El siguiente día Ámbar está agotada, ya que no duerme. A cada rato da vueltas a sus pacientes. Justo se está deshaciendo de la bata del hospital cuando tocan a la puerta.—Ámbar: Adelante.—dice sin mirar.
Luna entra en el consultorio con las manos detrás de ella. Ámbar levanta la mirada y sonríe al verla. Su día definitivamente estaba empezando bien.
—Ámbar: Buenos días cielo.—saluda a Luna con un beso en los labios.
—Luna: Buenos días ¿ya terminaste de trabajar?
—Ámbar: Así es. ¿Necesitas algo?
—Luna: Tengo algo para ti.
Ámbar sonríe y espera. Luna le entrega una bolsa. Ámbar la abre y saca lo que hay dentro, es una especie cartulina de color crema.
—Ámbar: ¿Me compraste una estrella?
Luna sonríe.
—Luna: Iba a dártelo después, pero soy muy impaciente a la hora dentregar los regalos, así que no pude esperar.—Ámbar se queda sin habla, simplemente mirando lo que tenía en las manos. No se lo esperaba —. ¿No te gustó? Porque sino...
—Ámbar: ¿Estás de broma? Lo adoro, cariño, me gusta mucho.—dice acercándose a Luna y dándola un tremendo beso que envuelve todos sus labios—. Es hermoso, muchas gracias.
Luna sonríe y en eso se abre la puerta. Merche se queda en medio de la nada viendo a Ámbar y a Luna besándose. Ninguna de las dos se percata de su presencia hasta que una de las enfermeras responsables de cuidarla habla.
—Enfermera: Señorita, no puede estar dejando la habitación.—Ámbar y Luna miran hacia la puerta y se encuentran con una chica rubia de pelo largo. Por un momento Luna no puede evitar contemplar detalladamente a la mujer, a pesar de algunos moretones esta maliciosamente guapa. La enfermera mira. Ámbar asustada.
—Enfermera: Doctora Smith le juro que...
—Ámbar: ...no pasa nada.—y se dirige a Merche —. ¿Qué crees que haces? Te estoy diciendo que sigues en débil, la operación es reciente, no puedes seguir jugando como si fueras una niña.
—Merche: ¿Ella es tu novia ahora?.—Merche mira a Luna como si fuera abalanzarse sobre ella en cualquier momento. Luna sujeta el brazo de Ámbar con fuerza—. Es linda, espero que sean felices.—Meche da media vuelta siendo acompañada por la enfermera. A mediación que avanzaba no dejaba de mirar a Luna Y Ámbar.
Ámbar voltea a ver a Luna.
—Ámbar: Siento que hayas tenido que pasar por eso, habría preferido que no se hubieran visto.
—Luna: Tranquila, está bien...—Luna la caricia la mejilla para hacerla relajar y lo consigue. Ámbar suspira y besa la palma de la mano que Luna había llevado a su mejilla.
—Ámbar: Hay que irnos.
Luna asiente.
Ámbar toma el resto de sus cosas y conduce hasta su mansión. Le pide a Luna que se acomodeen lo que ella se va a dar una ducha para quitarse el sueño y el cansancio que llevaba encima.
Luna se toma el tiempo de preparar el desayuno. La cocina a pesar de ser enorme era fácil encontrar lo que se necesitaba. Huevos revueltos, beicon frito, tostadas, jugo y más. Ya tenía la mesa de la cocina hecha cuando aparece Ámbar.
—Ámbar: Vaya...
Luna sonríe.
—Luna: Ven, siéntate.—acota tomando a Ámbar de la mano y llevándola hasta la mesa. Ámbar se sienta y Luna hace los mismo.
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ᴇɴsᴇñᴀᴍᴇ ᴀᴍᴀʀᴛᴇ
RomanceÁmbar Smith es una famosa y prestigiosa cirujana de veintiocho años, atenta con sus pacientes y siempre ayudando a quien lo necesita. Pese a tenerlo todo, lujos y demás, siente que le falta algo, alguien a quien amar, alguien con quien compartir su...