~Capítulo 15~

983 75 24
                                    


Lun entra en la habitación después de que Víctor y los demás se hayan ido. Ámbar seguía dormida. Luna se acuesta a su lado y la abraza fuerte mientras besa el pelo de su nuca.

~dos meses después~

Luna se pasa el lápiz de ojos mirandose al espejo mientras Ámbar la observa sentada en la cama con la espalda recargada en el respaldo. De vez en cuando miraba su tablet, pero ver a Luna ponerse tan guapa era más interesante.

—Ámbar: A ése paso me sentiré celosa de tu nuevo socio.

Luna ríe guardando el lápiz de ojos y voltea a ver a Ámbar.

—Luna: ¿Enserio? Creí que había confianza.

—Ámbar: Y la hay, pero no confío en tu socio.

—Luna: Ni siquiera lo conoces

—Ámbar: No necesito conocerlo para saber que me caerá mal.

Luna camina hacia el encuentro de Ámbar, se sienta en la orilla de la cama y la mira a los ojos.

—Luna: Así que prefieres que me quede en casa sin hacer nada.

—Ámbar: Aunque no creo que sea mala idea, pienso que tienes que hacer lo que te hace feliz.

Luna besa los labios de Ámbar.

—Luna: ¿Cómo podría cambiarte por alguien más si eres lo mejor del mundo?

—Ámbar: Te amo.

—Luna: Y yo a ti.

Se besan nuevamente. Luna se levanta de la cama para tomar su bolso.

—Ámbar: Mucha suerte.

—Luna: Gracias.

Luna sale de la habitación. El hombre de seguridad estaba esperando por ella fuera de la mansión. Él la conduce al taller, Luna entra y su secretaria la informa que su socio la espera en su oficina. Luna, tras agradecer a su secretaria por la información, entra en su oficina.

—Luna: Disculpa la demora.

—Tristan: No hay de qué.—Luna lo mira y su cara por alguna razón le resulta familiar solo que no se acordaba exactamente dónde le había visto—. Me alegra saber que está en perfectas condiciones.

—Luna: Disculpa ¿nos conocemos?

—Tristan: Sería difícil para una persona que se desmayó recordar a quien casi choca.—Luna sigue intentando recordar, pero Tristan piensa que debía dar más explicación para hacerla recordar—. La conocí el día que chocó contra el árbol para no chocar con mi deportivo. O bueno, en ése entinces no pensaba asociarme a usted ya que no la conocía.

—Luna: Claro.—recuerda—. Usted me llevó al hospital.

—Tristan: Vaya, no ha perdido la memoria, eso realmente me consuela.—bromea Tristan.

Luna sonríe y va a sentarse en su lugar.

—Luna: Por suerte no. Tengo a alguien muy importante que recordar.

—Tristan: Vaya, debe ser muy afortunado.

Luna sonríe y toma el boceto que había sovre la mesa.

—Luna: ¿Qué tal si hablamos de negocios? He pensado que podríamos dar una primera campaña para que el mundo sepa de nuestra existencia. Quiero que la marca Lumbar sea reconocida.

ᴇɴsᴇñᴀᴍᴇ ᴀᴍᴀʀᴛᴇDonde viven las historias. Descúbrelo ahora