Go Seabrook! ||♡Bucky♡|| EN EDICIÓN || Disney ZOMBIES

Capítulo 12

¿¡Castigo!? ¿Escuchamos bien?

Mientras me estaba debatiendo entre el sí y el no castigo, unos tacones resonaron en la cafetería. La directora Lee, había entrado muy furiosa... en lo poco que llevo aquí, nunca la vi enojada.

-Muy bien, alumnos. ¿Quién fue el responsable?

Los animadores volteamos a ver a los zombies, mientras que éstos, a nosotros. Pero lo peor, fue que la rectora posó su vista en mí.

-Señorita Spencer- dijo seria. -A tí te creo. ¿Quién inició?

Ahora todas las miradas me atravesaban buscando una respuesta. Técnicamente, la que había iniciado era yo. Pero si ese zombie no me llamaba "bruja engreída", no lo habría hecho. Bueno, ¿querían guerra? La tendrán: estas son las reglas del juego.

-¿Y bien?- Insistió la directora.

-Bueno...- le dediqué una sonrisa maliciosa a Zed. Luego me dirigí nuevamente a la señora Lee. -Yo estaba caminando por la cafetería, como siempre. Juro que no hacía nada más que dirigirme a mi mesa. Hasta que- me detuve en una pausa exageradamente dramática -¡los zombies comenzaron a agredirme!

Jaja, sí. Los peliverdes comenzaron a insultarme y a gritar. Mentía. Sin embargo, esto es así.

-¡Silencio!- Exclamó la directora. -Continúa, por favor.

-Bien. Luego de que me llamaran "bruja engreída", sin razón aparente, vertieron sobre mí jugo de uva. Mis amigos animadores, quisieron defenderme buscando la paz- okay, sí. Estaba actuando demasiado. Llámenme reina del drama. -¡Pero a ellos también los comenzaron a llenar de comida! Si no fuera por Bucky, que me sacó de ahí, estaría totalmente...

-¿¡En serio se está creyendo eso, rectora!?- Interrumpió Zed, furioso. -Que miente se le nota en la cara.

-¡Oye, no te metas con mi novia!- Retó Bucky, mientras me acercaba a él.

-¡Pues tu novia se metió primero con nosotros!- Ahora intervino Eliza.

-¡Cállate, "botitas"! Danna no hizo nada.- Wow, Lacey me defendió.

-¡A ver!- Addison gritó. -¡Ya paren! ¡Ambos lados fueron culpables, acéptenlo!

-¿Entonces te adjudicas la culpa, Addison?- Preguntó Lee.

-¡No, por supuesto que no!- Respondió.

-Deberíamos hacer lo más justo...- Habló Bucky de nuevo. -¡Expulsar a los zombies!

Agh. Era un caso perdido. Lo amo, pero, ¿por qué no aprende a cerrar la boca?

-Debido a las circunstancias, y como no sé en quién confiar, haremos lo más justo. Bien dicho Bucky- él sonrió y me guiñó el ojo. -Castigo para ambos.

-¿¡Qué!?- Protestó sorprendido.

-Castigo para Bucky y Danna, por presunto engaño; y para Zed y Addison, porque indirectamente se han echado la culpa. Los espero en el salón 76 desde las cuatro hasta las siete. Y no se irán, hasta que de esa hora.

Seguimos discutiendo otro rato. Finalmente, nos dimos cuenta de que no tenía sentido y nos resignamos a aceptar el castigo. ¿Qué más haríamos? Bueno.

Entramos a la sala, donde nos esperaba la rectora. La parejita "algún día", ya estaba ahí.

-Buenas tardes, nuevamente.- Saludó la rectora. -Tengo demasiado trabajo, así que haremos esto rápido: yo me iré y los dejaré bajo llave hasta las siete. Ustedes no harán más que quedarse aquí e intentar llevarse bien. ¡Ese es el propósito! ¡Animadores y zombies deben, repito, deben ser amigos!- Y se fue.

¿De verdad acababa de pedirnos eso?

-Lee tiene razón.- Dijo Addie desde su asiento. -¿Por qué no podemos relacionarnos como gente civilizada que somos?

-Porque no todos son gente civilizada, ricitos de oro.- Hablé yo. -Eso no es gente.- Señalé a Zed.

-Tú tampoco- devolvió él. -Es decir, eres humana, sí. Pero no tienes corazón.

-¿¡Disculpa!?- Grité saltando de mi silla. -Si no tuviera corazón, no te habría acompañado en el duro camino de intentar conquistar a Addison. Si mal no recuerdo, ni siquiera tu querida Eliza te apoyó con tu romance. Y yo sí.

-Espera, ¿qué?- Dijo Bucky confundido.

-¿Ella te ayudó?- Regañó la rubia.

-¿¡Tú lo ayudaste!?- Seguía preguntando, el ignorado animador.

-Pero en realidad no quise salir con Addison. ¡Lo hice porque era obvio que tú no me querías! ¡Me enamoré de tí, Danna! Sin embargo, resultaste malvada, mentirosa e igual que él- señaló a Bucky. ¿Qué acababa de decir? Me quedé helada.

-¿¡Ayudaste al adefesio!?- Insistió mi novio, furioso. -Un momento... ¿tú eras amiga del zombie, a mis espaldas?- Pensó un segundo. -¡Otro momento! ¿¡Tú estabas enamorado de Danna?!

-¿Yo no te gustó?- Preguntó una quebrada animadora.

-¡Por supuesto que sí!- Intentaba remediar el peliverde. -Yo te quiero mucho. Y me di cuenta ahora. Sólo que antes me fijé en la persona equivocada.

-Zed, estás mintiendo.- Dije por fin. -Cantaron juntos, vi cómo la mirabas. Nunca estuviste enamorado de mí.

-Se llama actuar, Danna. Algo que tú sabes muy bien.- Eso me hirió. Más por Addison que por mí.

-¿O sea que antes, tu "amor" por mí no era real y necesitaste probar si la novia de mi primo era la chica indicada? ¡Creí que lo nuestro era en serio!

-¡Lo es!- Gruñó. -¿Ves lo que provocas? ¡Me hiciste escupir algo que jamás habría dicho!

-La verdad es que yo no sé cómo sentirme.- Bucky estaba triste. -Siento decepción, traición. Y en serio te amo, Danna Spencer. Creo que no estamos listos para esto. Lo nuestro se acabó.

-¿¡Por qué!?- Grité desesperada. -¡Jamás sentí nada por ese tonto!

-Lo sé, porque soy el mejor. Pero me traicionaste, no me contaste que tenías una amistad con él. No puedo estar con alguien que mantiene relación con un zombie. ¿No te das cuenta de lo que hiciste?

-Bucky, perdóname.- Tomé su mano. -Debí haberte dicho, ¿sí? Más no podemos terminar por esta estupidez.

-¿Ah no? Ya lo hicimos.

Pasaron los eternos minutos. Intentaba ahogar mi llanto, más era casi imposible. Al llegar a mi casa, luego del castigo, lo único que hice fue llorar.

Esa había sido la noche más triste de mi vida.