TRANSACCIÓN (Sesshome)

18. REIKI Y YOKI

Agachándose elevo su palma bañada en una energía pura y blanca. Una última vez observo el semblante sereno de su hija antes de tocar el vientre ligeramente abultado. Respiro hondo ignorando la presencia de los dos hombres observando desde el umbral de la puerta y entonces se acercó. Apenas las yemas de sus dedos habían tocado la superficie de su piel cuando inmediatamente fue rechazada por una descarga eléctrica que minimizo todas sus intenciones.

—¿Qué pasó? —pregunto Naraku al acercarse a ella y levantarla, pues del impacto había caído hacia atrás. Sesshomaru también entró, tomando entre sus brazos a la azabache aun inconsciente.

—Me rechazo —dijo Kikyo con los ojos muy abiertos —la criatura que lleva en su vientre —observo su palma aun sin creer la sensación reproducida en su cuerpo —él...

—¡Estas temblando! —musito Naraku al ayudarla a ponerse de pie.

Pero Kikyo seguía observando la quemadura en su mano para después dirigir su atención hacia el peliplata.

—¿Qué sucede? —indago Sesshomaru cada vez más impaciente —¿Por qué no pudiste purificarlo?

—Él posee ambas energías —menciono con un ligero temblor en su labio. Sesshomaru junto las cejas para después observar a Kagome.

—Es un hibrido —azuzo Naraku por detrás —obviamente posee ambas.

—No —interrumpió Kikyo mirando a la pareja —lo que crece en el vientre de Kagome dista mucho de ser un híbrido.

—¿A qué te refieres? —pregunto Sesshomaru.

—Kagome no carga con un simple híbrido. La energía que percibí no era mestiza sino pura —el único que arqueo las cejas sorprendido fue Naraku porque el omnipotente Sesshomaru oscurecía cada vez más sus facciones —y no solo eso. Él o ella tiene el absoluto control de las dos energías —mostro su mano herida a los ojos dorados que se clavaron en ella como estacas —me regreso mi propia energía.

Un silencio sepulcral se propago en toda la habitación, los tres pares de ojos se clavaron en la muchacha que se removía poco a poco.

—Antes de hacer algo —comenzó a decir Naraku por detrás —primero debes de saber qué es lo que hay en su interior.

Sesshomaru se aferró al cuerpo de Kagome sin prestarles atención.

—Y debes de darle tu <<señal>> —añadió Kikyo al abrazarse a sí misma —no puedes mantenerla por mucho tiempo en ese estado, aun dándole tu sangre y crear un lazo irrompible con ella, sabes bien que quizás no sobrevivirá.

—O quizás si —espetó Naraku al avanzar y quedar en medio —existe una forma en la cual probablemente pueda sobrevivir —Sesshomaru le escuchó sin hablar —¿Por qué razón muere una humana al parir un hibrido?

—Porque no puede contener la energía dispersa del recién nacido —respondió Kikyo enseguida —la intensidad del parto consume toda la energía vital de la humana y... —de pronto el rostro de Kikyo se ilumino al comprender.

—Entonces ahí tienes la solución.

—¿Incrementar su energía? —repitió nada convencido Sesshomaru —admito que es poseedora de un increíble poder espiritual pero si confirmo la pureza del bebé en su vientre, necesitara más de lo que ya tiene.

—En realidad —era Kikyo quién daba un paso al frente —ese no es todo el poder de Kagome —los dos se le quedaron viendo con absoluta sorpresa —su padre selló gran parte de sus poderes espirituales al nacer.