CHRISTIAN
Me hace falta tiempo para hacer todo lo que tengo planeado, adquiero el apoyo de mi padre y de mi hermano, me pongo nervioso al entrar a las oficinas centrales del banco de mi padre, saber que mi querida hermana estaba desmayada sin saber por qué, la ventaja es que hay gente profesional para los primeros auxilios, si Elliot y yo estábamos preocupados, la cara de mi cuñado se notaba realmente angustiado, por lo que mi padre canceló la reunión y mi madre, cuñado y hermana se fueron al hospital.
Ese mismo día nos enteramos que Mía seria madre, me da mucho gusto saber que seré tío por partida doble, el de Elliot y el de mi hermana, me pregunto ¿cuándo seré yo padre? Ana se puso un dispositivo porque no me gustaban los condones, la inyección no es muy segura al igual que las pastillas, no puedo pensar en proponérselo a mi novia, primero tengo que casarme con ella, es la mujer que quiero que viva a mi lado por siempre, que sea la madre de mis hijos y mi compañera en las buenas y las malas, a veces me hago el desentendido haciéndole creer que nunca se lo propondré, si ella supiera todo lo que estoy haciendo para estar a su lado.
Su hermana y hermano a veces no tienen tiempo de venir, porque todos los fines de semana me rapto a mi novia y no estamos en casa, esos son los únicos días que pueden venir a ver a mi novia, soy egoísta al no dejarla ver a sus hermanos, ellos son muy felices y yo soy feliz con Ana, dejo a cargo la gerencia del banco a mi subgerente dos veces por semana, mi padre está al tanto de lo que estoy haciendo, mi plan va viento en popa y no veo ningún lado negativo. Necesito que firmen mis cuñados la sesión de derechos de la casa de Montesano a Ana, sé que lo dijeron de palabra, pero aún está a nombre de los tres, no así la de Seattle, obvio que no me interesa la casa para mí, tengo dinero para comprarle su propia casa a mi futura esposa.
Han pasado varios meses, me aliado con el jefe de Ana por cuestiones de amistad y de negocios, este fin de semana tengo planeado que vengan mis hermanos, cuñados y mis padres, Hyde me propuso que se quedaran en las casas que están desocupadas, le propuse que me las rentara cada vez que vengan mis cuñados y mis padres, esas viviendas no se ocupan muy seguido, por lo que le propuse arreglarlas a los gustos de mis hermanos, cuñados y padres, este fin de semana he reunido a mi familia en Montesano. Sé que nos llevarán al restaurante donde trabajaban sus padres, he sondeado a mi novia, ella me comentó que le gustaría reunir a mi familia y su familia, le pregunté donde porque su casa es muy chiquita.
Mi linda novia me propuso ir a mitades, para hospedarlos en el mejor hotel de Montesano, le dije que sí pero no sabe lo que he hecho, para que las familias estén más cerca de lo que ella se imagina, mi madre se vino unos días para apoyarme, está todo listo lo que tengo planeado por muchos meses, ellos llegarán el mismo viernes entrada la noche, eso acordamos porque al día siguiente, nos alcanzarán en el restaurante. Me siento demasiado nervioso, quiero que salga todo perfecto, paso por mi familia a casa de mis padres y vamos en mi auto, les voy contando como es la unidad habitacional donde vive mi novia, mi novia está inquieta porque no llego, ellos tampoco saben que se quedarán en esa unidad a pernotar este fin de semana.
Hemos llegado y los llevo a la casa que he alquilado, me agrada que no quedé mal en los gustos de los cuatro, pero falta lo mejor porque ya instalados fuimos a la casa de Ana, vamos viendo todo tal como les explique, mi hermana estaba preocupada por no tener traje de baño, pero sé que mi cuñada se las arreglará para hacer algo al respecto, entro y lo primero que hago es besar esos labios carnosos y oler su frescura de mi novia, le pongo un antifaz y le pido que se lo quite en cuanto le diga, mientras se lo coloco, mis hermanos y cuñados entran sin hacer ruido.
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¿QUIERES CASARTE CONMIGO?
FanfictionLa familia Treyvelan Grey, una familia multimillonaria de banqueros por tradición, procrearon tres hijos, dos hombres y una mujer, jóvenes dedicados al estudio, diversión y al trabajo. Elliot de 26 años, Christian de 24 y Mía de 22, cada uno tiene a...