Fictober [Yullen]

11. I listen to you

Advertencia: Infancia y recuerdos.

(ლ╹◡╹)ლ

Cada vez que te escucho vuelvo a temblar y me vuelvo a enamorar de ti una y mil veces más, que el día anterior.

Sabía que escuchar no era lo suyo siempre se iba dejando a las personas con la palabra en la boca pero desde que llegó cierto pequeño albino a su vida.

Desde temprana edad desarrollo un carácter uraño y frío con todas las personas, solo con su abuelo podía estar tranquilo aunque después de un tiempo tuvieron que mudarse a Inglaterra por el nuevo empleo de su abuelo al principio no lo acepto, no quería dejar la casa donde se crió con sus padres.

Al estar ordenando y acomodando para vivir ahí un joven castaño se asomo para darles la bienvenida al vecindario con el había un dulce niño albino oculto detrás de las piernas de su progenitor.

—Saluda Allen no quieres ser descortés con los nuevos vecinos ¿o si? —cuestionó su padre.

—Oh! No se preocupe mi pequeño Yuu también suele ser así. —rió su abuelo.— aunque parezca de 10 años es un poco arisco con las nuevas personas.

Ambos adultos se llevaron de maravilla, invitaron a que después de ordenar y acomodar podrían venir a tomar una taza de té para conocerse mejor y presentar a su esposa mientras lo niños jugaban.

Luego de meses de relación fueron de visita a la casa de Mana su vecino, se encontraron con un chico de ojos miel que los recibió con alegría de volver a verlos, su pequeño hijo estaba pintando tranquilo en la sala.

—Dejemos al pequeño Kanda con Allen para que se conozcan y nosotros pasamos a tomar un poco de té.

El pequeño Yuu fue empujado a la fuerza donde se encontraba el albino dibujando y coloreando feliz. No sabía que decir no le gustaba hablar con  otros niños de su edad siempre estaba solo por su carácter pero el pequeño albino no lo entendería para dejarlo solo.

—¿No quieres jugar conmigo? —preguntó inocente el infante para levantarse y tomar las manos del azabache.

El pequeño se quejo por lo inocente que era, lo llevo a jugar con todos sus juguetes y a saber como llegaron a la segunda planta.

Y por primera vez escucho una dulce risa del albino lo observó detenidamente hasta verlo avergonzado.

Pudo observar el ligero rubor en las mejillas pálidas del albino preguntándose si se sentía mal se acercó para posar una mano en su frente y comprobar si estaba mal.

—D-deja eso

—No parece que tienes fiebre moyashi

El pequeño albino de ahora 12 años trataba de articular las palabras concretas para explicarle a su amigo azabache. Lo vio correr por una cajita envuelta descuidadamente con papel azul oscuro y una cinta roja.

—Yo quería darte esto

Vio con curiosidad el regalo preguntándose que había en esa caja.

—Siempre estas para mi desde que llegaste tu me escuchaste y protegía te de el bravucón de Chaoozi por eso quería darte mis agradecimientos.

Sonrió solo para él y lo abrazo fuertemente contra su pecho sabía que el pequeño lloraría en cualquier momento y él tampoco podría verlo llorar.

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Escuchaba que lo llamaban y lo movían suavemente, al abrir los ojos se encontró con la mirada dulce y una sonrisa en sus labios de su novio.

—BaKanda te quedaste dormido mientras te hablaba.

Pudo ver como le apretaba la mejilla sacándolo un quejido, apartando la mano de su cachete la beso y escucho la dulce risa de su albino.

—Sabes moyashi cuando cierro los aún puedo escuchar tu dulce risa.

Observó las mejillas sonrosadas de su pareja y volvió a cerrar los ojos  e imagino la sonrisa de Allen.

ლ(╹◡╹ლ)

Si no hay escusa dije que esto lo iba a publicar ayer pero me quede dormida y no pude ni hacer mi tarea. Ya lo tenia escrito hasta la mitad pero no lo publique por que no tenía megas TwT

Ahora si pueden pegarme *se esconde* gracias por su apoyo uwu
Espero y les haya gustado y si no hablen? El siguiente capítulo les encantará yo creo *risas* por que me esforzaré mucho como en todos solo que tendrá mucha dulzura que tendrán diabetes xdxd

Nos vemos en la noche~

Los quiere Anabel ♡