20. El fin de una era.

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Ambos caminaron por los pasillos sin necesitar hablar para saber a donde tenían que ir

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Ambos caminaron por los pasillos sin necesitar hablar para saber a donde tenían que ir.

Llegaron a la sala donde ya se encontraban Rocket y Nébula, Carol Danvers, Stephen Strange, Thor, Clint, Scott, Jessica, Bruce, Natasha, Wanda y Peter. Se sentaron al lado de este último.

Vieron el guantelete de Thanos colocado en el centro con las gemas del Poder y el Alma separadas.

—Tenemos que decidir qué hacer — dijo Carol.

—Sacar a la gente de la Gema del Alma debería ser nuestra prioridad — contestó Nébula.

—Yo creo que deberíamos decidir primero que hacer con las gemas, no podemos dejarlas juntas — dijo Bruce.

—Hay que sacarlos primero — aseguró Strange.

—Es peligroso mantener las gemas juntas — aseguró Carol.

—No lo entendéis, ¿cierto? — preguntó Hope — mientras hablamos ellos están viviendo en el infierno. Y si mueren allí, mueren para siempre. Se acabó, fin del juego.

Se volvieron a mirarle. Al instante supo que no esperaban que hablase u opinase.

—Opinó lo mismo — dijo Thor.

—Votemos — propuso Scott ilusionado.

—A favor.

Hope, Peter, James, Strange, Clint, Scott, Thor y Jessica votaron a favor, Carol y Bruce en contra y los demás se abstuvieron o votaron en blanco.

—En ese caso, señor Strange, deshágalo — dijo Thor quien no paraba de repetirse que podría haber echo algo más, algo más por sus amigos Stark y Rogers.

—Lo cierto es que no creo que sea el más indicado para hacerlo. Debería ser alguien que ha pasado mucho tiempo allí dentro — miró a James y todos lo imitaron.

El pelirrojo entreabrió la boca. ¿Él? ¿Como podía esperar que él supiese utilizar un poder semejante de la manera correcta, sin equivocarse sin querer?

—Creo que debe ser alguien con conocimiento, el corazón puro y un buen sentido de lo que está bien.

—¿Él? — preguntó Nébula — no lo conocemos de nada.

Hope pasó el brazo por los hombros de su hermano mayor y asintió con la cabeza en dirección a Peter.

—Confió en James plenamente. Le confiaría mi vida.

—Lo mismo digo — añadió Peter.

—Si, él es... responsable — intentó ayudar Jessica, lo que era un gran halago.

Por la mirada que Hope le dirigió entendió que era el momento de que se defendiese a él mismo.

—Yo no quiero las gemas más que para deshacer todo el mal que él hizo a esta realidad, poder hacer lo que no pude en la mía.

—¿A qué te refieres? — preguntó Natasha.

—Vengo de una realidad paralela. Thanos la destruyó y... me guardó a mi como trofeo en la Gema del Alma. Me guardó a mi porque... Bueno porque en mi realidad yo era el Capitán América y no pude defender mi mundo. Supongo que para demostrar las limitaciones humanas. Era un psicopatía al fin y al cabo.

No entendió muy bien que les llevó a creer y confiar en él pero lo hicieron. Su hermanita le dio las últimas palmadas de apoyo en la espalda antes de dirigirse a su "misión".

Todos le estaban mirando cuando introdujo su mano izquierda en el guantelete, y no dejaron de hacerlo cuando éste se encogió para tomar la forma de su mano.

Sintió un poder que sería incapaz de explicar cuando colocó las otras dos gemas en él. Y entonces lo vio todo con mucha claridad, sabía cómo revertir el chasquido.

—Se como arreglarlo — dijo James.

El chico chasqueó los dedos generando una enorme luz. Cuando recobró la visión con claridad nada había cambiado en la habitación.

—¿Ya está?

Y entonces vieron por la ventana como un agente volvía a cobrar forma, desde unos polvos que había traído el viento.

—Es increíble — dijo Hope moviéndose demasiado efusivamente golpeándose la pierna y haciendo una mueca — éste es un buen momento para ir a por unos calmantes.

Se marchó de allí con las muletas mientras los demás observaban a más gente aparecer y aparecer. Sin embargo la visión de James comenzó a difuminarse y cayó de espaldas al suelo, desmayándose.

***

—¿Qué le ha pasado? — preguntó Hope más tarde cuando se enteró de lo ocurrido.

—Al parecer el poder de las gemas a sido demasiado abrumador para su cuerpo y se ha desmayado — informó Strange.

—Pero se pondrá bien, ¿verdad?

Strange no contestó sino que se limitó a observar al pelirrojo.

—¡¿Strange?!

—Supongo que si, no veo ninguna razón por la que no.

—¿Y por qué no has dicho eso desde el principio, imbécil?

Él sonrió, realmente había llegado a cogerle cariño a esa adolescente, posó su mano en el hombro de Hope antes de salir de la sala.

Hope observó el cuerpo inconsciente de su hermano, parecía dormir, aunque técnicamente lo hacía.

Se sentó en la silla a su lado y sonrió levemente.

En los últimos meses había sufrido mucho, había apostado mucho, pero había conseguido más de lo que nunca llegó a esperar.

Ahora estaba de nuevo con sus padres y con Wanda, Peter y ella eran felices e incluso había encontrando un nuevo hermano, James, aunque éste acabase de perder a su padre, nada más recuperarlo.

Tenía una genial y alocada familia, de la que Strange y Jessica habían empezado a formar parte, y que había dado comienzo con Steve, quien también se había sacrificado para que estuviese unida.

Esperaba que Tony saliese de esa, porque realmente le apreciaba.

Quizás nunca volviese a ser lo mismo, quizás fuese mejor o quizás no, pero algo sí que sabía, que nunca, nunca jamás, olvidarían como todo aquello había empezado, nunca olvidarían que hubo seis primeros Vengadores que les hicieron creer, les hicieron amar, les hicieron reír, que les mantuvieron unidos a pesar de las circunstancias, incluso en la lejanía.

Puede que no todos se hubiesen ido para siempre como el capitán, pero Thor había declarado que se iba al espacio con los Guardianes, quizás por una larga temporada; Clint había dicho que se retiraba, para siempre, seguramente Tony seguiría su ejemplo, si salía de esa; Bruce se retiraba de las peleas, quedándose únicamente como doctor y científico; eso dejaba a Natasha que estaba segura de que seguiría peleando, limpiando números rojos como ella decía, hasta que ya no pudiese hacerlo.

Puede que fuese el fin de una era, pero eso no quitaba que la siguiente empezase, otra llena de risas, aventuras y amor. Una era llena de héroes que seguirían adelante, luchando y viviendo, sin olvidar nunca a los originales.

Los problemas siempre vuelven || Hope Máximoff Donde viven las historias. Descúbrelo ahora