Sólo, como el principio. Sólo, como toda su vida lo había estado y se sentía tan triste, tan vacío…
“Este día debía ser un festejo, no un funeral”, así lo sentía Jimin. No estaba enterrando su cuerpo, no había vela o algo parecido, pero con su despedida, así parecía.
No pudo tocar la comida que Yoongi preparó, no recogió nada del picnic que tenía en frente. Simplemente se levantó y corrió hacia la casa, tenía un ápice de esperanza que fuera una broma de mal gusto. Recorrió la casa entera gritando su nombre sin recibir respuesta. Fue de último a la guarida de su antes compañero, encontró ahí una carta.
“Mi amado Jimin:
Sé que en este momento es doloroso, pero no intentes buscarme, no estaré en tu mundo por mucho tiempo. No sé cuánto tiempo será, sólo sé que hay que ser pacientes para volvernos a ver.
Hazlo por un tiempo, pero por favor no me odies toda la vida, no odies al mundo, no odies al Universo, no odies lo que fuimos.
Si el destino me dejaría elegir entre no morir siendo niño o repetir lo que pasó entre nosotros, te elegiría a ti siempre.
Sólo hay una cosa de la cual me arrepiento: el daño que te probablemente te hice al desaparecer. Espero que puedas perdonarme algún día.
Ten una buena y larga vida. Aprovecha cada día.
Te ama, Min YoonGi.”
Por 11 meses lloró su partida, leía su carta al menos veinte veces al día. Cuando sintió que la herida ya había sanado un poco, al doceavo? (mes le escribió una respuesta, una muy corta.
“Mi amado Min:
Se siente tan extraño no tenerte aquí, me haces mucha falta.
No te odio, es imposible para mí hacerlo.
Te amo. Nos veremos pronto.”
Dejó de escribir cuando estuvo a punto de llorar. Dobló el papel y lo dejó donde había encontrado la carta de YoonGi. Sabía que nunca iba a ser leída o a tener una respuesta, pero sintió que de esa manera que el dolor salía de su ser.
Aproximadamente por dos años le escribió cartas y, con la última carta decidió dejarlo descansar en paz. Selló su “guarida” dejando atrás su dolor, sus cartas y la carta de YoonGi adentro.
Conforme el tiempo pasó, se sintió solo y decidió alquilar los demás cuartos de la casa, dejando la biblioteca para sí mismo. Leyó todos los libros que habían en el lugar y con ellos aprendió a redactar mejor. Lentamente fue recordando cada detalle de Yoongi y de su corta pero significativa vida juntos; fue plasmando todo en papel. Escribía día y noche, sin parar hasta que le dolían las manos.
Le rindió honor a su más grande amor en cada una de las 420 páginas que escribió y, lo publicó bajo el nombre de “Presence”. Pudo cautivar a muchas personas con su libro, sin embargo, no se hizo famoso en todo el país. Escribió varios libros a lo largo de su vida y fue un poco reconocido.
El día de su cumpleaños número 62 (20 años después de la partida de YoonGi), sin explicación, sentía una gran paz en su corazón y, le escribió unas últimas palabras a Yoongi:
“Mi amado Min
Han sido tantos años buenos. Viví bien, te amé mejor y ahora es tiempo de unirme a ti.”
Park Jimin dejó este mundo mientras soñaba que se convertía en una estrella muy brillante.
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Presence [YoonMin]
Fanfiction"Algunas veces creemos que queremos desaparecer, pero lo único que deseamos es ser encontrados" Min YoonGi y Park Jimin protagonizan esta historia. Esta historia se desarrolla en los años 1965 en una solitaria casa, bastante alejada de la civiliza...