Vestigios

132 11 1
                                    

— Ahora dime, sin hacer nada, ¿Cómo recuperarás todo, imbécil?

— Tengo maneras de actuar más prudentes y no como un psicópata que invierte en destruír un canal entero, sin saber si allí está la persona con el USB.

La discusión entre los compañeros no parecía que cesaría en poco y sus acompañantes lo sabían, así que más que preparados estaban por si aquello que eran sólo palabras terminaban pasando a puños, o peor, a disparos. Ambos estaban armados y cada uno poseía una sangre helada, que no ponía en duda ese tipo de actuar.

— Si no fuera por tu imprudencia, Heo estaría vivo ahora mismo.

— Cumplió con su deber, algo que tu deberías hacer por tu maldito país.

— ¿Qué cumplió? Porque no he visto ningún maldito avance.

— ¡Es suficiente! —Uno de los acompañantes se levantó de su asiento para poder meterse entre los contrincantes— Ponerse a discutir como niñas no va a solucionar nada. En algún momento la persona que tiene el dispositivo va a cometer un error y podremos dar con ella, ningún maldito ciudadano de ésta nación es tan perfecto como se pintan.

— Trata de hacer a éste tonto entender eso. —Se miraron con un odio infernal, pero la mirada de ambos volvieron a observar a su tercer compañero.

— Paciencia, los surcoreanos son unos tontos...


.


Una carcajada salió de los labios de la periodista, mientras el rescatista no dejaba de observarla con una sonrisa un poco más expresivas que las habituales. A veces distraerse de todos los problemas que les rodeaban no era nada malo y a ____ (Tn) le hacía muy bien distraerse, siendo consciente de ello, aceptaba los muy malos chistes del joven de cabellos azabache y reía porque, por una extraña razón, esos chistes tan malos le causaban risa.

— Dices que son malos, pero te ríes.

— Siguen siendo muy malos. —Sus miradas se conectaron por unos segundos, pero luego del primer pestañear, ambos tomaron campos visuales distintos para no terminar siendo obvios el uno con el otro.

— ¿Qué harás el resto del día?

La castaña se quedó por unos segundos en silencio mientras vagaba por sus pensamientos, buscando qué palabras decirle al chico que le acompañaba, mostrando una expresión natural en su semblante. Un par de segundos más tarde, giró su cabeza para poder encontrarse con el rostro ajeno y dedicarle una suave sonrisa.

— Posiblemente adelante trabajo para mañana. Ahora que el canal volvió y que éste fin de semana lanzaremos el primer episodio del noticiero, pues... Estoy nerviosa, entusiasmada y no sé por donde empezar.

Esas palabras podrían ser ciertas, pero lo que ocultaba es que, no iba a estar tan centrada en la investigación para las próximas noticias del canal, después de todo era buena adelantando trabajo durante sus horas laborales, aprovechando incluso las de descanso. Su intensión era sumergirse más en el caso, en ese USB y en visitar esos sitios que marcaban los archivos que había descubierto tras tantas lecturas, repasos y análisis. Debía encontrar algo más de lo que hasta ahora tenía en mano.

Luego de ese almuerzo, ambos decidieron retomar sus labores personales. JaeBum debía volver a la estación y ____(Tn) ir a casa a seguir en lo que su mente no dejaba de repasar, recordándole segundo tras segundo, que en manos tenía algo muy importante que debía averiguar.

Apenas llegó a casa, dejó sus pertenencias sobre la mesa del comedor y se dirigió a su alcoba, buscó su portátil y volvió al salón de estar, asegurándose que ninguna de las cortinas de la ventana estuviese abierta. Si iba a trabajar en algo peligroso, debía asegurar su privacidad y una vez se sintió tranquila, tomó asiento en el sofá más espacioso para abrir de nuevo cada archivo, al tiempo que mantenía activado el programa que evitaba fuese capturada la ubicación del USB.

Rescue Squad [JaeBum y Tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora