Ghost Of You << Luke Hemmings&Calum Hood>> (no terminada)

Capítulo 16

Salí de aquel lugar pensando la mejor manera de decirle a Emma lo sucedido.

"Emma, Álvaro murió", "Ahora tienes un angelito que te cuida, tu amigo Álvaro" NO. Simplemente no podía llegar donde ella y ser tan frío al darle la noticia. Sabía que ella no estaba bien emocionalmente, por lo que debía ser cuidadoso para no herirla más.

Caminé un par de cuadras sin prestarle atención a mi alrededor y me detuve en una pequeña plaza. Me senté en una banca que estaba bajo un árbol, un tanto apartado de todos y miré la hora: el reloj indicaba las 3 pm., ella ya debe estar en su trabajo.

Quería quedarme un rato más, necesitaba hacerlo, necesitaba pensar más las palabras que utilizaría, pero no podía. No quería que ella se enterara por otras personas, así que retomé mi rumbo hacia la agencia, que no estaba muy lejos de donde yo me encontraba, por lo que pude apreciar. Iba con mi vista fija en el piso las imágenes de hace un momento daban vueltas en mi cabeza, y sin querer choqué con alguien, haciendo que yo cayera al suelo.

- Ten más cuidado ¡Idiota! - Levanté mi vista y ahí estaba Calum, Emma no estaba con él.  Me apresuré en levantarme del piso.

- Lo siento. - Iba a seguir mi camino cuando sentí que me tomó del brazo, y giré para encontrarme con sus ojos mirando directamente hacia los míos, estos eran del mismo color amarillo de hace algunas horas atrás.

- Oh, Luke, déjame decirte que no te quiero cerca de Emma.

- ¿Perdón? Ni lo sueñes. -me solté de su agarre. –Ella me necesita, y puedo decir que me necesita más que a ti.

- Por favor –soltó una risa seca- Deberás hacerlo, te guste o no.

- ¿A qué se debe esta petición? – estaba confundido. No había cruzado palabras con él desde aquella discusión. Y no tenía intención de mantener esta conversa.

- Sé que en este momento vas donde ella para contarle lo sucedido con Álvaro. -abrí mis ojos. ¿Él también sabía? Su mirada seguía puesta sobre mí.

- ¿Ella ya sabe? -negó.

- No –esbozó una sonrisa- pero yo que tú me alejaría de ella. –insistió.

- ¿Cómo sabes lo que pasó con él? ¿También recibiste la llamada?

- No, idiota. Sé lo que le sucedió porque -vaciló unos minutos antes de continuar.- porque yo tuve que ver en eso. -dijo sin más, encogiéndose de hombros.

- Tengo más que claro que eres un hijo de #$@%, pero no entiendo a lo que quieres llegar. - Ya estaba haciéndome enojar. ¿Qué tenía que ver eso conmigo?

- Simple. Te alejas de ella por las buenas, o le haré creer que fuiste tú quien mató a su amigo y su novia, ugh. Tu decides Hemmings. -Aquellas palabras cayeron como un balde de agua fría sobre mi cabeza.

- Si le dices eso, no tendrás pruebas en mi contra. –Dije seguro de haberle arruinado su plan, pero él comenzó a reír. Esto no es nada bueno.

- AJAJAJAJJAJA Idiota, se nota que no me conoces… No dejamos huellas o rastros en el lugar Hemmings, duh, por lo que la policía cree que fue alguien que tenía las llaves del lugar o que vivía con ellos.- hizo una pausa. ¿Escuché bien? Osea que él no hizo eso sólo. Michael fue el primer nombre que se vino a mi cabeza. Claro, ahora todo encajaba.- Ellos no saben que pudo haber sido alguien con la capacidad de transformarse en una especie de fantasma que no puede ser visto por personas normales, a no ser que se transforme en una.. y por lo que tengo entendido, Emma sabe de tu condición.. - él esbozó una sonrisa, una gran sonrisa. Esto no puede estar pasando. Ella desconoce que Calum y Michael tienen esa habilidad también. Mierda. Sabía que debía haberle comentado de eso cuanto antes.-  y me extraña que pienses que puedo ser tan estúpido como para cometer errores en mis planes. –Hizo un puchero. Yo estaba serio, esto debe ser una broma, ¿verdad?

- Ella no te creerá.

- ¿Estás seguro? … Luke, Luke, Luke. –dio unos pasos hasta quedar a mi lado, y pasó su brazo por sobre mi hombro. – Soy su novio, sé cómo manejar la mente de Emma y hacerle creer lo que yo quiera. –Insistió- es tu decisión. Quieres ir a decirle y que ella te termine odiando por algo que no hiciste, o…

- O me alejo –asintió.

- Te alejas sin darle alguna explicación. Ni pistas, ni nada. Si decides marcharte, y tratas de decirle la verdad, yo le contaré mi versión de las cosas y veremos a quien le cree. Tu decides.