lo que fue... lo noto cada vez que Calvin la ve.

—Es muy triste Chris, no tienes que hablar si no lo quieres— él me dio una sonrisa tranquilizadora y siguió hablando.

—Mamá cada vez está peor Meg— sus ojos llorosos me confirmaban lo que decía — su alcoholismo empeora día a día, todo el tiempo delira, ya no está en ella— me apresure a abrazarlo cuando la primera lágrima cayó— No sabemos que hacer con ella... vivimos con el miedo de que ya no este.

—Es tu mamá Chris encontraremos una manera de ayudarla — sus ojos ya estaban rojos y los míos a punto de llorar con él.

—No, no es mi mamá, nunca tuve una y sabes las veces que desee una madre presenté... pero lo peor de todo es que no puedo odiarla, ella es todo para mí— su corazón estaba verdaderamente roto, y solo podía abrazarlo para que no se desmorone completamente.

(...)

Después de un tiempo logré que Chris mejore en ánimo, se disculpó mil veces por llorar y todas las veces le dije que estaba bien desahogarse de vez en cuando, y que llorar es normal cuando estás tan rebasado.

Estudiamos un poco entre risas y snacks hasta que caímos rendidos al sofá.

(...)

Desperté en el hombro de Chris y por la luz de la ventana parecía que estaba por anochecer.

Comencé a mover a Chris para que se despierte y poco a poco fue haciéndolo.

—Estábamos cansados— le dije con una sonrisa.

—Solamente íbamos a descansar los ojos— me recordó él por lo que solté una carcajada— debo irme Meg, pero gracias por hoy— él me dio un fuerte abrazo.

—Te acompaño a la puerta Chris— y aquella decisión no sé si fue buena o mala, solo que vimos a Caroline en el suelo, no sabía si estaba desmayada o que le había pasado.

Solo que Chris me miró con miedo, antes de que ambos corramos hacia ella.

Los chicos ColtDonde viven las historias. Descúbrelo ahora