Regrese a la habitación luego de mi última clase. Recién salía de Matemática y había sido un día algo pesado. Entre y deje mi bolso con mis cuadernos y libros en mi cama.
-¡Hola compañera!- oí a Colton hablar desde su cama.
Alce mi vista y la vi en su cama escuchando música mientra leía una revista.
-Hola Colton, no me había dado cuenta de que estabas aquí-
-Lo se- río un poco -Parecía que solo querías llegar a la cama - cerró la revista y me miró con una sonrisa -¿Día difícil?-
-Si, casi no me gustaron las materias que tuve hoy, nunca fui buena en las ciencias exactas-
-Te entiendo, lo mío son las ruedas no los números-
Me reí con ella unos minutos y luego recordé la lista de libros que tenía que tener para algunas materias.
-¿Sabes donde hay una libreria? Tengo una lista de libros para algunas materias-
-¿Librería?- vi como sonreía y luego se ponía sus patines rosas -Ven conmigo linda- y con eso anduvo hasta la puerta y salió por ella.
(...)
Camine a su lado por unos minutos luego de salir del ascensor mientras charlabamos de temas tribales hasta que llegamos a unas puertas dobles de madera las cuales ella empujó y me encontré con una enorme biblioteca.
-Esta es la biblioteca del internado. Aquí vienes cuando los profesores te piden algunos libros o cuando tienes ganas de leer algo- me guío hasta un escritorio donde estaba una chica de lentes concentrada en su computadora -Hola Jessica- la saludo.
La chica la miró y sonriendo se sacó sus lentes para mirarnos.
-Hola Colton y...- entendió su mano invitando a que le dijera mi nombre.
-Bridgit- le dije.
-Bridgit- repitió ella -¿Que necesitan?-
-Ella tiene una lista de libros que necesita para las clases. Es nueva-
-Esta bien. Déjame ver esa lista-
(...)
Luego de unos minutos, con la ayuda de Jessica, tuve todos los libros en mis manos, eran como siete, algunos más gruesos que otros. Jessica hizo que firmará un papel que me hacía responsable de los libros hasta que los devolviera y me dio una copia.
Salí por las puerta que para mi sorpresa eran más livianas de lo que creía.
Caminaba por los pasillos hacía el pequeño ascensor por el que viene con Colton. Los libros casi tapaban mi vista y lo peor fue cuando sentí que pisaba uno que se había caído y casi pierdo el equilibrio pero gracias a un chico no pasó. El me sostuvo.
-Creo que hubiera sido un desastre si te caias con todos esos libros- oí que decía mientras se bajaba para levantar el libro caído. Pude ver su cabello rojo y su buzo azul.
Cuando se enderezo este quito un mechón de cabello de su cara y me miró extendiendo el libro.
Yo lo había visto una vez, pero no recordé donde. Mire sus ojos azules y recordé la foto que Kenny me había dado en el avión de Marco.
Recordé a papá y su preocupacion al decirme que debía tomar la decisión de enviarme lejos porque este hombre era muy peligroso.
Y ahora lo tengo enfrente. ¡Esta aquí!
-¿Hola? ¿Estas bien?- me pregunto y se acercó a mi. Retrocedi un poco asustada y él se seguía acercado a mi.
Tal vez él era el que me había golpeado en la feria ese día. Recordé esa noche y la voz que me había hablando y era casi igual de gruesa que la de él. La piel se me erizo por completo igual que esa vez y di un salto del susto cuando mi espalda llegó a chocar con la pared.
Me dolió un poco el golpe y él se dio cuenta. Se acercó rápido a mi y eso me asusto. Grite y tiré los libros al piso.
-¡Ayuda!- grite lo más fuerte que pude.
-¿Por qué grit...?- se acercó a mi intentado callamerme.
-¡No me toques!- dije y lo empuje. Grite otra vez. Busque mi teléfono en mi bolso y me empecé a desesperar cuando no lo encontré.
Habia empezado a correr cuando escuché como alguien tosia. Me di vuelta y vi como el chico no paraba de toser. Parecía que tenía un ataque.
Lo vi, en un intento desesperado, tirar su mochila al piso y buscar entre sus cosas. Unos minutos después el caia al piso.
Yo no lo pensé dos veces y me acerqué a él y vi que su rostro no tenía color y su pecho hacía un ruido extraño cuando trataba de respirar. No podía contener el aire.
No supe que hacer en este caso, nunca me había pasado. Vi sus cosas tiradas y fui a buscar entre ellas y a lo lejos vi un inalador rojo y entendí, tenía asma.
Estaba teniendo un ataque de asma.
Corrí hasta el inalador, lo tome y volví con el chico en el piso. Lo puse en su boca y presione un par de veces. Luego de eso el tomo un respiro profundo y tomo el inalador, se sento en un movimiento rápido que hizo que yo me parara y empezará a recoger mis cosas.
Cuando tuve todo corri como pude al ascensor y subí en el.
No podía pensar en otra cosa que no fuera el chico. Tenía que ir a la habitación a buscar esa foto para ver si era el.
Pero si resultaba ser el, debería llamar a papá o a Kenny. Tendría que irme de nuevo porque si me quedaba quizá estaba aquí para secuestrarme o hacerme algo.
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La Hija De Justin Bieber
Teen FictionBridgit Bieber Hija unica del cantante canadiense de 44 años, Justin Bieber. Hermosa al igual que su padre con solo 16 años. Ojos mieles, cabello color caramelo, dos oyuelos muy bien definidos a la hora de sonreir, rostro parecido al de una muñeca...