Moments

Capitulo 43

Mi cuerpo se removió, abrazando el pecho desnudo de Louis. Abrí los ojos lentamente, pestañeando para poder acostumbrarme a la luz solar que se colaba por las ventanas. Bostecé vagamente, estirando mis músculos superiores. Me di cuenta de que estaba en ropa interior, sobre la cama, y sábanas cubriendonos. Louis traía los mismos bóxers de ayer. Moví mis piernas por debajo de la manta blanca, de casualidad rozé contra las piernas de Louis. Mi mirada se dirigió hacia sus ojos, los cuales aun seguían cerrados. Su rostro se veía hermoso, sus labios entre abiertos y respirando profundamente. Me sentía tan contenta de haber hecho lo de la noche anterior, no me arrepentía de nada. Había sido delicado conmigo, el dolor lo sentí a medias, contando que fue mi primera vez. Tengo 16 años, no estoy ni muy chica ni muy grande para haberlo hecho. Había pensado siempre tener este tipo de relaciones románticas con Harry, pero fue un error. Su rostro era tan tierno, que me impulsé hacia su cuerpo y lo abracé. Sus parpados se movieron. El color azul de sus ojos iluminaron cuando despertó. Su mirada perdida tratando de encontrarme, hicieron que sus pupilas se agrandaran. Pasó su mano por su rostro, refregándolo. Recosté mi cabeza sobre su pecho, escuchando el latir de su corazón.

"Amor." Habló con voz ronca. Levanto mi cabeza para poder mirarlo. Posicionó una curva en sus labios al verme. Me levanté un poco de la cama para acomodarme a la estatura de Lou. Mis labios besaron su mejilla rosa. "¿Que tal has dormido?"

"Excelente." Sonreí. Sus tibias manos pasaron acariciando todo mi rostro. Estaba caliente por el calor que hubo, sin relacionarne a la actividad que habiamos hecho. El clima estaba raramente caluroso, aunque digamos que hacer el amor con Louis ayudo a sentirme caliente y sudorosa. "¿Y tu?"

"Feliz."

Ayer nos quedamos despiertos hasta la 1am. Se supone, o hasta ahora que recuerde, habíamos quedado dormidos en el sillon de la sala. Traía puesto la remera blanca hasta mis muslos y unos bóxers. No vestía en la parte de arriba.

"¿Cómo es que llegamos aquí?"

"Te cargué, el sillon era incomodo."

"¿Tu me pusiste ropa?" Asintió descaradamente. Negué divertida y pegué un suave manazo sobre su estómago.

"Creo que no tiene nada de malo después de haberte visto completamente desnuda." Mis mejillas se encendieron de nuevo.

"Shh." Rió rodando sus ojos. Mi estómago rugió inesperadamente.

"Prepararé el desayuno."

"Uh." Hice un sonido positivo. Louis casi siempre cocinaba cuando estamos solos. Todo lo que prepara es delicioso, es algo raro de él. Sabe cocinar y hacer trenzas. Me safé del agarre de cadena que le hice a mi novio y él se paro de la cama. Se dirigió hacia el baño de enfrente. Su perfecto torso se podía ver gracias a que no llevaba camisa. Sin cerrar la puerta, se lavó sus dientes. Una vez acabado de realizar su aseo, busco entre su closet. Saco unos jeans desajustados.

"Mi remera, princesa."

"No me la quitaré. "

"¿Por que?"

"No traigo brasier."

Me echó una mirada picarona y luego volvió hacia su cajon de prendas. De allí se colocó un simple polo color azul marino, casi igual que el color de sus ojos.

"Iré a la cocina, no demores."

"No lo haré."

Me levante perezosamente de las suaves sabanas en las cuales me había enredado. Al hacer tacto mis pies con el suelo congelado, todo el calor que se me había acumulado en el cuerpo se fue de inmediato. Me pare de puntillas y de esa forma fui caminando hacia el otro lado de la cama. Ahí estaban las babuchas de "Bob Esponja" de Lou. Me las coloqué y fui directo hacia el baño.

***

Reía de las tonterias que Louis hacía con su comida. Había hecho un desastre, pero como él me habia dicho: "Es mi casa" y podía hacer lo que se le plazca.

"Que bien se siente estar solo los dos."

Habló mientras alzaba su taza de café dirigida hacia sus carnosos y rojos labios. Me encantaba cuando sus ojos azules se concentraban en algo. Este caso, las noticas del periódico. El lugar era tranquilo, y lo bueno era que mamá confiaba en mi y sabía que estando al lado de Louis no me pasaría nada. Ella casi nunca se preocupaba. También le sorprendía la buena relacion que teniamos él y yo. Tres años desde nuestro primer beso. Tres años desde que me pidió ser su novia y sentirme la mas afortunada del mundo.

"¿Que piensas hacer hoy cariño?"

"No lo sé."

"Tengo una idea." Volteo a mirarme entusiasmado. "Iremos al Pet Shop."

Di un pequeño empujón de la emoción. Comprar una mascota sería la idea mas grandiosa del mundo. Louis había querido uno desde que dijo que se mudaria.

"¿Un perrito?" Asintió alegre. Mis manos se palmeaban entre si. Nunca había tenido la oportunidad de tener uno. Pero compartilo con Louis sería mejor aún . "Como lo llamaremos?"

"Me agrada Brucke."

"¿Y si fuera hembra?"

"Si algun dia tenemos hijas, quisiera llamar a una Emma."

"¿Por qué Emma?"

Dejó su taza del líquido marrón sobre el plato en donde se posicionaba. Se apoyo de codos sobre la mesa. Saca un lapicero que se encontraba al costado del periodico, y seguido empezó a rayarlo de esta forma:

E

M

M

A

"«E» significa Eres." Coloca la palabra (eres) justo al lado de la «E». " «M» significa Mi." Coloco el artículo al lado de la letra «M». "La otra «M» significa Mundo." Hizo lo mismo con esa palabra. "Finalmente «A»significa Amor."

Él volteo el papel en donde había rayado, y pude ver con más claridad lo que había escrito:

E res

M i

M undo,

A mor

Emma.

Sonreí enternecida. Louis sonrió y palmeo sus piernas. Me levanté de la silla en donde estaba sentada y pasé hacia los muslos de mi novio. Me acurruco en sus brazos tiernamente y luego me besó. Su aliento a café se mezclaba con el mío. Me apegué mas hacia él, pasó su lengua por mi labio inferior. Encadene el cuello de Louis con mis brazos, sintiendo su tibio aliento rozar el interior de mis mejillas. Si pudiese contener aire, lo besaría hasta que haya caído la noche.

"Me bañaré." Logré decir al safarme de su boca. Mi respiración era agitada causada por el intenso beso compartido.

"¿Quieres que te acompañe?"

"Hm. . ." Sí quería, más que nada. Pero no respondí. Frunció el ceño divertido. "Quiero ir al Pet Shop."

"Iremos, de verdad." Me paré de sus piernas, dispuesta a irme hacia el baño. Me sentía acalorada, bañarme con Louis no era mala idea, pero quería ir rápido. ¿Quién sabe cuanto tiempo demoraríamos al bañarnos juntos?

"Por eso no quiero tardar mucho." Se levantó, me agarro de la cintura rodeandome con sus brazos y beso mi mejilla.

"La proxima no te dejaré."

Reí

"Bien."

"Hay un par de toallas en el baño."

"Las buscaré." Su mano seguía en mi cintura. Miré hacia arriba, él tenía una sonrisa tan grande que volví a excitarme. Mi cuerpo lo que me pedía era un beso suyo, así que me paré de puntillas y volví a devorarme sus labios. Este beso se ponía cada vez más intenso. Louis me pegó sobre la pared, mientras me seguía besando, acariciaba mis piernas. Sus besos pasaron hacia mi cuello.

"Hm . . ." Él gemía , mi cabeza se inclinaba hacia la izquierda, dándole paso a su lengua besar mi nuca.

"Cambio de idea, bañémonos."