La batalla seguía sin tregua, uno a uno caía de los dos bandos, no había distinción por ningún lado si era, bruja, mago o cualquiera que se entrometiera en su camino, Harry Potter se encontraba peleando con aquel ser llamado Voldemort, no podía rendirse ni tirar la toalla no podía fallar, a su mente volvieron todos los caídos, por ellos lo lograría y no se detendría.
El último ataque retumbó el sonido agudo de la muerte, se dejó escuchar por todo el lugar volviéndose pronto en un silencio casi aterrador, Harry respiraba con dificultad, la sangre y el polvo; el dolor punzante gobernaban en ese momento a Harry, Las piernas le fallaron quedando sobre sus cuatro aun jadeando sintiendo que a cada momento estaba más cerca de perder la conciencia, la nubosidad de sus ojos estaba cobrando factura de todo lo que había pasado, todos aquellos años sin ser una persona normal.
— Lo lograste.
Se asustó al escuchar esa voz, por un momento pensó que tal vez no había derrotado a Voldemort, pero podía asegurar que en esos momentos estaba completamente solo.
— Ahora eres el mago más poderoso.
— ¿Quién eres? - hablo con voz nerviosa.
- ¿Yo?, yo soy tu Harry, cuando aceptes quien soy te daré un conocimiento más allá de lo que puedes imaginar.
- No soy como Voldemort.
- Claro que no, tú eres mejor que él, todo estará a tus pies.
- No...
- Tendrás que aceptarme Harry, pero esperaré pacientemente hasta que tú estés listo, llámame Harry y te daré algo que te cambiará para siempre.
Aquellas fueron las últimas palabras que llegaron hasta su mente, por fin dejando la conciencia, No se dio cuenta cuando llegaron con él, Hermione y Ron y parte de los demás, Harry se había sumido en un sueño.
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Abrió los ojos observando aquel techo que conocía muy bien, estaba en San Mungo, espero ver a alguien acompañándolo, pero estaba completamente solo, Odiaba ese lugar, salió de la cama, no dispuesto a quedarse más tiempo en ese lugar, sintió el mareo en cuanto se levantó de la cama apoyándose de la cama que hacía unos momentos ocupaba.
- Demonios...
La puerta se abrió en aquellos momentos, dejando pasar a una Hermione que al verlo levantado corrió hasta él ayudándolo, seguido de un Ron que lo miro estático desde la puerta.
- ¡Ron!, Que esperas ayúdame- reprendió ante el hecho que no ayudara el pelirrojo.
Ron pareció despertar del letargo en el cual estaba corriendo hasta los dos, ayudando a Harry a sentarse en la cama de San Mungo.
- Harry, tranquilo, te acabas de despertar- hablo Hermione.
- ¿Hace cuánto que estoy inconsciente? - murmuró Harry
- Por lo menos 3 meses Harry.
Harry la miro con sorpresa, pero al mismo tiempo en su aun aletargada que se encontraba su mente lo comprendía porque toda la batalla que había tenido junto con todos los años de estrés lo había provocado, pero... se sentía cansado y algo le decía que no era porque había pasado 3 meses inconsciente, fue cuando la puerta se abrió de nuevo dejando entrar a un hombre mayor.
- Es le medimago que ha estado tratando contigo Harry- hablo por primera vez Ron- Harry se siente mal, ¿podría revisarlo?
El medimago sin decir ninguna palabra se acercó a Harry comenzando a examinarlo con detenimiento absoluto sin que nada osara pasar por alto ante sus ojos, Harry pudo verlo, ese hombre lo miraba con lástima, algo que Harry odiaba y que no estaba dispuesto a tolerarlo más, ya no más.
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El Nuevo Lord(Editando En Progreso)
FanfictionHarry venció a Voldemort, pero eso conllevó a un cambio en Harry, no por nada había sido seleccionado como Slytherin, y el había negado entrar a ese lugar; ahora lo entendía no sabía si agradecer en el fondo a Voldemort el abrirle los ojos o maldeci...