you're my pet and so what? |BTS|

Capítulo 43

— ¡Me lo prometiste! — ella fue corriendo hacia él para reclamarle al respecto. — ¡Prometiste que ya no te aferrarías al nuevo mundo! — ella fue una de las que lo habían escuchado diariamente hablar sobre esas ideas. — ¡¿No dijiste que solo querías proteger lo más valioso?! — JaeWoo, Yoon Gi, Haneul, todos los humanos que habían escuchado a Nam Joon decir eso creían fielmente en él. Jae Woo sabía que este mundo estaba mal, era horrible, pero ella quería proteger lo que más era valioso. — ¡Yo solo quiero seguir viviendo en este mundo contigo! ¡¿Por qué no lo puedes entender?! — lo que Nam Joon no sabía era que JaeWoo esperaba un hijo de él. Pero este sin esa información, solo empujo a JaeWoo bruscamente, haciendo que ella cayera al suelo. — ¿N-Nam?

—Tu eres la única que no entiende... — al ver aquellos ojos vacíos de Nam Joon, sintió terror. —Algo de corta duración como las emociones... es completamente inútil, ¡pero lo desconocido! — una sonrisa escalofriante salió de sus labios. — ¡Solo lo desconocido es eterno! ¡Eso es lo más valioso en el mundo! ¡No importan cuantos humanos fueron sacrificados! — JaeWoo temblaba ante aquel monstruo que desconocía por completo, Yoon Gi se sentía incapaz de hacer algo por ella, no podía proteger a ambas chicas a la vez. — ¡Descubrir un nuevo mundo eso es lo más importante! — Nam Joon sí que había perdido por completo los estribos. — ¡Eso es lo único que le da sentido a la vida! — en eso Yoon Gi vio atrás de Nam Joon una silueta oscura levantar su brazo, apuntándole a Nam Joon con una pistola de los Seekers, para darle un tiro en el pecho. El cuerpo de Nam Joon cayó al suelo, sin vida, JaeWoo al ver eso, empezó a gatear hacia su amado.

—N-No, no... ¡Ah! — JaeWoo entro en pánico, Yoon Gi vio como de las sombras salía TaeHyung, acercándose hacia él para reclamar lo que más quería.

—Entrégamela... — le ordenó TaeHyung a Yoon Gi, quien empezaba a abrazar con fuerza el cuerpo de Haneul. Un torneo de miradas empezó a formarse entre ellos, Yoon Gi estaba en duda, pero quería quedarse más tiempo al lado de Haneul, del poco que le quedaba a ella, pero en eso Haneul murmuro algo, haciéndole entender a Yoon Gi, haciéndole entrar en razón. Tal vez esa sea la última vez que se vean, Yoon Gi se levantó, cargando a Haneul y entregándosela a TaeHyung en sus brazos, quien la cubrió con su chaqueta. Yoon Gi sospechaba que esa sería la última vez que la volvería a ver. No quería entregársela a nadie, pero lo que Haneul murmuro fue el nombre de TaeHyung, no el de él. Mientras veía como TaeHyung se alejaba con ella, decidió darle algo de información que necesitaba. — El veneno que ha usado Nam Joon, es uno que se ha usado por muchos años para matar a los nobles, en las personas sus efectos son aún más severos, su cuerpo de ella empezara a decaer su temperatura, experimentara tinnitus, podría perder hasta la visión, la audición y lo más seguro es que deje de respirar... —Yoon Gi sabía que había poco tiempo, este decidió dejar a un lado su egoísmo, para que al menos TaeHyung se pudiera despedir de ella. Al salir de la iglesia, él atravesó aquel bosque que rodeaba la zona sur, quería intentar regresar a la mansión lo antes posible con Haneul, para que al menos JiMin la pudiera ver una vez más. La luna estaba en su punto más alto, las luciérnagas iluminaban a los alrededores.

— ¿Tae? — Haneul empezó a despertar un poco.

—Regrese... — murmuro él. —Como lo prometí...

— ¿Qué paso con los humanos?

—Descuida, ya mejoro la situación. Ese día, se estableció un nuevo tratado. Los gatos reconocen que los humanos y los gatos son iguales, y el área sur se volverá independiente. Ese día, los humanos obtuvieron los mismos derechos.

—Eso es bueno... — Haneul sonrió al escuchar eso. — ¿Tae? ¿Puedo decirte así?

—Ja... — le pareció algo divertido para él, ya que después de todas las veces que lo llamaba así, recién le ha preguntado. —Me gusta mucho como lo dices...

— ¿Tae? ¿Por qué hace frio? — TaeHyung recordó las palabras de Yoon Gi, este le dio un tenue beso sobre su cabeza.

— ¿Ahora? — al quedarse con ella así, le paso algo de su calor a Haneul.

—Gracias... — Haneul se sentía más cálida y algo mimada por aquel gato. —Me gusta tu esencia...— esa era una completa mentira, ya que Haneul no podía oler nada en esos momentos. — ¿Qué es ese sonido?

—Luciérnagas...— TaeHyung tenía sumo cuidado por donde caminaba, para no caer con Haneul.

— ¿Dónde? No puedo verlas... — TaeHyung se detuvo en seco, aún faltaba mucho para salir de la zona sur, pero sentía que el tiempo se le agotaba, tenían una gran luna sobre ellos, TaeHyung escuchaba una y otra vez las palabras de Yoon Gi en su mente, al recordar que la última fase del veneno seria que ella dejaría de respirar, se quebró, estaba por empezar a llorar. Sus labios temblaban.

—Es porque no hay luna hoy... — le mintió.

— ¿Está lloviendo? — pregunto Haneul al sentir como una gota caí sobre su mejilla, pero en realidad era una de las lágrimas de TaeHyung

—Si... — volvió a mentirle. —Está lloviendo... — este la abrazo fuertemente. —Vamos a casa...

—Me recuerda a algo... — la forma en como TaeHyung la cargaba y la abrazaba, para llevarla a casa, le hizo recordar a Haneul, cuando llevo a un gato herido bajo la lluvia a casa para que le curaran su herida. —Como a un gato que... que recuerdo... pero es extraño...

—Sí, lo sé. — TaeHyung creyó que era el momento indicado para contarle a Haneul la verdad, antes de que se agote el tiempo. —Tu solías llamarme Milky...

— ¿Qué? — Haneul no logro escuchar lo último, como si algo se hubiera apagado repentinamente en su mente. —No puedo... — murmuro mientras cerraba sus ojos. —Escucharte...

— ¿Ha-Haneul? — TaeHyung al verla a los ojos, se dio cuenta de que ella los había cerrado por completo, su respiración se estaba desvaneciendo poco a poco, era cuestión de segundos, TaeHyung la coloco con suavidad en el suelo y mordió su dedo, coloco en su frente de Haneul aquellos símbolos que su madre le enseño, para saldar su deuda de gratitud y que Haneul siguiera viviendo, al menos no en Catsrule, pero al menos que siga viva, en su mundo, TaeHyung la beso en los labios por última vez, suplicándole al destino que ella no lo olvidara, Haneul se empezó a esfumar hasta que nada quedaba de ella, como así vino Haneul, de la nada, igual se fue... —Te estaré esperando...