ʟɪᴛᴛʟᴇ ʜᴏʀɴs《ʙᴇᴍɪʟɪᴀ》

[ d é c i m o s e x t o c a p í t u l o ]

Emilia soltó un quejido mientras se sentaba en la cama

—¡Hasta que te despiertas!— gritó Jim haciendo que Emilia llevara rápidamente sus manos a sus oídos —Vamos Emi, levántate, ya es lunes

—Odio que el fin de semana pase tan rápido— bufó levantándose y yendo hacia su toalla

—A mí no, ¡las clases son divertidas!— Emilia la miró raro y tomó su cepillo dental para ir al baño

Se lavó los dientes, se bañó, se colocó su uniforme, acomodó un poco su cabello lacio que decidió dejar suelto y salió junto a Jim de la habitación después de tomar su mochila

—Días, chicas— saludó Luna llegando con Yam y poniéndose junto a Emilia —Porque buenos no son

—¿Ahora qué pasó?— preguntó Emilia un poco fastidiada

—¿Cómo es eso que no iremos a la primera media hora de Historia de Ángeles por escucharle la boca al angelito de papi?— Luna rodó los ojos

—Oh cierto, hoy es la asamblea— Jim sonrió emocionada —Ámbar va a decir la temática del baile de bienvenida

—¿La qué del qué?— preguntaron Emilia y Luna al unísono atónitas

—La temática del baile de bienvenida— respondió Yam —Todos los años hay uno y la directora del comité que en éste caso es Ámbar elige una temática para que no sea tan aburrido, pero igual lo sigue siendo

—Como cualquier baile escolar— obvió Emilia

—¿Por qué son tan amargadas?— Jim hizo un puchero —Ya verán que se van a divertir

—Lo dudo mucho— la castaña ojiverde le sonrió falsamente a la pelirroja

Las chicas llegaron a la puerta del auditorio donde habían varios chicos afuera sin muchas ganas de entrar, pero ellas querían buenos puestos así que entraron

—¡Vaya! Ámbar sí que tiene buenas ideas— la halagó Simón después de que Matteo le contara todas las ideas que tuvo anteriormente la rubia en bailes no sólo de bienvenida

—Sí, es una chica muy creativa, y tiene una debilidad por organizar eventos así que eso la mantiene entretenida— Matteo se encogió de hombros —Aunque es muy mandona

—Ya lo creo— rió por lo bajo

Matteo recorrió su vista por el lugar a ver si veía a Emilia pero no la encontró, así que miró a Simón —¿Entramos de una vez? Quería guardarle un puesto a las chicas y a Gastón

—Ve tú— accedió Simón —Yo esperaré a Nico

Matteo asintió y entró al auditorio, mientras que Simón se recargó en la pared buscando a su amigo rubio con la mirada, pero lo que ganó fue conseguirse con Ámbar quien hace poco iba viendo su espejo hasta que levantó la vista y cuando su mirada chocó con la de Simón paró en seco. El morocho caminó hacia ella haciendo que Ámbar sintiera los nervios apoderarse de ella

—Hola— saludó Simón sonriéndole

—Hola— Ámbar lo saludó de vuelta sólo que con un ademán —¿Por qué no has entrado? Ya casi va a comenzar

—Es que Nico me envió un texto pidiéndome que lo esperara afuera— ella asintió comprendiendo —Y... ¿ya estás mejor?

—¿De qué hablas?— preguntó enserio confundida

—Puede que tenga una semana apenas de conocerte, pero me dí cuenta que el otro día en la fiesta estabas rara, así que pensé que te sentías mal o algo...