🌼;; 2yeon || Notice me, unnie.

U n o

El fanfic está basado en el sistema educativo de Corea del Sur, por lo que tienen 16/17 años y están en secundaria.

Número de palabras: 526

Era un día normal y corriente, las once de la mañana de un viernes, para ser exactos. Me encontraba en mi hueco habitual entre las escaleras que subían a los pisos superiores, esperaba a la llegada de mi novia y sus amigas.

Cierto era que el viernes era el inicio del fin de semana, lo que significaba acostarse tarde y levantarse a las tres de la tarde, pero yo ya me había acostumbrado a la cansada vida del estudiante, por lo que para mí esos dos días de descanso eran como cinco minutos de respiro. Estaba sumergida en mis pensamientos hasta que una suave y dulce voz los interrumpió.

- Nayeon...-, levanté la mirada para ver quién era. Era Myoui Mina, una alumna extranjera que iba a mi misma clase. Le sonreí ampliamente y le asentí para que prosiguiera. - Hay una cosa que necesito hablar contigo, si no es molestia.

- ¡Adelante!-indiqué un hueco al lado mío para que se sentase. Ella hizo lo que le indiqué y se sentó a mi lado.

- Verás... Tengo una "amiga" en primero que está muy interesada en ti, y eh, me preguntaba si le darías... ¿una oportunidad?

La miré con confusión durante unos segundos intentando razonar lo que dijo, hasta que se me iluminó la bombilla.

- Mina, no es por ofender ni nada pero, no. Por dos razones. Primera, tengo novia. Segunda, ya sé de quién hablas y no, no voy a salir con Jeongyeon.

Quizás fue demasiado brusca con mis palabras, o eso era lo que la cara de la nipona me hizo interpretar. Su única ceja visible, debido a que tenía el otro ojo tapado con el pelo, se arqueó y una mirada de tristeza se dibujó en su rostro.

- Nayeon, entiendo que estés cansada de Jeongyeon, pero ella de verdad te quiere mucho, deberías darle una oportunidad a ver si a así al menos quedáis como amigas-parecía sincera, y su delicada voz sólo hacía que me compareciera más.

- Umh, bueno, me lo pensaré-dije después de haber reflexionado unos escasos segundos. - Pero que tampoco se ilusione demasiado.

Los ojos oscuros de Mina se iluminaron, y una tierna sonrisa apareció en su rostro, parecía como si le acabasen de dar el gordo de Navidad y reservas de chocolate para todo un año. - ¡Gracias, Nayeon! ¡Seguro que Jeongyeon te lo agradecerá!

Y dicho eso, se levantó de las escaleras y salió corriendo por el pasillo, casi atropellando algunos estudiantes transeúntes a su paso.

Me quedé un rato más sola pensando sobre lo que acababa de hacer. Me había metido en un compromiso, ahora tendría que quedar con esa charneca para darle una oportunidad... Y como no, otra vez mis pensamientos fueron interrumpidos, pero esta vez por una voz chillona.

- ¡Nayeooon!-sentí a alguien agarrarse a mi brazo con fuerza mientras giraba cabeza hacia donde provenía la voz. Era Sooyoung, mi novia.

- ¡Joy!-dije con felicidad y le di un suave beso en los labios. Había venido con su amiga Yerim, que se sentó a su lado. Las dos empezaron a hablar personalmente sinceramente no hice mucho caso a su conversación, ahora mismo mi cabeza estaba llena de Jeongyeon.