Capítulo 16

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Supongo que me encontraba muy ocupada llorando, como para prestar atención al partido. Por lo poco quo escuché a través de los altavoces, el resultado se estaba revirtiendo a nuestro favor.

Justo cuando iba a alegrarme fervientemente por mi amigo, Zed, se escuchó todo un escándalo. Gritos, gente corriendo, un desastre: las zombie-bandas habían sido alteradas de más. Tanto él, como Bonzo y Eliza, se transformaron en verdaderos monstruos. Entiéndanme, no es que considere que lo son, he progresado mucho desde que los zombies llegaron. Sucede que es raro verlos de un modo tan aterrador.

Abandoné mi lugar oculto, y salí a ver qué ocurría. Me quedé perpleja al notar que intentaban atacar a las personas. Mentiría si dijera que ni por un momento, siquiera, sentí miedo. Aunque sabía que jamás nos harían daño. Ni siquiera a quienes los odiaban. Como a...

-¡Bucky!- Gritó Lacey.

-¡¿Qué sucede con él?!- Le pregunté preocupada y sacudiéndola.

-¡Hasta hace un minuto lo odiabas!

-¡Dime qué ocurre ahora, Lacey! Y te advierto, no voy a tolerar ninguna otra de tus payasadas. ¿Está él en peligro, o no?

Había mirado fija y densamente a la tontuela. Creo que luego de ello, las cosas quedaron claras. Pues, no volvió a molestarme.

Tragó en seco, y respondió apurada. -¡Zed va a comerse su cerebro! ¡Está por allá!

Me apresuré a correr en la dirección que Lacey me indicó. Okay, okay, hora del momento antidramítico de Danna: mientras lo hacía, pensaba "está fuera de peligro, no tiene cerebro". Como dije, sabía que Zed no iba a hacerle nada, pero desconfiaba de Bucky. Es horrible llegar al punto en que te das cuenta de que los humanos, somos los verdaderos monstruos.

Llegué hasta donde ambos estaban. Bucky había caído en el lodo, y se encontraba a merced del brocolito. Dicho así, no suena aterrador. Pero, ustedes entienden.

-¡Zed, alto!- Lo tomé del brazo e intenté arreglarle la banda. Sin embargo, la fuerza que le confería su forma natural era demasiada, y consiguió tirarme al suelo también. Justo a un lado del capitán animador.

Instintivamente, él se interpuso de forma protectora entre Zed y yo, pese a que estaba más asustado. Afortunadamente, vino Addison, que también intentó detenerlo, en vano. Seguidamente, apareció un policía, que consiguió devolverle su apariencia humana con un choque eléctrico.

-¡No!- Exclamamos las dos al unísono. Addison, entre lamentos y súplicas, los siguió hasta afuera.

-¿Estás bien?- Dijo casi en un murmullo, a mis espaldas.

-Sí, ¿tú lo estás?- Respondí, todavía nerviosa por el destino de Zed. Él asintió con la cabeza y extendí mi mano para que él la tomara.

Una vez de pie y frente a frente, todo fue bastante incómodo.

Bucky rompió el hielo. -Quisiste salvarme.

-Claro que sí. Bueno, en realidad, era al revés.

-¿Eh?

-Zed o ninguno de los zombies jamás...

-¡No puedo creerlo!- Liberó una risa socarrona -ibas a decir que no nos lastimarían, ¿no? Si fuese así, entonces nunca los hubiesen aislado de Seabrook.

-Bucky, ellos han logrado adaptarse. Algo fue lo que alteró sus zombie-bandas. De otro modo, este descontrol no hubiese tenido lugar.- Él me miró obvio, y todo se aclaró. -Algo, o alguienes... fuiste tú ¿no? Tú y los Acey's organizaron esto.

Go Seabrook! ||♡Bucky♡|| EN EDICIÓN || Disney ZOMBIESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora