La Hija De Justin Bieber

Capitulo 12

Seguí mirando la foto que tenía en mis manos. No era él. Osea había parecido entre estos chicos pero el chico del pasillo tenía el cabello más corto y no tenía la misma cicatriz que tenía el chico de la foto.

Había parecido pero la foto del tal Marco me mostraba a un chico quizá metido hasta el cuello de drogas, una persona que cuyos ojos desteñian maldad y odio, con el cabello despeinado y unas ojeras demaciado marcadas. El chico del pasillo tenía una mirada muy amigable, lentes gruesos negros, el cabello más lacio y no tenía ningún tipo de cicatriz o marca.

Quizá me había confundido y asuste a ese pobre chico por nada. Jamás me perdonaría si resultaba ser cierto que por mi el había tenído ese ataque.

Escuché como una llave entraba en la cerradura de la puerta y guarde rápido la foto abajo de la manta que cubría mi cama.

Mire a Jenna que venía hablando por teléfono y cuando esta me vio solo me sonrió y me señaló su teléfono.

-Esta bien nos vemos en la fiesta... Adiós- fue lo último que dijo antes de mirarme sonriendo.

-Hola- dije yo.

-Vistete niña ¡Hoy saldremos!-

-¿Como? Yo estaba por irme a mi casa por el resto del fin de semana-

-Bueno puedes ir mañana, hoy saldrás con nosotras-

Y con esto corrió hasta su armario para empezar a sacar ropa y más ropa.
Supuse que no tendría opción así que me levanté y fui al baño para ducharme.

(...)

Salí del baño ya vestida para ir a la fiesta:

Cuando salí por la puerta me encontre con mis compañeras de cuarto. Vi como Colton entraba al baño con una toalla, ropa y el cabello atado en un moño.

Me disponía a secar mi cabello cuando mire rápidamente a mis amigas. Todas estabas vestidas con jens, zapatillas, tacos altos, vestidos ajustados y maquillajes oscuros.

Me sentí un poco fuera de lugar cuando me mire al espejo. Trate de maquillarme de la misma forma pero no quedaba con mi atuendo así no lo hice tan exagerado.

(...)

-¿En qué vamos?- dijo Lusbell tomando un bolso de su armario.

-En mi auto- dijo Jenna agitando sus llaves.

Y así salimos todas de la habitación. Salimos por las puertas grades y caminamos por el estacionamiento. Subimos a un auto negro bastante grande cuyo modelo no conocía.

Jenna condujo unos kilómetros hasta que llegamos a una casa atestada de gente. Cuando salimos del auto pude ver de cerca como estaban vestidas todas las personas y si en la habitación me sentí fuera de lugar por mi vestimenta aquí fue mucho peor el sentimiento. Todos estaban vestidos con ropas oscuras u opacas y una vez adentro todos me miraban.