Desayuno

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Magna Bane, Gran Bruja de Brooklyn, se estiro entre las sabanas, buscando el cuerpo de su novia nefilim de dieciocho años con una runa de resistencia. Al no encontrar el maravilloso cuerpo de su acompañante, Magna abrió los ojos, perezosamente.

-¿Alexandra? ¿Alexa?=-Llamo.

Un amargo y fuerte olor a café inundo sus fosas nasales, y supo entonces que su nefelim estúpida estaba en la cocina.

Se levanto de la cama luciendo únicamente un colotte de color purpura y en letras plateadas y llenas de purpurina la palabra “Sexy” y una camisera de tirantes azul eléctrico.

Camino descalza por el largo pasillo mientras se quitaba las lagañas de la cara con las manos.

Al llegar a la cocina vio a su novia de espaldas a ella, dentro de un horrible chándal que usaba de pijama. Con el cuerpazo que tenia (Y que Magna disfrutaba constantemente) y lo escondía con su espantoso vestuario.

-Buenos días, cielo-Dijo Magna acercándose a Alexa  y rodeándole la cintura con los brazos.

-Hola ¿Qué tal dormiste?

Magna olio la fragancia del largo cabello azabache y enredado  de su nefilim.

-Siempre que duermo a tu lado duermo bien Alexandra.

Alexa se giro, haciendo que Magna soltara su agarre. La cazadora de sombras tenía en cada mano una taza de café. Uno se lo ofreció a su novia y el otro se lo llevo a los labios. Magna agarro la taza y le dio un suave beso a Alexa.

-No te haces una idea de lo hermosa que eres.-Dije sobre sus labios.

Alexa se ruborizo y miro con sus azules ojos, los ojos de gato de Magna con reproche.

-Amo cuando te sonrojas. Amo tus ojos. Amo esa naricita puntiaguda. Amo ese pelo negro tan largo. Amo ese traserito respingón. Te amo-Dijo dejando la taza en la encimera de la cocina y rodeando el cuello de Alexa para atraer su boca. Alexa tardo en reaccionar, pero enseguida comenzó a mover los labios.

Magna metió una mano en la camiseta de Alexa y encontró el cierre del sujetador. Se dispuso a desabrocharlo, pero Alexa se separo de ella, toda sonrojada.

-¿No te parece demasiado temprano para querer tema?

Magna rio. No saco las manos de dentro de la camiseta de su novia. Comenzó a trazar círculos en  su pálida espalda.

-Nunca es demasiado temprano.-Dijo volviendo a estampar sus labios con los de Alexa de una forma mucho más salvaje. La camiseta de Alexa desapareció. Entre besos y caricias llegaron a la cama. Jamás tuvieron que salir de ella. 

Bueno se que es cortito y espero que les alla gustado. Espero que voten y comenten mucho :3 Les amo <3 <3

Girl Version MalecDonde viven las historias. Descúbrelo ahora