Te Amo Como Al Azul

26.

-Señorita Daniela ya llegamos a su casa así que ya puede retirarse del automovil.

Me despedí de Javier y no pude contener las ganas de ir a golpear a Johan quien estaba en la entrada de mi casa haciendose el caballero.
No queria pelear y ya estaba bastante sensible por todas las cosas que me habian sucedido en tan poco tiempo así que decidí pasar por su lado e ignorar su presencia.
Estaba abriendo la puerta cuando senti como me tomo del hombro con sus frias y rigidas manos y me acercaba a el

-¿Por qué eres así Daniela? ¿Acaso no vas a recibir las rosas que te traje bebé?

-No me llames así Johan y te pido que te largues ahora mismo de mi casa si no quieres que te saque a patadas,ya tengo bastantes problemas como para tener que lidiar con un imbecil con delirios de grandeza.

-¿Por qué tan arisca mi amor?¿aún sigues resentida por lo de la otra noche?

Cuando el dijo eso boto las flores al piso y con sus manos me tomo de la cintura acorralandome contra la pared.

-Mira Daniela no te hagas la dificil,sabes que ambos somos los chicos más poderosos de Bogota,sabes que tendremos que terminar juntos y además no te hagas,se lo facil y lo putica que eres...

Al escuchar eso empeze a gritar el nombre del jefe de guardias de seguridad

-¡¡Eduartdo!!¡¡Porfavor Eduardo!!

Johan me solto una de las manos de la cintura y la puso en mi boca,yo soltaba lágrimas sin parar

-Oye Daniela más te vale mantener la boquita bien cerrada si no quieres que haga daño.

Intentaba golpearlo pero el esquivaba todos y cada uno de mis golpes,me cargo y empezó a caminar hacia su automovil.
Mi llanto cada vez se hacia más fuerte pero gracias a que el tenia su mano en mi boca nadie podia escucharme.
Cuando estuvimos a poco metros de su auto el me bajo y me dejo de cargar pero aun así tenia una de sus manos agarrando mis dos manos y la otra la tenia en mi cintura.

-Bueno Daniela más te vale quedarte callada.