Capítulo 16

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—Bien... respondiendo a tu pregunta... la gente de zonas pobres como la zona sur quiere venir a la zona norte. — tome mi copa y le di un trago, volví a colocarla sobre la mesa y me quede observando por unos breves momentos el ramo de flores que estaba cerca de mí, el cual esa niña me había regalado. —Todos los años miles de personas hacen exámenes para obtener un número de identificación. — no entendía por qué ella quería dejar de ser una mascota, por más que me lo explicara, pues era una idea descabellada, todos los humanos aquí anhelan con ser una mascota para los gatos. —De toda maneras solo eres una humana callejera, es inútil decirte todo esto... ¿el trabajo? Nadie quiere trabajar si puedes ser una mascota. Es más fácil y tienes más poder. — de mi bolso saque un lápiz labial para poder retocar el maquillaje de mis labios. —Eso es lo que se en términos generales. Si necesitas información más clasifica, prueba con los "Seekers". — me sorprende que esta niña me siga ciegamente a los bares, esto es algo que suelo frecuentar después del trabajo, pero ella con ese collar dorado caminando por allí, es algo inocente, demasiado.

— ¿Seekers? — pregunto ella mientras se rascaba la cabeza.

—Son traficantes de información, no hay nada que no pueden encontrar.

—Me suena familiar... — ¿Cómo a ella una macota con collar dorado podría sonarle familiar ese nombre? Me resulta algo absurdo.

—Pues claro que has escuchado sobre ellos, son infames, incluso la policía no puede hacer nada, pero yo no me acercaría a ellos si fuera tú...— espero que me hagas caso niña. —Porque son perros locos.

—Hey... — escuche una voz masculina, me congele en el acto. —Te hemos estado buscando. —me gire un poco hacia atrás y vi a tres perros detrás de nosotros y yo diciéndole locos sin prudencia, note como ellos miraban a esa niña mientras que ella se encontraba petrificada.

— ¡¿Seekers?! — Haneul grito fuertemente, de seguro recordó de donde los había visto antes.

***

Estaba por terminar de repasar los últimos ejercicios, el gran silencio en la habitación me ayudaba a terminar mis deberes mucho más rápido, pero en ello al ver el reloj en la pared me percaté de que pronto serían las nueve de la noche y cierta mascota aun no había regresado a casa, coloque las hojas sobre la mesa y empecé a inquietarme un poco. Esa osa estúpida...

—Idiota... — apreté mis puños al percatarme de que ya habían pasado casi dos horas desde que ella ha ignorado por completo su toque de queda. Comencé a mover de un lado a otro mi cola mientras me cruzaba de piernas, quisiera poder golpearla, ¿Dónde se habrá metido?

***

Esa tonta de Haneul, ¿Cómo se le ocurrio darme su collar? No me imaginaba que al final de mi día me terminaría corriendo por mi vida en medio de las calles, con mi ramo de flores y el collar de Haneul en mis manos.

— ¡Soy yo a la que buscan! — confeso ella, eso fue tonto, era algo muy notorio. — ¡Los voy a distraer y tu llamas a la policía! — ella estaba por irse hacia otra calle.

— ¡No seas estúpida! — era la idea más tonta que había escuchado. — ¡Mejor vamos a buscar a tu maestro! ¿Dónde está tu casa?

—Uh... al otro lado del rio, hacia el norte...

— ¿Hacia el norte? — me puse más tensa. —No puedo acceder a esa zona.

— ¿Entonces qué hacemos? — vimos como los perros doblaron la calle corriendo, enseguida Haneul se echó a correr hacia otra dirección a la que nosotros íbamos, separándonos por completo, sentí mucho miedo, así que yo también empecé a correr. ¿Por qué esa idiota se ha enredado con los perros? No sé cuánto había corrido, miraba desesperadamente las calles, en busca de algún oficial o alguien que me pudiera ayudar. — ¿Cuánto queda? —me pregunte en voz alta, tenía que doblar en una esquina, pero en eso alguien salió de una tienda y al final los dos caímos al suelo, cuando abrí mis ojos, vi los pétalos de mis flores en el aire. —Lo... lo siento tengo prisa...

you're my pet and so what? |BTS|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora