Los problemas siempre vuelven || Hope Máximoff

7. Prisión.

Dos días después de eso, Natasha volvió a encontrarse a Hope golpeando un saco de boxeo, solo que esta vez Tony se le adelantó.

El millonario colocó una mano en el hombro de la chica, que se detuvo, sudorosa, y lo miró.

—¿Qué haces por aquí? Nunca te había visto.

—Sueles estar durmiendo — se justificó Hope encogiéndose de hombros.

Natasha no quería espiarlos pero no pudo evitarlo. Notó cierta complicidad entre ambos que no había antes, como si supiesen algo que nadie más sabía.

—Últimamente no he dormido bien — admitió Tony — no es intranquilidad, más bien es... ansiedad. Necesito conocerla, verla con mis propios ojos, comprobar lo que puede hacer.

—Pues más vale que vayas aprendiendo a controlarte — Hope comenzó a quitarse las vendas de las manos — he registrado todo el disco duro que pude salvar de la nave y no aparece por ninguna parte. Créeme, lo he leído ocho veces.

Tony señaló con la cabeza las manos amoratadas y los nudillos ensangrentados de la chica.

—Deberías tener más cuidado.

—Se curarán antes del desayuno y nadie se dará cuenta — respondió restándole importancia — lo que importa es que la encontraremos, descubriremos la manera de matar a Thanos y los vengaremos.

Tony asintió y Natasha contuvo la respiración.

Estaban buscando una forma de vencer a Thanos, ellos solos y sin contárselo a nadie.

—Y no quiero ni una palabra de esto a mis padres — Hope señaló con el dedo a Tony — el último que la buscó terminó en la tumba. 

—Y si no se lo digo seré yo quien termine en la tumba.

Natasha sintió una punzada en el pecho al escuchar como Hope se negaba a decírselo pero no pudo evitar que se le dibujase una sonrisa triste en los labios porque quería protegerlos.

—Entonces tú terminarás en la tumba de cualquier manera — repuso Hope — déjalo de momento, yo me encargo.

A la espía le llegó un mensaje de Bruce: la tecnología está fallando, llama a Tony.

—Tony — dijo entrando y llamando la atención de ambos — esta pasándole algo a la tecnología de todo el edificio, necesitamos tu ayuda.

Hope desapareció sorprendiendo a ambos y apareció un minuto después, cuando ambos estaban camino de la sala principal.

—No es solo aquí — dijo caminando al lado de ambos — es por todos los estados, por Canadá también. Creo que alguien va a comenzar una retransmisión, vamos.

Agarró a ambos por la nuca y desaparecieron.

En la sala principal Hope se quedó separada del resto. No podía acercarse a la pantalla en la que se veía la retransmisión, no podía acercarse.

—Hola a todos. Hoy voy a revelaros un secreto que os ha sido ocultado durante muchos años, con el fin de protegeros y terminar con la amenaza pero esto no ha sido posible y merecéis saber. Merecéis saber que entre nosotros habita una raza de mutantes, seres con unos poderes peligrosos a los que no les importamos.

En la imagen se vieron incendios y edificios siendo destruidos, gente gritando.

—Nos matan, destruyen lo que construimos, pronto, si no tenemos cuidado, solo quedarán ellos.

Un vídeo de Hope frente a unos policías y algunos civiles comenzó, un par de segundos después todos estaban en el suelo, sangrando.

—Su nombre es Hope Maximoff, se esconde en la base de los Vengadores, ¡ha matado a más de veinte personas! Yo creo que es hora de actuar, ¿y vosotros?