Habitación 503

Capítulo 31 - La ultima vez que lo vi

Abrí la puerta de un golpe, sabiendo que él venia pisandome los talones.

Todo habia sucedido demasiado rápido. Demasiado complicado.

Abrí mi gran placard y comencé a tirar todas mi prendas sobre la cama.

- Amber, por favor - Hice oidos sordos. Marcus cerró la puerta de mi armario y me apresó entre sus brazos - Cariño. . .no queria decirte nada por que temia esta reacción

-Sueltame - Suspiré. Haciendo la cabeza a un lado. Por dios. . .tenia que soltarme

-No hasta que me escuches - Me mordí el labio inferior. Queria echarme a llorar en sus brazos, pero no podia ¿Cuántas mentiras más me habia dicho?

¿Por qué? ¿Por qué me habia entregado a sus brazos tan ciega y rápidamente?

El no me habia buscado a mi. No

Yo le habia besado por primera y segunda vez.

¿No me lo habia dicho por que se veia obligado a estar con migo?

-Me voy, y por lo que oí tienes media hora para sacar tus cosas de aqui. ¡Ya no quiero estar aqui!- dije

-Si tu no te vas, yo me quedo contigo.

-No. Quiero que te vayas, por que. . . ¿Que estamos haciendo? ¿Me has querido Marcus? ¡Me has herido! Oh, santa mierda. . . - Agité los brazos a ambos lados de mi cuerpo, para que me soltase.

Marcus tenia que irse. . .el juez habia dictaminado de que era inocente, y ya no debia estar en el internado. Por mi parte, debido al drama familiar preferi estar aqui.

-Amber, siempre te he dicho que no tenias la culpa. Y no la tenias, ni tú ni yo. Por favor. . . escuchame. Te quiero, de verdad

Me safé de su agarre, cogí el bolso y eché la ropa dentro. Me giré sobre los talones. Viendo aquel par de ojos mieles. Le besé casta y dulcemente en los labios.

-No estoy bien. Ni yo, ni tu. Ni esto - dije. Cogí una bocanada de aire y salí de la habitación ahogando las lágrimas.

Me intercepté con Julieta a mitad de camino.

-¿Está todo bien? - Negué con la cabeza y me eché a llorar entre sus brazos - ¿Marcus te ha . . . dañado? ¿Algo anda mal? - Sentí su mano, sobarme la espalda, y agradecí que dejara de lado la inmadurez y nuestras diferencias.

-No quiero hablar de él - Giré el rostro cuando sentí que la muchacha se ponia de piedra.

Su cabello castaño. sus ojos amielados, y el fino recorrido de una lágrima me partió el corazón.

Esa seria la última vez que veria a Marcus Powell.

~~~ VIERON ESO?? HEMOS LLEGADO A UN MILLÓN DE LECTURAS :)

Después de leer el capítulo, después de subirlo se me vino a la mente esta frase
"La peor parte no fue perderte a ti, fue perderme a mi"

Este capítulo va dedicado a @vale150900

Las quiero xoxo