.7.

814 98 8
                                    


Los días que vinieron después no fueron mejores para el ojiazul pues a parte de soportar continuamente las miradas satánicas de Harry y de su hermana, estaba su preocupación por los próximos exámenes y también el ver a su padre cada vez más triste  e intranquilo.

Entonces Anne tuvo la genial idea de ir a la cabaña, una casa que la familia poseía en las afueras de la ciudad.

—El siguiente fin de semana no hagáis planes, iremos a la casa del bosque.

Des anuló todas las citas de su consulta del viernes y del sábado, Harry y Gemma protestaron enormemente pero sin obtener resultado alguno.

Mark no podía dejar su negocio cerrado por los tres días pues necesitaba todo el dinero que pudiese ganar, para así poder reconstruir su casa ya que el seguro quería negarse a arreglarla, así que no fue.

Aunque había sido a causa de un rayo, un elemento atmosférico aislado y sin provocación, su aseguradora le salía con que su tipo de póliza no lo cubría, por lo que debía buscarse un abogado y luchar en los tribunales.

La cabaña era enorme y preciosa, además estaba al lado de un hermoso lago y rodeado de naturaleza por todos lados, Louis creyó estar en el paraíso.

—Ven Harry, vamos a bañarnos—dijo Gemma tan pronto se bajaron del coche.

—Chicos.... primero que cada uno coja su mochila y la lleváis a las habitaciones, por favor.—Ordenó Anne viendo a sus hijos irse.

—Que fastidio mami...luego la cogemos —Dijo Gemma con una mueca.

—Obedece a tu madre cariño— Habló Des seriamente.

Finalmente los dos hermanos lo hicieron y siguieron a sus padres y a Louis, los cuales ya casi llegaban a la puerta de la entrada dónde había un porche con una hamaca y unas tumbonas de madera, a juego con toda la cabaña.

El ojiazul estaba feliz de salirse de la rutina por unos días, además de que él jamás había ido de vacaciones a ningún lugar, ni siquiera había pisado la playa o la piscina, por lo que no sabía nadar aunque adoraba el agua.

El interior del lugar era aún más hermoso que el exterior, la planta baja constaba de una pequeña cocina, una salita y un baño y en la planta de arriba, había otro baño y las habitaciones.

Al subir, Anne y Des llevaron sus maletas a la más grande, en la que evidentemente había una cama de matrimonio y Harry y Gemma fueron a las otras dos, mientras Louis se quedó parado en medio del pasillo.

—Oh cariño, ¿Qué haces aquí?, pon tus cosas en la de Harry. Allí hay dos camas y una es para ti.

El ojiazul se quedó pasmado.

—¿Qué?, ¿Cómo?, ¿Con Harry?, ¿yo y Harry, en la misma habitación?—se preguntó interiormente—¿Acaso Anne quiere amanecer encontrándome muerto?

La mujer lo miraba sonriente mientras este permanecía inmóvil y con su cara de espanto.

—No tengas miedo Louis. Ya sé que Harry es un gruñón pero en el fondo no muerde. No te preocupes...anda ve.

El ojiazul caminó con miedo hacia allí y se encontró a éste guardando sus cosas en el armario.

—¿Qué demonios haces aquí?.—preguntó al verlo en la puerta.

—T-Tu mamá me dijo que yo ocupe esa cam...

—¡Mamá!...¡Mamá!—gritó el ojiverde.

Anne acudió corriendo.

—¿Qué ocurre hijo?, ¿Estáis bien?.

—¿Qué rayos es eso de que «este», dormirá aquí?—preguntó muy alterado.

—Harry... no hay más habitaciones y ya que Mark no ha venido, no hemos ordenado que pusiesen ninguna cama supletoria en el salón. Debéis compartirla.

—Puede usar el sofá — habló éste de nuevo soltando un bufido.

—Pobrecillo hijo... ese sofá es muy incómodo, ¿Acaso quieres que su espalda sufra?.—dijo la mujer acariciando el hombro de Louis—Anda Harry...¿qué te cuesta?, no seas así cariño.

Anne condujo al ojiazul hasta la cama y le sonrió.

—Guarda tus cosas en el otro lado del armario Boo, tranquilo ¿De acuerdo?.

Louis asintió cabizbajo.

—Al menos podrías dejar de decirle ese ridículo nombre en mi presencia—gruñó de nuevo el ojiverde desde la puerta—se ve aún más patético de lo que es.

Anne sonrió y le hizo una mueca a su hijo, el cual se fue finalmente.

—No le hagas caso...Boo, es un nombre precioso y tierno. Tu mamá debía de ser muy cariñosa y seguro que te amaba mucho....Oye, ya sé que no es lo mismo pero si tu quieres yo puedo ser así como una mamá para ti, ¿Te gustaría?.

Louis la miró con sus ojos húmedos por las duras palabras de Harry y luego asintió emitiendo una tímida sonrisa.

—Eso me encantaría.

—Eso me encantaría

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
42. Un Amor De Ensueño- Primera Parte (Larry Stylinson)-TerminandaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora