My two loves. (Malec)

13. ????

- ¡¡¡¿Qué, que?!!! ¿¿¿Te acostaste con el príncipe azul???

- Shhh. Cállate Tessa.

- No puedo creerlo Magnus. Engañaste a tu novio. - susurró.

- Ya sé, ya sé. Me siento terrible por eso. - y era verdad, Magnus se sentía culpable.

- ¿Y qué harás con el príncipe verde?

- No tengo idea. Lo quiero Tess, me gusta y no sé si estoy listo para dejarlo.

- Magnus, perdón por decir esto, pero... estás siendo un egoísta con ambos, si no quieres estar con el príncipe verde pues terminarlo y sal son el príncipe azul.

Ah. Porque claro, para Magnus, Alec era su príncipe azul y Matt era su príncipe verde.

- Yo sé. Sé que estoy siendo un completo idiota, pero Tess los quiero a ambos.

- Hey, tienes que decidirte por alguien de una vez porque si no te quedarás solo.

Suspiró - Eso haré. - cortó la llamada con su amiga.

Alec.

Ya estaba en la puerta de la casa de los Bane. Mi solicitud fue aceptada y regresaré a la academia mientras otro sargento ocupa mi lugar.

Lo más duro era la despedida. Matt había enloquecido cuando le dije que pedí un cambio, no quiso despedirse de mí y eso me hizo sentir mal de la misma manera que me sentía culpable por haber hecho el amor con su novio.

El señor Bane tampoco se lo tomó muy bien, pero al final aceptó y  agradeció por mis servicios - si supiera - la madre de Magnus me preparó un montón de galletas para el camino, esa señora siempre me cayó muy bien, tenía el mismo carácter que Magnus.

- Ojalá regreses algún día - había dicho la señora antes de darme un enorme abrazo y dejar un beso sobre mi mejilla.

Y por último Magnus. Oh mi hermoso y testarudo Magnus. Mi chico - que no era del todo mío - me miraba con los ojos llenos de lágrimas, en sus manos había un libro El beso del ángel era el título. Sonreí porque Magnus siempre me decía ángel.

Lo abracé y sollozó, sus lágrimas mojaban mi hombro.

- No quiero que te vayas Alec. No me dejes sin mi ángel. - me aferré a su pequeño cuerpo.

- Shh. Tranquilo mi amor, estarás bien. Matt te protegerá, estoy seguro.

- Pero te extrañaré muchísimo.

Me separé de él y me quite el anillo Lightwood. Tomé su mano y lo puse en su palma.

- Ésto es para tí. Cuida esto es el anillo de la familia, pero tú te has ganado esto a pulso. Quiero que me recuerdes siempre mi amor, porque yo siempre pensaré en ti. - asintió y se puso el anillo.

Sonreí con orgullo porque Magnus, el amor de mi vida, estaba usando el anillo familiar Lightwood. Una parte de él era Lightwood, una parte de él era Daddario y una parte de él era Bane. Siempre tendré eso bien presente. Besé sus mejillas, frente, nariz y ojos. Todo menos su pecaminosa boca.

- Siempre pensaré en ti, mi ángel. - asentí antes de subirme al taxi que me llevaría al aeropuerto.

- Adiós. Mi amor. - susurré y el auto avanzó dejando atrás a aquella casa que me acogió por casi 4 meses. Dejando atrás a mi mejor amigo y a mi primer y único amor.

Magnus.

Estaba malditamente llorando sin parar. Alec, mi Alexander, mi príncipe azul se marchó y tal vez nunca lo volvía a ver.

Fuí a la habitación de Matt y entré si pedir permiso. Mi novio estaba tumbado en la cama, él estaba igual de triste que yo. Me recosté a su lado y acaricié su bonito cabello, él se giró y me abrazó.

- No entiendo por qué se fue.

- Yo tampoco - mentí y me sentía culpable.

- Es mi mejor amigo, casi mi hermano y él... me dejó.

- Shh, shh. Tranquilo, cariño. Todo estará bien.

- Magnus - alzó su mirada y sus bellos ojos verde me miraron con tristeza.

- ¿Qué ocurre?

- Cariño, nunca me dejes por favor.

- Nunca, mi Matt. Nunca te dejaré

Magnus mentiroso. 🙄😅
Gracias por leer. 💕