21. Una extraña mirada

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(12 de Mayo, 12:20 PM, departamento de Phoenix Wright)

Casi una semana había pasado desde que Phoenix entró a trabajar como pianista. Los primeros días fueron algo extraños para él, pero con los siguientes comenzó una extraña rutina de tan solo presentarse, tocar las únicas tres canciones que sabía, tomar un descanso e irse a las once de la noche. Dicha rutina tan solo comenzaba a deteriorar algo muy profundo dentro de Phoenix.

Ese día Phoenix y Trucy estaban jugando poker en el sofá. Es algo que a la pequeña le había interesado aprender días atrás.

-Gané.- dijo Phoenix tranquilamente.

-¡Ouh! No tuve buenas cartas esta vez.-

-Es la tercera vez que lo dices. Las cartas que te tocan no son lo único que importa, Trucy.- dijo riendo un poco.

-Tampoco es la primera vez que me dices eso...-

-Aunque me parece asombroso que aprendas rápido como jugar, hasta eres buena.-

(Me recuerda a alguien.)

-¿Tu como aprendiste a jugar, papá?-

Phoenix la mira unos segundos antes de contestar.

-Una amiga me enseñó hace como... cinco meses.- dijo mientras acomodaba las cartas.

-¡¿Una "amiga"?!- dijo interesada.

-Si, incluso una vez ella me ganó quinientos dólares jugando, aunque claro, me los terminó devolviendo.- dijo riendo.

-¿Y solo era una "amiga"?- dijo sonriendo.

Phoenix solo sonríe algo apenado ante la clara insinuación de ella.

-No importa ya. Oye tengo que practicar un poco con el piano, así que ya no podré jugar.- dijo dándole el mazo de cartas.

-¡Pero solo son las doce!-

-Me vendría bien practicar un poco más.-

-Bueno... Quizá así ya no tocarás tan feo.-

-Grosera.- dijo riéndose de sí mismo.

-¡Eso no fue grosería!-

-Lo sé.- dijo aún riendo- tan solo no lo debes recalcar tanto.-

Dijo mientras caminaba hacia su escritorio en donde estaba el pequeño piano, presumiblemente de juguete. Para luego sentarse y tocar algunas notas tranquilamente, aunque también de forma algo lenta. Mientras tanto, Trucy se dirigió a su habitación.

(Hoy es el último día hábil para mí y también en el que me pagarán lo que hice en la semana. Aún con mis cálculos hechos, será algo difícil mantenernos y no debo hacer ningún gasto innecesario... Como este estúpido piano...)

Pensó esto último al tocar una tecla y escuchar que hacia el sonido incorrecto y muy desafinado. Por mero instinto comenzó a presionar dicha tecla repetidamente con la esperanza de que se arreglará por algún motivo místico. Aunque curiosamente, el sonido mejoró un poco.

(Ya está.)

Pero la alegría de Phoenix se vio interrumpida por el timbre de la puerta, y como nadie llamó, se levantó a abrirla para ver de quién se trataba.
Curiosamente era una de las personas que menos esperaba.

Una Vida Difícil - Phoenix Wright Ace Attorney +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora