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Óscar Gutiérrez

Ojalá alguien le hubiese advertido lo que sentiría al verla, parecía que cada parte de su ser la sentía, le dolía, le retorcía. Pero no pudo decir nada de lo que sentía, porque lo único que salió de sus labios, fue recelo, odio, y dolor. Jamás imaginó que le dolería tanto, porque no le importaba estar imposibilitado de libertad, le sacaba de quicio no poder contar con ella. Cuando le habían anunciado su visita, parecía que todo su cuerpo se exaltó de emoción, pero todo se desvaneció. La lucha con su interior fue más fuerte que su engañoso corazón, que lo único que deseaba era besarla hasta cansarse de ella.

Y ahora estaba caminando a la pequeña celda, con los labios cosquilleando del beso apasionado que ella le había dado, quería reír y llorar, gritar y saltar. Pero no hizo nada. Simplemente entró en silencio, y se sentó en la cama. Con un tormento de pensamientos contradictorios, lo único que quería, era estar seguro de lo que diría el día lunes.c nnfdxx

Al pensar en el abogado que lo defendía casi le da ataque al verlo tan cercano, y amable con Elisa. Pero si quería alejarse de ella, debía al menos intentar aparentar indiferencia.

Pero olvidarla... ese era otro cuento, si con verla con el rostro abatido y lleno de culpa, sintió que podía perdonarla sin pensar siquiera en todo lo que le había dicho. Pero ante el orgullo inminente, y el dolor que le oprimía el pecho, no podía hacer nada. Sólo esperar que el tiempo sanara esa herida, y algún día pudiera mirarla sin que el corazón le palpitara de esa manera, y sus manos cosquillaran con deseos de abrazarla nuevamente.

***

El día lunes llegó y todo su cuerpo estaba descompuesto, no había podido comer, ni beber agua. Todo lo vomitaba, se sentía débil y nervioso, todo dependía de ese día.

Se afeitó su linda barba, y pareció adelgazar unos cinco kilos esas dos semanas, porque el mentón se le notaba más de lo normal, y sus ojos parecían ojerosos y oscuros. Al parecer hasta años se había quitado con la afeitada, pero se sorprendió del apoyo entre los gendarmes que lo vigilaban.

"Todo va a estar bien, Óscar."

"Vas a salir de ésta."

"No te des por vencido."

Sin Fronteras [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora