- Por favor, no te duermas todavía – susurra Harry al otro lado de la línea.
- ¿Por qué? – digo, un poco ensimismada. Estaba a punto de quedarme dormida, antes de que mi móvil comenzara a vibrar.
- Yo… Baja. Sólo es un momento.
- ¿Qué?
Ya ha colgado. Me vuelvo a tumbar sobre la cama, sin saber muy bien si voy a poder levantarme. Realmente estaba casi dormida, después de este día tan largo…
¡JODER! ¡SON LAS TRES DE LA MAÑANA! ¡Harry! Eran las 12 y media cuando llamó… me he quedado dormida. No puede ser.
Busco a tientas con mis pies las zapatillas, pero al segundo estoy corriendo escaleras abajo descalza, porque no las encuentro. Harry.
Sé que correr ahora es estúpido, pero aún así abro la puerta y salgo al porche. ¡Harry! Analizo toda la oscuridad que me rodea, sin obtener resultado alguno. Mi respiración se hace más fuerte conforme caigo en la cuenta de cómo perjudica esto al problema que ya tenía. Joder, ¡me he quedado dormida!
- Sigo aquí – su voz roca suena justo detrás de mí. La ronca voz de Harry. ¿De verdad…
- ¿Harry?
- Aquí.
Me giro en dirección a las hamacas que ocupan el espacio. Él está en la más lejana a mí.
- Han pasado dos horas…
- Lo sé.
- Y…
- No iba a dormir de todas formas.
- Me he quedado dormida –explico, en tono de disculpa - pero aquí estoy – añado, en un tono más… alegre. Él sonríe.
- Me vale.
Me apresuro a sentarme en la hamaca libre. Observo su expresión, esperando esa conversación que no quiero mantener. No dice nada. Un par de minutos después, y más para él que para mí, susurra:
- Desearía al menos poder decir que no hiciste el ridículo, pero tampoco puedo animarte con eso – su mano viaja a su cuello, para frotarlo – ni siquiera estaba escuchando – añade, sacudiendo la cabeza.
- He hecho el ridículo.
- ¿Qué?
- Solo estaba resolviendo tus dudas.
- No. Seguro que no. ¿Sabes qué es ridículo? Yo – suelta una carcajada. Permanezco en silencio – Todo ese rollo de Niall… Es sólo que yo pensaba que era un secreto, pensaba en ello como si fuera un secreto, especial. Cuando me di cuenta de que no pensabas igual, fue como un ladrillazo en toda la cara – sus ojos están muy abiertos, y yo no puedo evitar soltar una risa.
- No se me da bien guardar secretos.
- Ahora ya lo sé.
- Niall solo conoce Happily.
- Supongo que conoce una Happily acabada, ¿no?
- Sí.
- Me voy a volver loco si no vuelvo a ver lo que me he perdido esta tarde – no sé si hay humor en sus palabras, pero mi sonrisa se mantiene en mi cara.
Entonces una pequeña idea cruza mi mente. Puede que… pueda volver a interpretar yo sola la canción. Sin Niall de por medio. Solo necesito a… Niall. Y la guitarra de Niall.
La mañana siguiente, me despierto sin sueño a pesar de la pequeña interrupción… de una hora. Una vez más me cuesta creer que esta es solo una cabaña de las muchas que pueblan el campus. Es evidente que este tipo de lujo podría pertenecer a una residencia de estudiantes. Aunque en realidad, es eso.
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Our song
FanficMi piel se eriza cada vez que recuerdo esto. Cada vez que recuerdo aquel lugar, mis amigos, aquellas noches, lo que reí, lo que lloré… cada vez que lo recuerdo a él. Pensé que sería un verano perfecto, pero sin duda fue más que eso. A veces, a mi me...