"Ella..."

Cap 16: Las baquetas del batería

El joven peli-verde corrió hacia el cuarto de Ashton, lloraba más que todas las veces que había llorado. Sin duda, se notaba que el chico lo estaba pasando realmente mal. ¿Por qué ha tenido la puta mala suerte Ashton? ¡Ha sido un puto accidente de coche! ¿Por qué cojones se le ha abierto  una hemorragia interna? Nada tiene sentido. Nada tenía sentido en estos momentos para Michael Clifford. Cuando llegó al cuarto de Ashton...

- ¡ASHTON! 

Ahogó un grito de sufrimiento. El chico lo vio, tumbado boca-arriba en su cama. Tapadito como siempre se tapa. Con su sonrisa que nunca más vería. Con sus hoyuelos marcados en sus mejillas. Su cara pálida como la nieve. Tenía la bandana que se puso el día del accidente. Tenía lágrimas secas en sus mejillas. Tenía su camiseta de tirantes que lo hacía único. Tenía el pelo alborotado como el de un león. Sus músculos al descubierto y su ropa calentita. Nada de esto parecía real. El joven creía que no era real.

- N-No...Ashton...¿Esto está ocurriendo de verdad? ¿Esto es jodidamente cierto? 

Michael cogió al chico y se sentó en el suelo. Poniéndolo encima de sus piernas. Ashton seguía sonriendo. El guitarrista no podia parar de llorar. No podía parar de mirarlo. Estaba de nuevo en un estado de shock. Mike agarró las manos de Ashton y en ellas notó que había algo. Otra...¿nota? La sacó y la comenzó a leer.

Para mi guitarrista favorito:

Supongo que si has visto esta carta, es por que has visto anteriormente el tocho gigante que te he escrito. Sólo quiero decirte que te tranquilices, todo esto es real. Ya has superado la peor fase. Ahora sólo falta olvidarse de mí. Te he empezado a componer una canción...no te rías...sabes perfectamente que no se me da bien componer, jo.:

"Oh, Mike. Con esas lágrimas cayendo por tus mejillas.   

Con esa sonrisa tuya que pareces una golondrinilla.

Con esa aficción por la hamburguesa con queso...

Haces que yo lo flipe cuando bailas eso...

Y tu perfume feminista me convierte en nudista..."

Vale, creo que acabo de demostrar perfectamente lo ridículo que soy. Pero...Estoy seguro de que estás sonriendo.

Michael seguía llorando, pero una pequeña sonrisa lo apoderó. Pronto volvió a llorar.

No llores enserio. Sólo besame y abrázame. 

Michael agarró a Ashton y lo acercó a su boca. Juntó sus labios con los labios fríos del chico. Transportaba sus lágrimas a los ojos del otro chico y seguidamente estas caían por sus mejillas. Y lo abrazó...lo abrazó con todo el cariño que nunca que le había dado a nadie.

Vamos, Mikey. No seas tímido ahora. ¡Con toda la pasión del mundo! Ya lo hemos hecho. ¡Qué no te de vergüenza ahora!

El peli-verde volvió a besarlo, pero esta vez se aseguró de que su lengua estaría presente. Le metió la mano por el interior de la camiseta para poder abrazarlo mejor. El chico estaba demasiado frío. El guitarrista tocaba sus abdominales. Era la última vez que iba a poder sentirlo. Le daba besos. Y esta vez no "era tan tímido".

Por cierto, Michael. Dentro de mi bolsillo tengo otra cosa para tí. Quiero que las guardes. Siempre me tendrás así presente.

Mike se apresuró a abrir el bolsillo. Y dio con ellas. Las baquetas del batería.

- Ashton...Tus baquetas...no me merezco esto. (Miraba las baquetas)

"Te quiero, guitarrista". Decían las baquetas. Esto le provocaban mas ganas de llorar a Michael.

Sólo eso, Mikey. ¿Recuerdas aquella noche? Cuando estaba en frente tuya y tú estabas tumbado en la cama y me cantaste "You look so perfect"? Ya sabes que lo de aquella noche no fue una locura. Fue algo que sentíamos mutuamente. Yo soy tuyo, como has podido comprobar. Y lo seré estando contigo o sin tí. Te quiero. Nos vemos pronto. 

Michael tiró la carta al suelo, y limpiando las lágrmas con su jersey miró al cielo. 

- Ashton, mi vida. Te quiero más. Eres mio y yo soy tuyo. NUNCA voy a enamorarme de nadie más...Eres mi último amor, y eso me alegra. Me alegra que...cómo has dicho antes, aquella noche pude ofrecerte que me sintieras. Estoy orgulloso de todo lo que hemos pasado juntos. Estoy orgulloso de todo lo que falta por pasar...porque...Esto no termina aquí, lo sabes ¿No?. Cuando yo esté contigo seguiremos viviendo momentos juntos. Cuando yo esté contigo, podremos seguir haciendo lo que queramos juntos. Estas putas baquetas de aquí. (mueve la mano, donde tiene las baquetas). Las voy a guardar. Y las voy a llevar a todos los putos conciertos en los que participe. Las voy a llevar con los chicos. Y los tres seremos grandes. Grandes por ti. Grandes por tí. Te quiero. Muchísimo. 

El peli-verde seguía llorando. Finalizó su discurso besando de nuevo al chico.