Capitulo 18

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La hora pico del tráfico es una pesadilla para cualquiera que se moviliza en coche, y al no querer esperar mas tiempo a que la fila avanzara un centímetro, la coneja marrón abrió la ventana del taxi y brincando sobre el resto de autos llego a la acera donde continuó su viaje a pie.

Corrió y corrió hasta ver que poco a poco dejaba atrás el inmenso mar de vehículos y cada vez se veían menos, osea, la razón por la que no avanzaban, era prácticamente nada, ella ya había llegado hasta el frente del desfile y lo único que veía era mas autos moviéndose irritantemente despacio.

Tania:(molesta) desperdicié 15 minutos en ese taxi cuando pude simplemente correr!

Se regañaba a si misma, debió usar su don de correr grandes distancias y no su billetera para pagar un taxi que la tuvo esperando un gran tiempo, debió haber saltado por esa ventana desde que vio aquel tráfico de frente.
Dejo a los lentos atrás y siguió su camino para llegar al taller de Skye.
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Tan pronto habían salido del distrito, el resto de la policía ya estaba en la entrada de este, los cuatro lagomorfos bajaron de los autos y fueron con el jefe quien los esperaba.

Judy: jefe!

Bogo: Hopps, que fue lo que ocurrió allá?

Judy: las máquinas de nieve, estaban a tope y sin nada para frenarlas.

Bogo: y las palancas?

Mat: estaban rotas y tiradas en el suelo, alguien entro y de seguro las quebró.

Bogo: no había nadie mas ahí?

Judy: no,nadie, y usted que hace aqui?

Bogo: vine con el resto a evacuar a los animales no aptos para el frío que estaban en Tundratown cuando esto empezó.

En la calle habían varios oficiales y paramedicos que atendían a los mamíferos que fueron atacados repentinamente por la orda de frío, pasar casi 20 minutos en un ambiente que excedía los 40 grados bajo cero era peligroso, tanto que incluso algunos valientes buenos samaritanos se arriesgaron y entraron al helado bioma a intentar salvar a quien pudieran.

En la patrulla se encontraba Jack junto a Janet quien debido a la exposición al frío había pescado un resfriado, la liebre se había ido y al tiempo volvió con un vaso de sopa para ella.

Jack: ten, tomala

Janet: gracias, a shi!!!

Jack: salud.

Janet: gracias de nuevo

Estar con el era divertido, era gracioso cuando debía y su seriedad de alguna manera la volvía loca, se sentía feliz de tenerlo a su lado y amaba cuando se preocupaba por ella como en ese mismo momento, su plan para ganarse el amor del agente iba bien, pero tenia aun un pequeño temor, no importaba cuanto se quisieran, cuanto se cuidaran ni cuan fuerte fuera su relación, temía que su relación con el se rompiera mas fácil que una ramita si le confesaba lo que sentía por el,quería decírselo en ese mismo momento, pero aun no estaba lista.
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Sin aire, así llegó la pobre coneja hasta el taller de la albina, y para colmar aun mas, no había un alma a la vista, entro al taller donde había un gran camión suspendido, unas cúantas motos y en un lugar alejado reconoció de inmediato el deportivo azul del zorro, estacionado en una plataforma que lo mantenía levantado a unos dos metros de altura.

Tania: así que ahí estas, que te hicieron?

De pronto escuchó una puerta abriéndose, volteo a ver la fuente del sonido y vio a Skye saliendo de una habitación leyendo unos papeles. La coneja sonrió y se acerco a la zorra.

Felices Juntos 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora